- Mi deseado Rolthos... me temo que ya no estoy en disposición de poder ayudaros... y me temo que sólo podéis culparos a vosotros mismos... ¿no os pedi, os supliqué, que no liberárais a la bestia? Ya visteis cómo quedó mi pobre palacio... ¿y dónde está ahora? ¿hmmm? -levanta una ceja - No hace falta que me lo digáis... vuestras caras lo dicen todo queridos... -
Niega con la cabeza y su cabello cae como una cascada medio ocultándole el rostro.
- Qué podríamos hacer me pregunto... yo tengo que llevarme a mis fieles siervos... - la inflexión en la palabra fieles parece un dardo que se clava en Idab, el cual no puede evitar tensarse - ... y a Ashrem, pobre anciano, que desconsiderado por vuestra parte abandonarlo en este lugar... ¿no creéis que ya ha pagado por sus pecados pasados? El pobre sólo necesitaba algo de compañía y comprensión y.. comida.. .- su gesto casi adopta un aspecto maternal - está muy mejorado deberíais verle... la cuestiíon es que con mis poderes limitados no podré llevaros a todos... necesitaría algo que me ayudase a potenciar mi magia... -
Nessa enarca las cejas ante la desfachatez que va destilando cada una de las palabras de la efreeti.
- Desde luego ese sería un plan sin fisuras, ¿verdad, Shideh? Primero haberte librado del Thane sin tener que mover un dedo, y ahora conseguir la gema que guardaba de sólo con pedirlo. Y todo ello para poder salvarnos a nosotros. Alabo tu maestría, mi señora, así como tu preocupación por nuestro bienestar.
La ranger calla unos instantes, y mira en derredor.
- La verdad es que me gustaría ver al clérigo una vez más. ¿Estás por aquí, Ashrem? - dice, preguntando al aire - ¿Por qué no te unes a la conversación? No me gustó la idea de que te quedaras atrás cuando no acudiste a la cena con nuestra anfitriona y tuvimos que salir huyendo de la destrucción del palacio. Pero me alegra escuchar que ahora estás bien. Porque eso significa que tu elección de aliados habrá mejorado considerablemente desde que los anteriores decidieran encerrarte en el semi-plano de aire hasta llegamos nosotros y empezamos a abrir las puertas.
Tras decir esto, la ranger lanza una mirada a Idab. Idab, que les había dicho que no movería un dedo por dañar a Shideh. Idab, que no había dicho nada al respecto de dañar a otros aliados de Shideh. ¿Les ayudaría la salamandra al menos contra el clérigo, que a todas luces se uniría a la efreeti en la pelea que la ranger ya no tenía duda alguna que iba a acabar sucediendo?
Nessa vuelve a fijarse en Shideh. Aunque estaba segura de que no quería darle la gema, ni confiaba en que alguien como ella no fuera a dejarles abandonados si cruzaban con ella al plano elemental, había algo más en sus palabras que no terminaba de cuadrar.
- Algo me dice que no estás contándonos todo, Shideh. Y no es algo sobre el pacto que propones. No me cabe duda que los pactos son importantes para ti. Pero hay algo más, ¿verdad? ¿Qué es lo que no nos estás contando?
- Ahsrem no está aquí querida... está reposando y recuperándose en sus aposentos en lo que queda de mi palacio... al menos ahí estará a salvo, pobre criatura... - es difícil saber si su tono de preocupación es fingido o real - qué fácil decir ahora que no le querías dejar atrás... pero si no aguantas al pobre hombre, al menos ten la decencia de ser honesta... -
Hace una pausa, mirando reprobatoriamente a la ranger antes de continuar.
- ¿Crees que quiero la Gema? jajajajaja no gracias querida pero no. No tocaría ninguna de sus cosas, ni siquiera yo soy tan ambiciosa... ¿porqué crees que se la di a ese imbécil del Thane? Cuando Él vuelva prefiero no tener nada suyo, gracias. No... yo estaba pensando más bien en esos objetos que habéis recuperado - dice señalando la daga que Nessa lleva ahora en el cinto - Dos de ellos bastarán, podré utilizar su magia para potenciar la mía y lograr sacaros de aquí. ¿No es un buen trato? ¿ Acaso no soy magnámina? Un par de baratijas por vuestra libertad. Pensadlo bien... -
Cuando Nessa le increpa que hay algo que no les está contando la efretti hace un mohín divetido.
- Querida, vuestra ignorancia es tan grande que necesitaría un mes sólo para decidir por dónde empezar a educaros... pero no estoy de humor para eso... -
- Ahsrem no está aquí querida... está reposando y recuperándose en sus aposentos en lo que queda de mi palacio... al menos ahí estará a salvo, pobre criatura... - es difícil saber si su tono de preocupación es fingido o real - qué fácil decir ahora que no le querías dejar atrás... pero si no aguantas al pobre hombre, al menos ten la decencia de ser honesta...
Nessa abre la boca para replicar a esto, pero se lo piensa mejor y simplemente agita ligeramente la cabeza. Para qué caer en seguirle la corriente a la efreeti. Para qué perder el tiempo. "Tiempo", piensa la joven. Ese del que no disponen en abundancia. ¿Cuánto tiempo les quedaba hasta que desapareciera la protección contra el semi-plano que les había brindado Embergrey? Una hora, no más, calculaba.
No... yo estaba pensando más bien en esos objetos que habéis recuperado - dice señalando la daga que Nessa lleva ahora en el cinto - Dos de ellos bastarán, podré utilizar su magia para potenciar la mía y lograr sacaros de aquí. ¿No es un buen trato? ¿ Acaso no soy magnámina? Un par de baratijas por vuestra libertad. Pensadlo bien... -
La ranger entrecierra levemente los ojos, pero no responde. Sólo lleva la mano de nuevo al pomo de Susurro. "Dadle una de mi parte". Las últimas palabras de Slyckmeduck resonaron en la mente de la joven, que miró brevemente hacia Jen y Rolthos. ¿Iban a mancillar el legado de Diente de Jade y Slyckmeduck de aquella forma? ¿Para emponderar a alguien que perfectamente podría dejarlos en la estacada cuando le viniera bien? Ya habían visto lo rápido que Idab había caido en desgracia ante Shideh, cuando la salamandra no había sido siquiera consciente de sus acciones. ¿Por qué iba Shideh a tratarles mejor a ellos?
