El vino está realmente delicioso, pero la ranger bebe poco, consciente como es de que no aguanta mucho el alcohol y que no tiene el día siguiente para relajarse, precisamente.
Va escuchando las preguntas del paladín, y cuando ve que este insiste con el tema que claramente remueve un pasado doloroso en Ornym, le lanza una mirada significativa al tiempo que dice un simple:
Cuando Ornym ve el carcaj de Nessa se acerca, sorprendido. - Este es un carcaj de los Caballeros Verdes. ¿Dónde lo has encontrado? -
Cuando Nessa le dice donde fue el elfo se lo devuelve con una sonrisa - Me alegro que lo hayas encontrado y no esté más en aquel lúgubre lugar. -
Tienes razón joven paladín- responde Ornym a Rolthos -
Me he quedado demasiado tiempo en el pasado. Ha llegado el momento de mirar hacia delante y seguir viviendo -
De nuevo sus ojos esmeralda se dirigen hacia Nessa y a Jen no se le escapa que Vraak se envara un poco.
- La situación es grave. La Cacería apareció en varios puntos de la frontera y atacó e incendio las poblaciones y el bosque de la frontera. Avanza hacia el centro del reino hacia Calen Othron pero hemos sido capaces de contenerlos. Uno de los mayores problemas de combatir contra la Cacería es que pueden volver al Feywild con relativa facilidad y seguir sus movimientos es complicado. Pero el mayor de los problemas es que sus propia naturaleza les hace muy resistentes a las armas y Magia de este plano, como ya habréis comprobado. Solo armas divinas, aquellas creadas en el Feywild o extremadamente poderosas pueden dañarlos. Desconozco el paradero de Lady Xan’dryla o de Sir Cynair, solo espero que estén bien. En los primeros embates de todo conflicto suele reinar el caos y el ataque nos pillo por sorpresa y aunque atacaron en la frontera el ataque vino desde el interior del Reino. Aquí es donde creemos que la traidora Aldalanatüste ha jugado un papel importante. Por suerte no conocía las defensas más interiores, si no el ataque podría haber sido mucho peor. Sabemos que tanto Zalphiros como ella se dirigen hacia el norte a lo largo de la frontera. Irán a incrementar su ejército de no-muertos, que harán desde ahí no lo sabemos. Respecto al Templo - hace una pequeña pausa - nosotros también creemos que los rumores de su reciente actividad no tienen que ver con Zalphiros y sus planes, aunque es evidente que puede utilizarlo en su favor. Cuando lo he mencionado es por que quizá, dependiendo de vuestras decisiones, tengáis que ir allí. -
- No sólo el carcaj, también la cuerda flameante salió de aquél lugar. Y he de decir que tenemos que darle las gracias a Cruços, que se empeñó en investigar una zona muy concreta de aquellas ruinas. Si hubiera dependido de mí, habríamos salido antes y no habríamos encontrado todo esto - la ranger dirige una sonrisa agradecida al cazador de sangre, que le devuelve una mirada de complicidad - No lo pasamos bien en aquél sitio, no...
La mirada de Nessa se pierde un poco en la oscuridad de la noche, recordando.
- Varios compañeros abandonaron la misión por uno u otro motivo, pero encontramos a Jen, y ... ¡ahora ya no sé ni peinarme sin ella! - dice, dandole un toque cariñoso a la barda en el brazo.
La ranger parece estar encontrando un huequito de paz .... que por desgracia se vuelve a romper cuando Rolthos hace una nueva mención al Templo del Mal Elemental. Sin quererlo, el paladín provoca una respuesta en Ornym que hace envararse a Vraak y, por ende, también a ella.
Internamente, la ranger le da vueltas a qué demonios está pasando. Porque algo está pasando. ¿No? ¿Tiene que hacer algo al respecto? ¿Nada? Busca la mirada de Jen en un intento notar si la barda se está dando cuenta...
