- No es... Preferiría, si es posible, no tener que luchar en esa sala. - Dice el paladín mirando el angosto interior de la sala. - El efecto de la expulsión de Aisha no durará mucho, y los espíritus regresarán. Si podéis acabar lo que quiera que estéis haciendo ahí y salir, lo mismo podemos enfrentarnos con algún tipo de ventaja al espíritu. - Sus palabras se arrastran, denotando la fatiga que el combate le ha causado.

Seth se queda Jade ante después del salto y acabar con otro espectro, mira a su alrededor y ve que Nessa y Cruços no están, ya que han seguido a la otra sombra... escucha a Nessa levemente diciendo que no está en la sala, así que Seth se queda en la sala anterior y pregunta a sus compañeros, estáis bien?

Jen se acerca a la entrada de la sala cuando Cruços se interna en ella, y acaricia el pomo de la puerta.... Seria tan facil.... Cerrar la estancia, y dejar a aquel retorcido cazador a su suerte con las criaturas. El pensamiento cruza su mente, y toma aire profundamente.

Pero Nessa pasa detras del cazador, y Jen suelta el pomo de la puerta de madera.

"Tranquilizate...." Piensa para sus adentros, mirandose la mano, que le tiembla.

-Mirad lo que gusteis. Yo me quedaré haciendo guardia fuera por si vienen de nuevo. Y dicho esto saca de uno de sus bolsillos una bola de cristal, y se dispone a hacer pequeños malabarismos con ella en las manos (como jareth en labyrinth).

-Rolthos, has sufrido daño? Necesitas ayuda?- Pregunta, sin mirar siquiera al paladin. Solo tiene la vista fija en la bola, que segun pasa de mano a mano deslizándose, va formando una pequeña nube de colores en su interior (para ello uso prestidigitacion)

 - El frío de esa criatura me ha robado la fuerza, como si una debilidad me hubiese asaltado repentinamente... - Dice apoyándose fatigadamente en la pared cerca de la entrada a la estancia de los nichos. Quizás en un descanso me recupere. Cómo si de fatiga normal se tratarse... - Aisha, tu eres experta en muertos vivientes, que sabes de estás criaturas? - Dice con un suspiro y separándose de la pared, a la espera del regreso de los espíritus.

Las sombras sorprenden al cazador al igual que a sus compañeros recordándole que, tal vez, ponerse a discutir en mitad de un pasillo en zona enemiga no sea la mejor opción "Es una maldita wraith, te maldigo por impedir que los muertos descansen".

Enzarzado en su forma lupina, trata de rematar a la sombra que ya ha herido Nessa en combate, cuando ve por el rabillo del ojo como la horrenda líder de las sombras se aleja del sonido de la campana de Aisha. En un relampagueante instante, sopesa las fuerzas con las que se enfrentan sus compañeros frente a la posibilidad de permitir huir a semejante aberración.

"Tu sustento se basa en usar las almas de los pobres desgraciados que ya no tienen ni voto ni palabra en los sucesos de esta tierra... NO PUEDES HUIR"

Cruços confía plenamente en las habilidades de sus compañeros, son habilidosos y tenaces, pueden con esto y con mucho más,  Tras hendir las garras en la sombra que aún combate, se aleja al interior de la sala... Ese momento de duda es todo lo que necesita la entidad devuelta al mundo por la wraith para traspasar sus entrañas con su mano incorpórea; al igual que Rolthos, siente como su misma vitalidad y fuerza son literalmente drenadas de su cuerpo, pero aún jadeando, mantiene la compostura y no frena su persecución.

En la sala, apenas consigue resistir por unos instantes la terrible magia oscura que invade su mente intentando quebrarla, arrebatándole lo más preciado que mora en ella. Entre la niebla intenta encontrar el rastro del wraith, "Sé que estás ahí, sé que no vas a rendirte fácilmente...".

Mientras aún intenta olfatear el aire y otear entre la mágica neblina, cuando percibe que Nessa está sufriendo tanto como él, se gira y con un esfuerzo absurdo, intenta pronunciar una palabra que le prevenga...

- "grrrsalrrrr"

"Aquí todo va a ir a peor, sal de aquí... Esa maldita vela ha de ser la clave de este horror... El colmillo... NO PUEDO PERMITIR QUE ESTE MAL MORE AQUÍ NI EN NINGUNA PARTE"

Pese a la oscuridad que les rodea a Nessa y a él, un leve titileo de la vela cuando entró siguiendo al espectro y lo fría que está la pared del fondo, Cruços diría que el espectro la acaba de atravesar. 