- Querida, vuestra ignorancia es tan grande que necesitaría un mes sólo para decidir por dónde empezar a educaros... pero no estoy de humor para eso... -
- No tenemos un mes, así que sé breve y concisa. Explícanos tu plan y convencernos que no estás ocultando nada. ¿En qué consiste exactamente? ¿Qué pasará una vez crucemos al plano elemental? ¿Cómo pasaríamos al Templo, y cuánto tardaríamos en hacerlo? - pregunta. Y aunque sigue mirando a la efreetti, las siguientes preguntas que formula realmente no són sólo para ella, sino para sus compañeros también. ¿Cuales eran las implicaciones de volver diretamente al Templo desde el plano elemental (si es que todo aquello era cierto siquiera)? - ¿Significa esto que ya no abriremos las puertas de los semi-planos de agua y tierra? ¿Qué sucederá con los cuatro restantes miembros de los Nueve que están guardándolas?
El alivio de Rolthos al escuchar que no deseaba las gemas, que parecían parte fundamental del puzle que tenían que resolver para reencarcelar al demonio, duró poco. Las armas de los héroes no se podían negociar. No. Aquello no podía ser. Dejó hablar a Nessa, pero su decisión estaba tomada; ya averiguarían cómo salir de los planos más adelante. Alguna forma habría. Si no... Mejor no pensar en ello. Dejó que Nessa preguntara más, quizás de la conversación sacasen alguna información.
Aprovechando que la Efretti le ignora, Jen se mueve hacia la retaguardia del grupo. Sus mejillas se ponen rojas cuando Shideh llama "Bestia" a Embergrey "Yo si que te voy a dar bestia", piensa para sus adentros, sintiendo el fuego del fenix arder en su pecho, y haciendo el gesto de remangarse inconscientemente. Pero Julian le pone la mano en el hombro y le niega levemente con la cabeza. "No merece la pena", le dice con ese gesto. "No bajes a su nivel".
Tenia razón. Tenía que intentar tranquilizarse. Pero Shideh ademas de una mente ardiente, tenia una lengua afilada, y ni siquiera laa destruccion de su palacio habia acabado con su prepotencia. La audacia! Pedir las armas de los heroes, que tenian un valor incalculable, para qué, usarlas de barrita energética? Ni hablar.
-Tenemos que abrir esas puertas- Le contesta medio a Nessa medio a Shideh, con la voz mas calmada que puede proyectar - Sabes que desde que vimos a Bathia y Sorlg, esto dejó de ser una caza del tesoro. El sufrimiento de quienes quedan no puede ser ignorado más. Esas armas son un legado, no una moneda de cambio.
Si pudimos con la incertidumbre de la prueba que nos pusieron Diente de Jade y Slymeduck, creo firmemente que podremos con la incertidumbre de lo que nos espera al pasar al siguiente semiplano. Y también creo, que todos los Halcones pensamos igual.-
Al escuchar a Jen y Nessa el paladín dejó escapar una bocanada de aire. La unánime respuesta del grupo era clara y honesta. Rolthos asentó los pies para una posible respuesta agresiva de la voluptuosa effreti. No esperaba una respuesta agresiva, pero tampoco la descartaba.
Sidhe hace un gesto de hastío ante las preguntas de Nessa.
- No voy a repetir mi plan... -
Pero antes de que pueda continuar Jen interviene y deja muy clara la postura de los Halcones.
Cruços se coloca al lado de Rolthos y Jen, y al otro lado Julian aferra con firmeza su ballesta. Vraak aprieta con fuerza su hacha al lado de Nessa y los músculos de sus brazos se tensan. Oswald Glimfeather Tercero se sujeta con firmeza en el hombro de Rolthos y le lanza una mirada reprobatoria a Sidhe capaz de hacer callar a Nessa.
Sidhe mira algo sorprendida al grupo y, cuando el resto de sus guardias comienzan a salir de sus escondites alrededor de ellos levanta una mano para pararlos.
- Insolentes y despreciables mortales.. -la sorpresa ha dejado paso a la indignación. - ¿Osáis repudiarme por segunda vez? -
Un fuego interior puede verse en las pupilas de los ojos de la noble efretti. Pese a la protección del conjuro de Embergrey, Jen comienza a sentir el calor del ambiente que ha subido de manera automática en respuesta de la ira de la Señora del Semi-Plano.
Las salamandras se deslizan y elevan, listas para atacar. Idab se encuentra un poco más allá del grupo, pero vigila a sus antiguas compañeras con el arma lista. Rolthos no duda de que su promesa a ellos influye, pero Cruços sabe que en la situación actual él antiguo capitán de la guardia es un objetivo más. Puede verse en la cara del resto de salamandras que están deseando dar su merecido al que, para ellos, es un traidor.
Pasan unos segundos intensos, el sudor comienza a perfilar las frentes de los Halcones. Entonces Sidhe habla.
- Sea... seguid con vuestra inútil gesta... pero cuando estéis hambrientos y desesperados y penséis en mataros los unos a los otros para poder comer, recordad que tuvisteis la oportunidad de salir de aquí con vida. Quedaos aquí y pudríos... -
Con un gesto altivo y elegante, Sidhe se gira entre las vaporosas telas de su vestido y desaparece. En silencio, y sin dejar de mirarlos, las salamandras se retiran, dejando solos a los Halcones en el linde de la puerta al semi-plano del agua.
- Se ha ido - diice Nessa, con tono de absoluta sorpresa mientras se gira para mirar a sus amigos - Esto sí que no me lo esperaba. Estaba convencidísima de que esto acabaría con un baño de sangre. Hmmm - se queda unos instantes congelada, casi sin saber qué hacer, hasta que el recuerdo de lo que tienen que hacer a continuación vuelve a ella -Preparémonos. Tenemos que cruzar la puerta ya. Jen, necesitamos ese conjuro para respirar bajo el agua ya. Y cargar al menos el anillo de Rolthos con ese mismo conjuro. Seguro que nos vendrá bien tenerlo por duplicado.
Se queda pensando un instante:
- No sé qué encontraremos al cruzar. ¿Corrientes de agua que nos hagan separarnos? Quizás nos vendría bien prepararnos ante eso, pero - mira con pena el pequeño pedazo de cuerda que usa para conjurar su refugio extradimensional - no tenemos con qué, ¿verdad?
De repente se acuerda de algo. Girándose hacia Idab dice:
- Idab, ¿qué va a pasar contigo ahora? Te diría que nos acompañases, pero un ambiente de agua no parece el lugar más adecuado para un nativo del semi-plano de fuego. ¿Estarás bien aquí?