Externamente, Nessa sigue la explicación del elfo acerca de la situación tras el ataque de Zalphiros y la Cacería Salvaje, y cuando nota que el vino élfico le está afectando bastante (a pesar de haber bebido tan poco) comenta:
- Esto... esto es unnnn pooooco ... fuerte, ¿no? - notando el rubor en las mejillas y un cierto dolor de cabeza, la chica mira a Jen - a la que ve perfectamente bien - y a Rolthos - que sí parece más afectado - Eeeerm, creo que yo me planto aquí. ¿No estáis cansados los demás? Yo mucho, la verdad. Creo que necesito dormir ya...
- Los licores élficos no están hechos para todo el mundo, pero podéis disfrutar algo más de ellos hoy al menos. -
- Y que lo digas amigo - dice Vraak sirviéndose otra copa y pasándole la botella a Cruços el cual le da un buen tiento sonriendo.
- Aún tenéis que decidir qué vais a hacer - dice Ornym a la idea de Nessa de ir a dormir - ¿****inuareis a vuestro pueblo? ¿Hablábais en serio cuando decíais que querías ayudar a Celene? -
Como si sus palabras tuvieran algún efecto mágico, todos notaron cómo los efectos del vino se apaciguaban, aún tenían la cabeza ligera, y el calor en el estómago, pero más que la voz de Ornym, la gravedad de la situación hizo que el ambiente festivo se contuviera un poco, al menos hasta que tomaran una decisión.
Jen responde a Nessa levantando una ceja y encogiendose de hombros. El acróbata en su interior daba brincos de histeria, quería salir a ser testigo de aquel triángulo amoroso que se estaba cociendo allí. La tiefling se arrebuja en su capa con un gruñido, y da una palmada a Nessa en el brazo -Mañana hablamos en el camino.- Le promete. -------
(Mientras Nessa y Ornym hablan)
Ve a Julian dejar el vaso tras el primer trago, atragantarse con la fuerza del licor y sujetarse la cabeza entre las manos, no acostumbrado a la intemperie, la comida y el vino. Debe de habersele revuelto todo un poco.
Con un suspiro deja su propio vaso, y se acerca a su lado, sentándose de piernas cruzadas frente al médico, demandando espacio. -Julian.- Llama, posando la mano en su hombro. Su expresion es severa. Nada de "Ilya" u otros apodos que hayan podido surgir a lo largo de su relacion. Julian responde con un quejido hecho murmullo. -Ven.- Da un pequeño apreton en su hombro, su tacto firme y real. -Apóyate en mi.- Da un empujoncito a su hombro para que se recueste en una posicion más cómoda, y se dedica a pasar los dedos por el espeso cabello del doctor, presionando ligeramente el camino que hacen estos de sien a nuca, en un constante masaje.
Dicho esto vuelve a centrarse en la conversacion, a tiempo para pillar la ultima pregunta del elfo.
Julián da un suspiro y se relaja en el hombro de Jen
- Recuérdame que les diga a los de los viñedos que hagan este tipo de vino. Es fuerte pero esta buenísimo- dice dando un pequeño sorbo de su copa - Tenemos que hablar cuando toda esta conversación acabe - le susurra
Aunque sigue siendo cierto que está muy muy cansada, Nessa se espabila de golpe con las preguntas de Ornym. Suspira diciendo:
- Perdón... creía podríamos esperar a la mañana. Esas ocho horas de sueño tan humanas las sigo - seguimos - necesitando ... sobre todo después de un día como el de hoy.
Frotándose un poquito los ojos, la ranger intenta recuperar el hilo de pensamiento para responder:
- Ehh, veamos. Lo primero: creo que hablo por todos cuando digo que no lanzaríamos el mensaje de ayudar a Celene de otra forma que no sea completamente en serio. Es algo que todos hemos ido pronunciando en diferentes momentos los últimos días, desde que Abraldazin nos teleportó a las murallas de Greyhakw y vimos el fuego en la distancia por primera vez... Por supuesto que queremos ayudar. La cuestión es, ¿cómo? ¿La manera de hacerlo pasa por el Templo del Mal Elemental? ¿Hay otras opciones? Evaluémoslas, claro.