Mira hacia Nessa, la cual gime y palidece, aunque aprieta la mandíbula y se pone a investigar el altar, y el hombre maldito con la licantropía se da cuenta que nada tiene mucho sentido. El recuerdo de sus batallas en Tenth, los peligros que está afrontando aquí, en la supuesta segura Ciudad Libre y sus tierras... el mal mismo que mora en esta sala. Todo le confirma que no importa cuánto luche, cuánto se esfuerce, el mal prevalecerá. Sus músculos le duelen, su ánimo se ensombrece. De pronto se siente muy cansado. 

Nessa, luchando contra esa sensación de pérdida escudriña el altar. Se trata de una pieza tallada en una roca casi completamente negra, con alguna veta que parece gris que gira y se retuerce en su interior como volutas de humo. 

El objeto similar a un colmillo que descansa en el altar parece un cuerno, adornado con dos abrazaderas de plata talladas con motivos esqueléticos y una boquilla de plata para soplarlo. Una fina cadena de plata enlaza las dos abrazaderas. La vela negra no parece emitir ningún calor, aunque Nessa está en la otra punta de la mesa. 

Los demás miran a su alrededor nerviosos, temiendo la aparición de la sombra que ha huido o del espectro, pero Aisha les tranquiliza. 

- Aún tardarán un poco en atreverse a volver por aquí, si es que lo hacen alguna vez - 

"Nada tiene sentido, cada paso cuesta como si el cuerpo pesase la carga de una yegua inerte. ¿Para qué luchar? ¿Por qué no dejarse llevar a un sedoso baño oscuro y  mecerse en la eternidad del descanso? Tenth estaba perdido y tantos perdieron sus vidas por nada... No tiene sentido luchar. Como en Tenth. Como en Tenth. Como en casa."

Save WIS: 22

Cuando el mal intenta corromper un alma pura, intenta ofrecerle todo aquello que por el bien de los demás se está negando. Rodear todo el espectro de la más primigenia desesperación para que simplemente no merezca la pena esforzarse en la encarnizada lucha que es sobrevivir día a día; cuando el mal intenta corromper a un cazador de sangre, primero ha de comprender que la desesperación es ese lugar al que llaman hogar.

Cruços, por unos segundos, parece infundido por un brote de rabia. Salta por encima de los sarcofagos hasta el altar y arremete contra la vela negra que no irradia calor, sino frío y podredumbre del alma.

Aunque su mente ha resistido el influjo de esta oscura magia, su cuerpo está siendo corrompido a ojos vista y la bestia que es capaz de arremeter contra criaturas de lo más variopintas, es incapaz de atravesar el halo de oscuridad y niebla que irradia una jodida vela.

[corramos un estúpido velo xDDD] 

Jen, ensimismade en sus juegos malabares con la esfera de cristal, empieza a tararear una suave melodía junto a la puerta entreabierta que da a la sala donde se encuentran Nessa y Cruços.

"O bonny Portmore, I am sorry to see
Such a woeful destruction of your ornament tree...

For it stood on your shore for many's the long day
Till the long boats from Antrim came to float it away...."

Canta bajito, a veces ni se entiende lo que está diciendo, pero la suave y sedosa melodía es una de tantas que se han escuchado mil y una veces en las tabernas de Greyhawk... Esas canciones que alejan la oscuridad del alma, y dan un respiro al corazón cansado.

(Caseo "Bardic inspiration" sobre la persona que esté mas cerca de mi en el interior de la cámara, creo que es Nessa. Si da el hechizo, que no lo se porque no me queda muy claro si bardic inspiration se castea en masa o a una sola persona, también se lo lanzo a Cruços)

Al sentir movimientos bruscos en la sala se asoma y ve a Cruços atacando al aire. Sus pies se afianzan dispuesto a entrar en combate de nuevo. - Que ocurre... has encontrado mas espiritus? Malditasea, por Mayaheine! Salid de esa sala ya!

Cuanto más tiempo paso en esta sala, más claro me queda que es un lugar maligno, y lo que lo hechiza se ha metido hasta en lo más profundo de mi interior. Estoy casi a punto de darme la vuelta y salir, cuando oigo al hombre lobo pronunciar algo inteligible:

- "Grrrsalrrrr"

Sólo los demonios saben qué querrá decir, pero lo que es seguro es que él también está sufriendo. Acto seguido se lanza contra el altar, como si quisiera destrozarlo, pero lo angosto de la habitación no le permite moverse cómodamente, y su garra acaba estrellándose contra la pared.