Y se vuelve una vez más a sus compañeros:
- ¿Y Ashrem? Por todos los dioses, el viejo era una compañía terrible. Y no quiero ni recordar todo lo que hizo mientras lideraba el Templo de Aire. Pero admito que se me hace extraño que se quede con Shideh, así sin más.
Idab, que tampoco parece creerse que sus antiguos compañeros y ama, que el pelo siempre le crezca abundante, hayan desaparecido.
- No Saidh... yo no debería acompañaros. Estaré bien aqui, buscaré la manera de volver a mi verdadero hogar y buscaré trabajo con algún noble de la Ciudad. Os deseo buena fortuna en vuestro empeño, que vuestras bandejas estén siempre colmadas de frutas y dátiles -
La enorme criatura hace una reverencia y se aleja, perdiéndose entre las formaciones rocosas de la isla hacia un destino incierto.
- Respecto al viejo... parece que esa lagarta - dice Vraak - le ha adoptado como mascota. Me resulta extraño dejarle con ella sí... pero parece que está fuera de peligro. Ni siquiera nos ha amenazado con hacerle daño de no cumplir sus deseos. Y todo parece indicar que se lo llevará con ella. Al menos le hemos sacado de su prisión en el nodo del aire...- reflexiona el semi-orco.
- Eso me hace pensar- interviene Cruços - En el nodo del aire vimos a esos dos esclavos que acababan siendo la comida de los gigantes, encontramos a Ashrem... y aquí estaban los siervos de Sidhe y las víctimas de los gigantes... lo que quiero decir es que, por improbable que parezca, si el viejo consiguió sobrevivir en el semi-plano, a lo mejor hay más víctimas que estén atrapadas. ¿No deberíamos buscarlas y tratar de ayudarlas? Si fueron sacrificados en los templos, salvo excepciones como Ashrem, podemos suponer que eran enemigos del Templo y de sus fuerzas, y por lo tanto aliados... quizá alguno sepa cómo salir de aquí una vez abiertas las puertas... -
- Hmmm -dice Oswald Glimfeather Tercero - Tiene lógica lo que dices pero.. ¿cómo saber encontrarlos? ¿Cómo saber cuántos son? ¿Vamos a recorrer los semi-planos enteros en su búsqueda? ¿Tenemos el tiempo y los recursos para hacer algo así? Sin embargo planteas algo interesante, creo que deberíamos intentar ayudar a aquellos que nos encontremos... -
- Después de que pasen por el círculo... - apunta Cruços - ¿Qué opinais el resto? -
Rolthos apretó su mandíbula y frunció los labios con angustia y preocupacion. Apenas podían sobrevivir a los peligros a los que se enfrentaban en cada plano en cada puerta. Y las puertas... Los héroes... la cárcel se abría poco a poco pero inexorablemente. - Sin duda, abandonar a su suerte a cada inocente que se haye encerrado en estos planos es una auténtica tragedia. Pero no veo la manera de salvarles a todos mientras estén en estos planos... Como podríamos encontrarles, como podríamos llegar a donde están, cuanto tiempo nos llevaría y como podríamos ayudarles? Si nos hubiésemos traído a los humanos desde el plano del aire, ahora estarían muertos en este plano. Y si les llevamos al plano del agua... Podrán sobrevivir allí?
Rolthos miro a sus compañeros. - Como encontramos a los supervivientes de este plano y a donde podemos llevarles? Nos enfrentaremos a Sidhe para arrebatarle a los inocentes para condenarlos a una muerte por golpe de calor o por ahogamiento? Cada vez que nos encontremos a una víctima le ayudamos desde luego... El fénix, el clérigo... Pero...
Levantó la mirada algo esperanzado con una idea - Quizás si destruimos los semiplanos, sus habitantes podrían ser expulsados a desde donde vinieron? Las gemas podrían ser la clave de esto... - Miro a Oswald con una pausa que exigia una respuesta positiva.
-Necesitaría mucho tiempo y un mago a mi lado para estudiar las gemas y su efecto sobre los semi-planos. Sin duda están interrelacionados, pero desconocemos sus capacidades y poderes. Como ya hablamos alguien tendría que vincularse con ellas para poder conocer más... -Oswald Glimfeather Tercero niega con la cabeza, preocupado - lo que sí os puedo decir es que son extremadamente poderosas, y que resuenan juntas ahora que están próximas. Presiento que destruirlas no sería tarea sencilla y que necesitaríamos todas las partes del todo para conseguirlo... Sí pudiera hablar con Arcandor... -
Nessa asiente a las palabras de Vraak, y cuando Cruços habla de rescatar a las víctimas que encuentren en los planos, responde:
- Es una buena idea, por supuesto. No pudimos hacer nada por aquellos dos esclavos en el semi-plano de aire, y los siervos de Shideh no parecen querer abandonarla. Pero si podemos ayudar a aquellos que nos encontremos a partir de ahora, desde luego que hay que intentarlo - Cuando Rolthos interviene, la ranger añade - Es cierto que no sabemos cómo hacer nada de esto ahora, pero no perdamos la esperanza: alguna manera habrá, y la encontraremos. Al principio no sabíamos cómo salir del semi-plano de aire, y miradnos, aquí estamos a punto de entrar al tercero. Seguro que en el de agua y en el de tierra encontramos más respuestas a este rompecabezas.
Con la mención de Arcandor, Nessa dirige una sonrisa tierna a Oswald. El sabio búho debía de echar tanto de menos a su alumno.
- Podremos hablar con él, Oswald. Si pudimos hacerlo con Bathia, Sorlg, Slyckmeduck y Diente de Jade, podremos también con él. Así como con Azemar, Krelzoshak e Isarana. Me pregunto quienes de ellos estarán en el semi-plano de agua y quienes en el de tierra - se quedó unos instantes meditando sobre esto, y finalmente añadió - Sea como sea, les localizaremos y les liberaremos de su pesada carga.
Rolthos asintió sin poder añadir nada más. Echó una mirada con algo de preocupación hacia la daga que portaba Nessa ahora y volvió a asentir cuando ella aseguró que podrían hablar con el mago de nuevo.
- Estoy convencido de ello... Quizás en el semi-plano del agua, o en el de la tierra... no sé cuál hubiese elegido Arcandor.
Entonces, respiró hondo, levantando ligeramente su glaive mientras se enderezaba, la tensión en sus hombros visible pero controlada. Sus ojos recorrieron el lugar donde Shideh había estado, con una mezcla de determinación y una pizca de esperanza.
- Por Mayaheine y por Bathia, tendremos que encontrar la manera.
Tras lanzar Jen el hechizo que les permitiría respirar bajo el agua, todos fueron entrando en el símbolo que había en la oquedad del suelo. Cuando todos están dentro se toman de la mano y se concentran.
Al principio se ilumina débilmente el contorno del símbolo de aguamarina, recorriendo el límite del mismo como si cayera agua en un viejo caudal y le costara arrastrar la suciedad acumulada durante mucho tiempo. Pero pronto cobra fuerza y el fulgor se expande por todo el contorno y cobra fuerza, expandiéndose hacia el centro hasta cubrir toda la superficie y a todos los Halcones.
Aunque la iluminación no dejaba de ser hermosa en cierta manera no pudieron evitar gritar cuando el aguamarina desapareció a sus pies, convertida en agua y todos cayeron hacia lo que parecía un fondo abisal.
Pero la caída no duro mucho. Tan rápido como había empezado acabó y se encontraron de pie, la humedad les rodeaba pero no podían ver nada. Jen usó sus poderes para revelar que se encontraban en el centro de una caverna con el techo bajo.
El ambiente era húmedo y el olor a salitre invadió sus fosas nasales. Se encontraban en una pequeña caverna con techo cóncavo. Apenas media tres metros en el punto más alto que era justo el centro del islote cuadrado en el que estaban. El agua lamía las orillas del mismo, que apenas medía unos once metros de lado.
Parecía que la entrada al semi-plano del agua daba a aquella pequeña caverna en la que había una cámara de aire. Pero sin duda tendrían que introducirse en el agua para salir de allí. Agua que se mecía suavemente a su alrededor pero cuyas negras profundidades parecían insondables.
Rolthos se ajustó las gafas de latón de visión nocturna. Cuando Jen iluminó la cueva las lentes reflejaron el tenue brillo en la penumbra. Observó con atención la pequeña isla en la que se encontraba, cada detalle revelando la inhóspita naturaleza del lugar. Suspiró profundamente, sintiendo el peso de la situación. Si tenían que nadar para salir de allí, la expedición en este semiplano iba a ser cualquier cosa menos cómoda, la idea de sumergirse en las frías y oscuras aguas no era alentadora.
- ¿Alguna idea de como proceder? - Preguntó observando las oscuras aguas.
- Dejadme intentar una cosa - responde Nessa a la pregunta de Rolthos mientras lleva la mano hasta a su cinturón donde colgaba la bellota dorada que había encantado con ayuda de Ornym, en la finca de Julian. Ornym ... la ranger deseó que el elfo estuviera bien. No había pasado tanto tiempo desde aquella noche, pero sí habían sucedido muchas cosas desde entonces. Demasiadas cosas.
Centrándose de nuevo en el momento, la joven se agachó hasta rozar las aguas oscuras con la punta de los dedos y susurró las palabras del conjuro que le permitiría invocar a Serpiente. La bellota emitió un tenue brillo como respuesta y una forma negra y azulada se materializó en el brazo de la ranger, que suave y sinuosamente se desenroscó para terminar descendiendo por el mismo hasta introducirse en el agua. Una vez allí, Serpiente y Nessa se miraron en silenciosa comunicación.
"Serpiente, préstame tus sentidos", solicitó la ranger.
El grupo pudo ver como los ojos azules de la ranger se transformaban, sus pupilas estrechándose en finas rendijas verticales.
Nessa sintió una gran resistencia a que el espíritu acudiera a su lado. No era que no respondiera a su llamada, era como si algo le impidiera llegar a su lado. La ranger se concentró y, con la frente perfilada de sudor, consiguió su objetivo y el espíritu animal acudió a su llamada.
Viendo por los ojos del espíritu se deslizó bajo el agua. Era una sensación muy extraña y a la joven le costó unos momentos acostumbrarse al sinuante desplazamiento y no marearse por la dicotomía entre lo que veía y lo que su cuerpo, que permanecía quieto le decía.
La serpiente se sumergió y tardó casi dos minutos en llegar al fondo. Allí, sobre un suelo de roca pulida Nessa descubrió varios esqueletos de humanoides. Sin duda, antiguos sacrificios del Templo del Agua. Nessa se preguntó si habría algún depredador cerca, pero los huesos eran antiguos y razonó que, si cuando el templo estaba activo había algún depredador esperando a las desafortunadas víctimas, al dejar estas de aparecer, la bestia, o bestias, se irían a buscar alimento en otro lugar. Nessa no tenía mucha experiencia con animales acuáticos, pero este era un comportamiento general a todos los depredadores, tal y como le había enseñado Ornym.
Se alejó de la base del islote e intentó encontrar los límites de la caverna y posibles salidas. Le llevó tiempo, pero no le fue complicado. La cueva tenía un diámetro de unos trescientos pies de forma cóncava, había cuatro salidas, anchas aberturas de forma circular de unos treinta pies de diámetro se abrían a lo que Nessa tomó como los puntos cardinales. No tenía forma de saber cual era el norte realmente, pero estaban separados por espacios equidistantes en la circunferencia de la cueva. Nessa eligió el último que había descubierto y la serpiente se deslizó por el mismo hacia fuera. Se detuvo en la salida. Nessa contuvo el aliento de manera inconsciente. Hasta donde llegaba su vista todo era un gran azul que se transformaba en negro en la lejanía. No veía fondo, ni superficie, y salvo la cueva en la que estaban que se apoyaba en una columna que se elevaba desde las insondables profundidades, no había nada más que agua a su alrededor.
Rolthos observó la cueva frente a él, escuchando las palabras de Nessa, mientras su expresión se endurecía.
- Estos planos no paran de darme disgustos - dijo, sintiendo cómo una sensación de hastío y repulsión se apoderaba de él. Empezó a considerar quitarse la armadura - O alguien viene a buscarnos o nos hundiremos en ese océano infinito. No vamos a poder nadar ni a la superficie, ni al fondo, ni a la siguiente columna. ¿Quizás sea como el plano del aire y podamos ir de cueva en cueva a través de corrientes de agua?
-No perdamos tan rápido el ánimo. Nessa, podría el espíritu Serpiente ver las demas salidas? Quizá haya movimiento alrededor de esta caverna. No puede ser un trozo de roca hueca flotante en medio de una vasta inmensidad de agua.... Verdad?- esto último no lo dice con mucha convicción.
Y si realmente el terror de aquel plano era que... No había nadie?
Una ligera sensación de ahogo empieza a apoderarse de su garganta mientras piensa en lo irónico de la situación.