"¿Piensa que el altar es maligno? ¿Quizás sea la fuente de poder de las criaturas que lo habitaban? Desde luego, no parece nada natural..." - pienso mientras paso la mano unos centímetros sobre la vela, notando que no emite calor alguno.

Aún con mi espada en mano, y esperando a que Cruços se aparte del altar, lanzo un ataque a la vela

La intensidad de las emociones que les recorren y la antinatural oscuridad de la sala hace que ambos avezados luchadores no consigan acertar a la vela. 

La voz de Jen cantando en el exterior hace que Nessa recuerde por un segundo que hay otras cosas en el mundo aparte de tantos malos recuerdos. Intenta agarrarse a ese sentimiento.

-Oh bonny portm~....OYE, vais a tardar mucho????- Jen deja de cantar y se asoma a la habitacion, al no oir nada desde el interior. Abre la puerta del todo y se queda en el umbral.

-Si os estais liando, os aseguro que hay sitios mejores para ello-

En lo que le parece una eternidad,Nessa se gira para mirar a Jen, y la visión de una cara amiga hace como que despierte de un largo y pesado sueño. ¿Qué hace en esa sala? ¿Para qué ha entrado? ¿Qué le importa a ella un maldito wraith y un maldito altar?

- .... Jen, no entres - le advierto.

Y empiezo a caminar hasta la puerta, aunque antes le digo al cazador:

- Cruços, ¡déjalo estar!

Nessa se mueve hacia el exterior de la sala pero esta tan, tan cansada. No es sólo cansancio físico, Nessa no sabe explicarlo, pero empieza a darse cuenta de que tanta lucha, tanto miedo, tanto dolor, no tienen mucho sentido, y eso la agota. La pierna le duele mucho de pronto, igual tenía que haber hecho caso a Aisha y haberse quedado quieta un rato más. Aún podía sentir los colmillos de aquel horror cerrándose en su carne y un escalofrío le recorrió la espina dorsal, haciendo que se tambaleara y se apoyara en la tumba que tenía al lado mientras iba hacia la puerta. 

Jen vio a Nessa apoyarse, pálida, contra una tumba y aconsejarle que no entrara. 

Cruços, en su frustración, golpeó por fin la maldita vela y esta salió despedida, cortada en dos, por los aires y golpeó la pared tras Nessa. El curtido cazador de sangre parpadeó incrédulo al ver que la vela, no se apagaba. 

Harto de este lugar, cogió el cuerno de la mesa y se dirigió hacia Nessa para ayudarle a salir de allí. Saltó hacia el sepulcro para moverse con más comodidad y... 

Algo estalló tras Cruços. Al levantar el cuerno del altar, algo envió una onda expansiva por toda la sala. 

Jen vio como las sombras se ondulaban y golpeaban a sus amigos, como si una gran piedra hubiera sido arrojada a la superficie de un lago en mitad de la noche y hubiera creado una enorme ola en sus tranquilas aguas. 

Nessa y Cruços salieron despedidos por la sala. Cruços en mitad de su salto voló mas lejos y Nessa fue arrojada contra el sarcófago que tenía frente a ella. Entre la fuerza de la energía necrótica, y el golpe que se da en la cabeza. Jen pierde de vista a Nessa que cae tras la tumba. Y apenas ve a Cruços que cae entre dos de ellos. 

Jen sintió como su pelo y ropajes se agitaban por la extraña energía, pero el barde no se vio afectado de la misma manera que sus amigos en el interior de la sala, aunque pudo sentir el frío que aquella extraña explosión acarreaba. 

Toda la habitación da vueltas tras la explosión... El cazador vuela por los aires y su vida pasa por delante de los ojos. Por un instante duda... ¿Ha sido un error perseguir al wraith? La sangre le hierve ante la perspectiva de saber con certeza que el mal encarnado no debe morar y sentirse impotente al no ser capaz de hacerle frente.

Todo hilo de pensamiento desaparece al ver a Nessa caer inerte al otro lado de uno de los sarcófagos "¡Nessa no!". Todo su cuerpo tiembla de temor cuando pierde de vista el cuerpo de su compañera "No, otra vez no, así no...".

Cae en mitad de la sala, tumbado en la helada piedra, herido al borde de la inconsciencia, temblando de temor, dolor y rabia por haber sido causante de las heridas de su compañera, por haber sido el causante de poner en peligro al grupo por convicciones que no son las suyas. "No, así no, no puede ser que el final sea así".

Asomado a la puerta cerca de Jen y al ver a sus amigos ser afectados por una explosión, Rolthos les impreca. - Me cago en vuestra inconsciencia! - Y sin perder un momento entra en la habitación. Apartando a Jen de forma algo brusca, yendo a por Nessa, cogiendola y arrastrandola hacia afuera. 