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El rostro de Sidhe parece compungido.
- Mi deseado Rolthos... me temo que ya no estoy en disposición de poder ayudaros... y me temo que sólo podéis culparos a vosotros mismos... ¿no os pedi, os supliqué, que no liberárais a la bestia? Ya visteis cómo quedó mi pobre palacio... ¿y dónde está ahora? ¿hmmm? - levanta una ceja - No hace falta que me lo digáis... vuestras caras lo dicen todo queridos... -
Niega con la cabeza y su cabello cae como una cascada medio ocultándole el rostro.
- Qué podríamos hacer me pregunto... yo tengo que llevarme a mis fieles siervos... - la inflexión en la palabra fieles parece un dardo que se clava en Idab, el cual no puede evitar tensarse - ... y a Ashrem, pobre anciano, que desconsiderado por vuestra parte abandonarlo en este lugar... ¿no creéis que ya ha pagado por sus pecados pasados? El pobre sólo necesitaba algo de compañía y comprensión y.. comida.. . - su gesto casi adopta un aspecto maternal - está muy mejorado deberíais verle... la cuestiíon es que con mis poderes limitados no podré llevaros a todos... necesitaría algo que me ayudase a potenciar mi magia... -
PbP Character: A few ;)
Nessa enarca las cejas ante la desfachatez que va destilando cada una de las palabras de la efreeti.
- Desde luego ese sería un plan sin fisuras, ¿verdad, Shideh? Primero haberte librado del Thane sin tener que mover un dedo, y ahora conseguir la gema que guardaba de sólo con pedirlo. Y todo ello para poder salvarnos a nosotros. Alabo tu maestría, mi señora, así como tu preocupación por nuestro bienestar.
La ranger calla unos instantes, y mira en derredor.
- La verdad es que me gustaría ver al clérigo una vez más. ¿Estás por aquí, Ashrem? - dice, preguntando al aire - ¿Por qué no te unes a la conversación? No me gustó la idea de que te quedaras atrás cuando no acudiste a la cena con nuestra anfitriona y tuvimos que salir huyendo de la destrucción del palacio. Pero me alegra escuchar que ahora estás bien. Porque eso significa que tu elección de aliados habrá mejorado considerablemente desde que los anteriores decidieran encerrarte en el semi-plano de aire hasta llegamos nosotros y empezamos a abrir las puertas.
Tras decir esto, la ranger lanza una mirada a Idab. Idab, que les había dicho que no movería un dedo por dañar a Shideh. Idab, que no había dicho nada al respecto de dañar a otros aliados de Shideh. ¿Les ayudaría la salamandra al menos contra el clérigo, que a todas luces se uniría a la efreeti en la pelea que la ranger ya no tenía duda alguna que iba a acabar sucediendo?
Nessa vuelve a fijarse en Shideh. Aunque estaba segura de que no quería darle la gema, ni confiaba en que alguien como ella no fuera a dejarles abandonados si cruzaban con ella al plano elemental, había algo más en sus palabras que no terminaba de cuadrar.
- Algo me dice que no estás contándonos todo, Shideh. Y no es algo sobre el pacto que propones. No me cabe duda que los pactos son importantes para ti. Pero hay algo más, ¿verdad? ¿Qué es lo que no nos estás contando?
Diving deep to the surface ♫ Nessa | Saxa | Auriel | Chase | Shenua | Arren
Sidhe escucha a Nessa con gesto divertido.
- Ahsrem no está aquí querida... está reposando y recuperándose en sus aposentos en lo que queda de mi palacio... al menos ahí estará a salvo, pobre criatura... - es difícil saber si su tono de preocupación es fingido o real - qué fácil decir ahora que no le querías dejar atrás... pero si no aguantas al pobre hombre, al menos ten la decencia de ser honesta... -
Hace una pausa, mirando reprobatoriamente a la ranger antes de continuar.
- ¿Crees que quiero la Gema? jajajajaja no gracias querida pero no. No tocaría ninguna de sus cosas, ni siquiera yo soy tan ambiciosa... ¿porqué crees que se la di a ese imbécil del Thane? Cuando Él vuelva prefiero no tener nada suyo, gracias. No... yo estaba pensando más bien en esos objetos que habéis recuperado - dice señalando la daga que Nessa lleva ahora en el cinto - Dos de ellos bastarán, podré utilizar su magia para potenciar la mía y lograr sacaros de aquí. ¿No es un buen trato? ¿ Acaso no soy magnámina? Un par de baratijas por vuestra libertad. Pensadlo bien... -
Cuando Nessa le increpa que hay algo que no les está contando la efretti hace un mohín divetido.
- Querida, vuestra ignorancia es tan grande que necesitaría un mes sólo para decidir por dónde empezar a educaros... pero no estoy de humor para eso... -
PbP Character: A few ;)
Nessa abre la boca para replicar a esto, pero se lo piensa mejor y simplemente agita ligeramente la cabeza. Para qué caer en seguirle la corriente a la efreeti. Para qué perder el tiempo. "Tiempo", piensa la joven. Ese del que no disponen en abundancia. ¿Cuánto tiempo les quedaba hasta que desapareciera la protección contra el semi-plano que les había brindado Embergrey? Una hora, no más, calculaba.
La ranger entrecierra levemente los ojos, pero no responde. Sólo lleva la mano de nuevo al pomo de Susurro. "Dadle una de mi parte". Las últimas palabras de Slyckmeduck resonaron en la mente de la joven, que miró brevemente hacia Jen y Rolthos. ¿Iban a mancillar el legado de Diente de Jade y Slyckmeduck de aquella forma? ¿Para emponderar a alguien que perfectamente podría dejarlos en la estacada cuando le viniera bien? Ya habían visto lo rápido que Idab había caido en desgracia ante Shideh, cuando la salamandra no había sido siquiera consciente de sus acciones. ¿Por qué iba Shideh a tratarles mejor a ellos?
Aún así, Nessa vuelve a mirar a la efreeti.
- No tenemos un mes, así que sé breve y concisa. Explícanos tu plan y convencernos que no estás ocultando nada. ¿En qué consiste exactamente? ¿Qué pasará una vez crucemos al plano elemental? ¿Cómo pasaríamos al Templo, y cuánto tardaríamos en hacerlo? - pregunta. Y aunque sigue mirando a la efreetti, las siguientes preguntas que formula realmente no són sólo para ella, sino para sus compañeros también. ¿Cuales eran las implicaciones de volver diretamente al Templo desde el plano elemental (si es que todo aquello era cierto siquiera)? - ¿Significa esto que ya no abriremos las puertas de los semi-planos de agua y tierra? ¿Qué sucederá con los cuatro restantes miembros de los Nueve que están guardándolas?
Diving deep to the surface ♫ Nessa | Saxa | Auriel | Chase | Shenua | Arren
El alivio de Rolthos al escuchar que no deseaba las gemas, que parecían parte fundamental del puzle que tenían que resolver para reencarcelar al demonio, duró poco. Las armas de los héroes no se podían negociar. No. Aquello no podía ser. Dejó hablar a Nessa, pero su decisión estaba tomada; ya averiguarían cómo salir de los planos más adelante. Alguna forma habría. Si no... Mejor no pensar en ello. Dejó que Nessa preguntara más, quizás de la conversación sacasen alguna información.
Zevatur, Rolthos
Aprovechando que la Efretti le ignora, Jen se mueve hacia la retaguardia del grupo. Sus mejillas se ponen rojas cuando Shideh llama "Bestia" a Embergrey "Yo si que te voy a dar bestia", piensa para sus adentros, sintiendo el fuego del fenix arder en su pecho, y haciendo el gesto de remangarse inconscientemente. Pero Julian le pone la mano en el hombro y le niega levemente con la cabeza. "No merece la pena", le dice con ese gesto. "No bajes a su nivel".
Tenia razón. Tenía que intentar tranquilizarse. Pero Shideh ademas de una mente ardiente, tenia una lengua afilada, y ni siquiera laa destruccion de su palacio habia acabado con su prepotencia. La audacia! Pedir las armas de los heroes, que tenian un valor incalculable, para qué, usarlas de barrita energética? Ni hablar.
-Tenemos que abrir esas puertas- Le contesta medio a Nessa medio a Shideh, con la voz mas calmada que puede proyectar - Sabes que desde que vimos a Bathia y Sorlg, esto dejó de ser una caza del tesoro. El sufrimiento de quienes quedan no puede ser ignorado más. Esas armas son un legado, no una moneda de cambio.
Si pudimos con la incertidumbre de la prueba que nos pusieron Diente de Jade y Slymeduck, creo firmemente que podremos con la incertidumbre de lo que nos espera al pasar al siguiente semiplano. Y también creo, que todos los Halcones pensamos igual.-
Al escuchar a Jen y Nessa el paladín dejó escapar una bocanada de aire. La unánime respuesta del grupo era clara y honesta. Rolthos asentó los pies para una posible respuesta agresiva de la voluptuosa effreti. No esperaba una respuesta agresiva, pero tampoco la descartaba.
Zevatur, Rolthos
Sidhe hace un gesto de hastío ante las preguntas de Nessa.
- No voy a repetir mi plan... -
Pero antes de que pueda continuar Jen interviene y deja muy clara la postura de los Halcones.
Cruços se coloca al lado de Rolthos y Jen, y al otro lado Julian aferra con firmeza su ballesta. Vraak aprieta con fuerza su hacha al lado de Nessa y los músculos de sus brazos se tensan. Oswald Glimfeather Tercero se sujeta con firmeza en el hombro de Rolthos y le lanza una mirada reprobatoria a Sidhe capaz de hacer callar a Nessa.
Sidhe mira algo sorprendida al grupo y, cuando el resto de sus guardias comienzan a salir de sus escondites alrededor de ellos levanta una mano para pararlos.
- Insolentes y despreciables mortales.. - la sorpresa ha dejado paso a la indignación. - ¿Osáis repudiarme por segunda vez? -
Un fuego interior puede verse en las pupilas de los ojos de la noble efretti. Pese a la protección del conjuro de Embergrey, Jen comienza a sentir el calor del ambiente que ha subido de manera automática en respuesta de la ira de la Señora del Semi-Plano.
Las salamandras se deslizan y elevan, listas para atacar. Idab se encuentra un poco más allá del grupo, pero vigila a sus antiguas compañeras con el arma lista. Rolthos no duda de que su promesa a ellos influye, pero Cruços sabe que en la situación actual él antiguo capitán de la guardia es un objetivo más. Puede verse en la cara del resto de salamandras que están deseando dar su merecido al que, para ellos, es un traidor.
Pasan unos segundos intensos, el sudor comienza a perfilar las frentes de los Halcones. Entonces Sidhe habla.
- Sea... seguid con vuestra inútil gesta... pero cuando estéis hambrientos y desesperados y penséis en mataros los unos a los otros para poder comer, recordad que tuvisteis la oportunidad de salir de aquí con vida. Quedaos aquí y pudríos... -
Con un gesto altivo y elegante, Sidhe se gira entre las vaporosas telas de su vestido y desaparece. En silencio, y sin dejar de mirarlos, las salamandras se retiran, dejando solos a los Halcones en el linde de la puerta al semi-plano del agua.
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- Se ha ido - diice Nessa, con tono de absoluta sorpresa mientras se gira para mirar a sus amigos - Esto sí que no me lo esperaba. Estaba convencidísima de que esto acabaría con un baño de sangre. Hmmm - se queda unos instantes congelada, casi sin saber qué hacer, hasta que el recuerdo de lo que tienen que hacer a continuación vuelve a ella - Preparémonos. Tenemos que cruzar la puerta ya. Jen, necesitamos ese conjuro para respirar bajo el agua ya. Y cargar al menos el anillo de Rolthos con ese mismo conjuro. Seguro que nos vendrá bien tenerlo por duplicado.
Se queda pensando un instante:
- No sé qué encontraremos al cruzar. ¿Corrientes de agua que nos hagan separarnos? Quizás nos vendría bien prepararnos ante eso, pero - mira con pena el pequeño pedazo de cuerda que usa para conjurar su refugio extradimensional - no tenemos con qué, ¿verdad?
De repente se acuerda de algo. Girándose hacia Idab dice:
- Idab, ¿qué va a pasar contigo ahora? Te diría que nos acompañases, pero un ambiente de agua no parece el lugar más adecuado para un nativo del semi-plano de fuego. ¿Estarás bien aquí?
Y se vuelve una vez más a sus compañeros:
- ¿Y Ashrem? Por todos los dioses, el viejo era una compañía terrible. Y no quiero ni recordar todo lo que hizo mientras lideraba el Templo de Aire. Pero admito que se me hace extraño que se quede con Shideh, así sin más.
Diving deep to the surface ♫ Nessa | Saxa | Auriel | Chase | Shenua | Arren
Idab, que tampoco parece creerse que sus antiguos compañeros y ama, que el pelo siempre le crezca abundante, hayan desaparecido.