Seth que estaba entretenido viendo a Jen haciendo malabares y cantar, al ver que ésta se acerca a la puerta, se levanta y se acerca también, justo para ver cómo Nessa se desploma y a Cruços jadeando, en seguida piensa en un plan, bastante loco, pero un plan...

- Lo Kag! Ayúdame, por favor - dice mientras se ata su querida cuerda a la cintura y le da el extremo al barbado - voy a entrar a por Cruços si ves que empiezo a actuar raro, o cuando llegue hasta él, tirad de la cuerda para intentar rescatarles, y les tratamos aquí fuera, ya que parece que todo el problema es esa habitación...

ras decir eso, toma carrerilla y entra en la habitación, según entra una sensación de frío y depresión intenta invadirle, pero el joven pícaro esta demasiado centrado pensando en que al final le va a tocar ir a rescatar a quien hace u os instantes le llamo cobarde... dando una serie de ágiles saltos, llega hasta Cruços, y cambia la cuerda de su cintura a un nudo sobre el pecho del transformado cazador y cuando termine exclama - AHORA LO KAG! TIRAD!!!

El paladin ve a Nessa y Cruços caer bajo el poder de la explosión de poder oscuro y siente cómo sus mayores miedos se hacen realidad. Sus amigos, muriendo a su alrededor sin que él pueda hacer nada. Impotente sin poder defenderlos, sin poder ayudarlos. El momento de duda hace que, al ir a saltar hacia el sarcófago, apoye el pie justo en el borde de este y al apoyar todo su peso para subir el pie se escurre y por el traspiés casi se cae. Maldiciendo, Rolthos se esfuerza por llegar al lado de Nessa, rozando con su armadura y su arma las sepulturas de los guerreros antaño muertos. 

Consigue llegar a donde está Nessa y la ayuda a levantarse. Comprueba con alivio que sólo está aturdida por el golpe y, aunque tiene una fea herida en la frente, no parece tener estar tan mal. 

Seth le arroja la cuerda a Lo Kag y salta ágilmente por encima de las tumbas. Por un segundo duda de si será capaz o no de hacerlo. Al fin y al cabo nunca ha sido el mejor ¿verdad? Siempre ha temido no ser lo suficientemente bueno, para cumplir con las expectativas de Poot, para llevar a cabo los trabajos y ahora para sobrevivir en este lugar maldito. Pero, el movimiento rápido de sus pies le ayuda a mantenerse concentrado mientras salta del escudo de piedra de un guerrero al yelmo de otro y se gira para agacharse y ayudar a Cruços a levantarse. El hombre lobo se ha llevado la peor parte de la explosión y Seth ve que le sangan los oidos y parece que tiene varias costillas rotas por el gesto de dolor que ponen sus rasgos lobunos y el moratón que es visible incluso bajo el pelaje. Seth se siente un poco intimidado al levantar la figura del hombre-lobo y espera que su amigo conserve la cordura pese al dolor de la explosión. Le indica con gesto a Lo Kag que tire de él, pero el bárbaro se confía y tira con una sola mano, sin soltar la antorcha. Ni siquiera él es capaz de mover el peso combinado del pícaro y el gran licántropo con una mano. El goliath reniega y deja caer la antorcha para asir la cuerda con las dos manos y tirar.

-CRUÇOS!- Exclama al ver el mal estado del hombre lobo. Inconscientemente agarra la cuerda que sujeta también Lo Kag, y ayuda a tirar, pero el peso muerto del hombre lobo es demasiado para su flaco cuerpo. (Tirada de athletics como accion: 7)

Suelta entonces la cuerda y se centra en el malherido cuerpo del hombre lobo.

-Oh, viajante, dale valor a mi amigo...- Se concentra e imagina las heridas de Cruços cerrandose (B.A: Healing word a Cruços: 8 puntos).
(Movimiento: ninguno)

Recupero la consciencia, pero con el dolor de cabeza y la sangre cayendo sobre mis ojos me cuesta entender lo que está sucediendo a mi alrededor. Noto que alguien me sujeta y, enfocando a duras penas, veo a Rolthos delante de mi. Me está diciendo algo, pero el ruido de la explosión me ha ensordecido y no logro entender nada.

Aun así, gracias al paladín, termino de levantarme y comienzo a andar poco a poco hacia la puerta. Parece tan lejos ... ¿podré llegar? ¿Importa siquiera? Podría sentarme y quedarme en este sitio para siempre. ¿Acaso le importaría a alguien? 

Action: dash