- No Saidh... yo no debería acompañaros. Estaré bien aqui, buscaré la manera de volver a mi verdadero hogar y buscaré trabajo con algún noble de la Ciudad. Os deseo buena fortuna en vuestro empeño, que vuestras bandejas estén siempre colmadas de frutas y dátiles -
La enorme criatura hace una reverencia y se aleja, perdiéndose entre las formaciones rocosas de la isla hacia un destino incierto.
- Respecto al viejo... parece que esa lagarta - dice Vraak - le ha adoptado como mascota. Me resulta extraño dejarle con ella sí... pero parece que está fuera de peligro. Ni siquiera nos ha amenazado con hacerle daño de no cumplir sus deseos. Y todo parece indicar que se lo llevará con ella. Al menos le hemos sacado de su prisión en el nodo del aire... - reflexiona el semi-orco.
- Eso me hace pensar - interviene Cruços - En el nodo del aire vimos a esos dos esclavos que acababan siendo la comida de los gigantes, encontramos a Ashrem... y aquí estaban los siervos de Sidhe y las víctimas de los gigantes... lo que quiero decir es que, por improbable que parezca, si el viejo consiguió sobrevivir en el semi-plano, a lo mejor hay más víctimas que estén atrapadas. ¿No deberíamos buscarlas y tratar de ayudarlas? Si fueron sacrificados en los templos, salvo excepciones como Ashrem, podemos suponer que eran enemigos del Templo y de sus fuerzas, y por lo tanto aliados... quizá alguno sepa cómo salir de aquí una vez abiertas las puertas... -
- Hmmm - dice Oswald Glimfeather Tercero - Tiene lógica lo que dices pero.. ¿cómo saber encontrarlos? ¿Cómo saber cuántos son? ¿Vamos a recorrer los semi-planos enteros en su búsqueda? ¿Tenemos el tiempo y los recursos para hacer algo así? Sin embargo planteas algo interesante, creo que deberíamos intentar ayudar a aquellos que nos encontremos... -
- Después de que pasen por el círculo... - apunta Cruços - ¿Qué opinais el resto? -
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Rolthos apretó su mandíbula y frunció los labios con angustia y preocupacion. Apenas podían sobrevivir a los peligros a los que se enfrentaban en cada plano en cada puerta. Y las puertas... Los héroes... la cárcel se abría poco a poco pero inexorablemente. - Sin duda, abandonar a su suerte a cada inocente que se haye encerrado en estos planos es una auténtica tragedia. Pero no veo la manera de salvarles a todos mientras estén en estos planos... Como podríamos encontrarles, como podríamos llegar a donde están, cuanto tiempo nos llevaría y como podríamos ayudarles? Si nos hubiésemos traído a los humanos desde el plano del aire, ahora estarían muertos en este plano. Y si les llevamos al plano del agua... Podrán sobrevivir allí?
Rolthos miro a sus compañeros. - Como encontramos a los supervivientes de este plano y a donde podemos llevarles? Nos enfrentaremos a Sidhe para arrebatarle a los inocentes para condenarlos a una muerte por golpe de calor o por ahogamiento? Cada vez que nos encontremos a una víctima le ayudamos desde luego... El fénix, el clérigo... Pero...
Levantó la mirada algo esperanzado con una idea - Quizás si destruimos los semiplanos, sus habitantes podrían ser expulsados a desde donde vinieron? Las gemas podrían ser la clave de esto... - Miro a Oswald con una pausa que exigia una respuesta positiva.
Zevatur, Rolthos
-Necesitaría mucho tiempo y un mago a mi lado para estudiar las gemas y su efecto sobre los semi-planos. Sin duda están interrelacionados, pero desconocemos sus capacidades y poderes. Como ya hablamos alguien tendría que vincularse con ellas para poder conocer más... - Oswald Glimfeather Tercero niega con la cabeza, preocupado - lo que sí os puedo decir es que son extremadamente poderosas, y que resuenan juntas ahora que están próximas. Presiento que destruirlas no sería tarea sencilla y que necesitaríamos todas las partes del todo para conseguirlo... Sí pudiera hablar con Arcandor... -
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Nessa asiente a las palabras de Vraak, y cuando Cruços habla de rescatar a las víctimas que encuentren en los planos, responde:
- Es una buena idea, por supuesto. No pudimos hacer nada por aquellos dos esclavos en el semi-plano de aire, y los siervos de Shideh no parecen querer abandonarla. Pero si podemos ayudar a aquellos que nos encontremos a partir de ahora, desde luego que hay que intentarlo - Cuando Rolthos interviene, la ranger añade - Es cierto que no sabemos cómo hacer nada de esto ahora, pero no perdamos la esperanza: alguna manera habrá, y la encontraremos. Al principio no sabíamos cómo salir del semi-plano de aire, y miradnos, aquí estamos a punto de entrar al tercero. Seguro que en el de agua y en el de tierra encontramos más respuestas a este rompecabezas.
Con la mención de Arcandor, Nessa dirige una sonrisa tierna a Oswald. El sabio búho debía de echar tanto de menos a su alumno.
- Podremos hablar con él, Oswald. Si pudimos hacerlo con Bathia, Sorlg, Slyckmeduck y Diente de Jade, podremos también con él. Así como con Azemar, Krelzoshak e Isarana. Me pregunto quienes de ellos estarán en el semi-plano de agua y quienes en el de tierra - se quedó unos instantes meditando sobre esto, y finalmente añadió - Sea como sea, les localizaremos y les liberaremos de su pesada carga.
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Rolthos asintió sin poder añadir nada más. Echó una mirada con algo de preocupación hacia la daga que portaba Nessa ahora y volvió a asentir cuando ella aseguró que podrían hablar con el mago de nuevo.
- Estoy convencido de ello... Quizás en el semi-plano del agua, o en el de la tierra... no sé cuál hubiese elegido Arcandor.
Entonces, respiró hondo, levantando ligeramente su glaive mientras se enderezaba, la tensión en sus hombros visible pero controlada. Sus ojos recorrieron el lugar donde Shideh había estado, con una mezcla de determinación y una pizca de esperanza.
- Por Mayaheine y por Bathia, tendremos que encontrar la manera.
Zevatur, Rolthos
Tras lanzar Jen el hechizo que les permitiría respirar bajo el agua, todos fueron entrando en el símbolo que había en la oquedad del suelo. Cuando todos están dentro se toman de la mano y se concentran.
Al principio se ilumina débilmente el contorno del símbolo de aguamarina, recorriendo el límite del mismo como si cayera agua en un viejo caudal y le costara arrastrar la suciedad acumulada durante mucho tiempo. Pero pronto cobra fuerza y el fulgor se expande por todo el contorno y cobra fuerza, expandiéndose hacia el centro hasta cubrir toda la superficie y a todos los Halcones.
Aunque la iluminación no dejaba de ser hermosa en cierta manera no pudieron evitar gritar cuando el aguamarina desapareció a sus pies, convertida en agua y todos cayeron hacia lo que parecía un fondo abisal.
Pero la caída no duro mucho. Tan rápido como había empezado acabó y se encontraron de pie, la humedad les rodeaba pero no podían ver nada. Jen usó sus poderes para revelar que se encontraban en el centro de una caverna con el techo bajo.
El ambiente era húmedo y el olor a salitre invadió sus fosas nasales. Se encontraban en una pequeña caverna con techo cóncavo. Apenas media tres metros en el punto más alto que era justo el centro del islote cuadrado en el que estaban. El agua lamía las orillas del mismo, que apenas medía unos once metros de lado.
Parecía que la entrada al semi-plano del agua daba a aquella pequeña caverna en la que había una cámara de aire. Pero sin duda tendrían que introducirse en el agua para salir de allí. Agua que se mecía suavemente a su alrededor pero cuyas negras profundidades parecían insondables.
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Rolthos se ajustó las gafas de latón de visión nocturna. Cuando Jen iluminó la cueva las lentes reflejaron el tenue brillo en la penumbra. Observó con atención la pequeña isla en la que se encontraba, cada detalle revelando la inhóspita naturaleza del lugar. Suspiró profundamente, sintiendo el peso de la situación. Si tenían que nadar para salir de allí, la expedición en este semiplano iba a ser cualquier cosa menos cómoda, la idea de sumergirse en las frías y oscuras aguas no era alentadora.
- ¿Alguna idea de como proceder? - Preguntó observando las oscuras aguas.
Zevatur, Rolthos
- Dejadme intentar una cosa - responde Nessa a la pregunta de Rolthos mientras lleva la mano hasta a su cinturón donde colgaba la bellota dorada que había encantado con ayuda de Ornym, en la finca de Julian. Ornym ... la ranger deseó que el elfo estuviera bien. No había pasado tanto tiempo desde aquella noche, pero sí habían sucedido muchas cosas desde entonces. Demasiadas cosas.
Centrándose de nuevo en el momento, la joven se agachó hasta rozar las aguas oscuras con la punta de los dedos y susurró las palabras del conjuro que le permitiría invocar a Serpiente. La bellota emitió un tenue brillo como respuesta y una forma negra y azulada se materializó en el brazo de la ranger, que suave y sinuosamente se desenroscó para terminar descendiendo por el mismo hasta introducirse en el agua. Una vez allí, Serpiente y Nessa se miraron en silenciosa comunicación.
"Serpiente, préstame tus sentidos", solicitó la ranger.
El grupo pudo ver como los ojos azules de la ranger se transformaban, sus pupilas estrechándose en finas rendijas verticales.
(El aspecto de serpiente)
Diving deep to the surface ♫ Nessa | Saxa | Auriel | Chase | Shenua | Arren
Nessa sintió una gran resistencia a que el espíritu acudiera a su lado. No era que no respondiera a su llamada, era como si algo le impidiera llegar a su lado. La ranger se concentró y, con la frente perfilada de sudor, consiguió su objetivo y el espíritu animal acudió a su llamada.
Viendo por los ojos del espíritu se deslizó bajo el agua. Era una sensación muy extraña y a la joven le costó unos momentos acostumbrarse al sinuante desplazamiento y no marearse por la dicotomía entre lo que veía y lo que su cuerpo, que permanecía quieto le decía.
La serpiente se sumergió y tardó casi dos minutos en llegar al fondo. Allí, sobre un suelo de roca pulida Nessa descubrió varios esqueletos de humanoides. Sin duda, antiguos sacrificios del Templo del Agua. Nessa se preguntó si habría algún depredador cerca, pero los huesos eran antiguos y razonó que, si cuando el templo estaba activo había algún depredador esperando a las desafortunadas víctimas, al dejar estas de aparecer, la bestia, o bestias, se irían a buscar alimento en otro lugar. Nessa no tenía mucha experiencia con animales acuáticos, pero este era un comportamiento general a todos los depredadores, tal y como le había enseñado Ornym.
Se alejó de la base del islote e intentó encontrar los límites de la caverna y posibles salidas. Le llevó tiempo, pero no le fue complicado. La cueva tenía un diámetro de unos trescientos pies de forma cóncava, había cuatro salidas, anchas aberturas de forma circular de unos treinta pies de diámetro se abrían a lo que Nessa tomó como los puntos cardinales. No tenía forma de saber cual era el norte realmente, pero estaban separados por espacios equidistantes en la circunferencia de la cueva.
Nessa eligió el último que había descubierto y la serpiente se deslizó por el mismo hacia fuera. Se detuvo en la salida. Nessa contuvo el aliento de manera inconsciente.
Hasta donde llegaba su vista todo era un gran azul que se transformaba en negro en la lejanía. No veía fondo, ni superficie, y salvo la cueva en la que estaban que se apoyaba en una columna que se elevaba desde las insondables profundidades, no había nada más que agua a su alrededor.
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Rolthos observó la cueva frente a él, escuchando las palabras de Nessa, mientras su expresión se endurecía.
- Estos planos no paran de darme disgustos - dijo, sintiendo cómo una sensación de hastío y repulsión se apoderaba de él. Empezó a considerar quitarse la armadura - O alguien viene a buscarnos o nos hundiremos en ese océano infinito. No vamos a poder nadar ni a la superficie, ni al fondo, ni a la siguiente columna. ¿Quizás sea como el plano del aire y podamos ir de cueva en cueva a través de corrientes de agua?
Zevatur, Rolthos
-No perdamos tan rápido el ánimo. Nessa, podría el espíritu Serpiente ver las demas salidas? Quizá haya movimiento alrededor de esta caverna. No puede ser un trozo de roca hueca flotante en medio de una vasta inmensidad de agua.... Verdad?- esto último no lo dice con mucha convicción.
Y si realmente el terror de aquel plano era que... No había nadie?
Una ligera sensación de ahogo empieza a apoderarse de su garganta mientras piensa en lo irónico de la situación.