Para un momento, en el que mira de nuevo a la lejanía, intentando elegir bien las siguientes palabras:
- Lo lógico sería hacer esto ahora que ya estamos en Celene. Pero esto obviamente implicará retrasar el volver a Furyondy, con primera parada en Libernen. Y os soy sincera: por mucho que intente ser fría y pensar en que hay más gente afectada que mi familia y mi pueblo, no puedo dejar pensar en ellos. Ya sé que ... que es menos importante y además, uno de mis principales motivos para volver a casa ha perdido todo el sentido ...
A la ranger le cuesta continuar.
- ... ahora ya sé que puedo dar a Rose por perdida - mira a Ornym brevemente, en una mezcla de agradecimiento por haber intentando buscarla, y de completa tristeza al mismo tiempo - Pero me gustaría intentar todo lo que esté en nuestras manos para enviar al menos un aviso al pueblo para que se preparen ... si es que aún pueden hacerlo. Yo sólo puedo conjurar un mensajero cuando estemos a 24 horas de distancia del pueblo, y aún estamos a tres días. ¿Hay alguna opción mejor para avisarles? En cualquier caso .. si la opinión general es que el mejor plan de acción es quedarnos en Celene o ir al Templo en lugar de ir a Libernen ... bien, así sea.
Contraria a su primera opinión, Nessa toma otro trago de vino que le parece bastante menos dulce en esta ocasión pero le sienta igual de fuerte que el anterior. ¿Acaso podía ser de otra manera?
Escuchando a Ornym y ante la mirada reprobadora de Nessa, Rolthos endureció su expresión. La situación era bastante desesperada y por muy dolorosas que fuesen las experiencias del veterano elfo, no era el momento de que tan antiguas heridas entorpecieran posibles soluciónes. Por desgracia la información del elfo no pareció aclarar nada de forma definitiva y un resignado Rolthos asintió pesadamente. La incertidumbre de lo que había ocurrido en el frente y en particular a Xan’dryla o a Sir Cynair le hizo suspirar con impotente ansiedad. A pesar de las pullas de Xan’dryla, las múltiples peripecias a su lado le habían hecho apreciarla como compañera. Y la admiración por Cynair había crecido en los dos meses que había pasado entrenando con él.
- Mi idea, ¿nuestra idea?... era intentar capturar algún lugarteniente para ver si podíamos discernir la intención de Zalphiros, Lanthiel... Entiendo que quizás no sea tan fácil hacerlo como decirlo… sobre todo si no disponemos de más información. En Greyhawck prometieron contactar con nosotros, pero aún no hemos recibido nada, imagino que o no hay noticias que nos incumban o tienen más acuciantes necesidades. – Dijo mirando al cielo. - Si el templo es un peligro, ciertamente sería ventajoso atajarlo cuando el mal es aún incipiente, antes de que se convierta en algo mucho peor, en ese caso, información sobre los peligros del templo sería una definitiva ventaja.
Pronto Rolthos sintió el efecto del vino causándole un pequeño rubor y mareo. - Es un vino extraordinario… pero no esperaba que un vino élfico fuese tan fuerte… espero que al menos no nos deje una resaca mañana. - Dijo sirviéndose una copa y brindando con sus compañeros. - ¡Por todos nosotros, porque derrotemos a los peligros que tenemos por delante! - Dijo con el ánimo algo más ligero. Una sonrisa apareció al ver los cruces de miradas y afectos entre los compañeros.
Ante la pregunta del elfo y el cambio de aire a algo más serio Rolthos dejó la copa a un lado. - Me reitero… no sé dónde estarán mejor utilizados nuestros recursos. Pero si podemos ayudar a Celene sería excelente. Me siento responsable en parte por lo que está pasando y ocuparme de esas consecuencias es casi una obligación por mis votos de paladín.
Rolthos miró con preocupación y compasión a la compungida Ranger. - Siento lo que le ha pasado a Rose, Nessa... - Si lo consideras necesario podrías ir a avisarles tú en solitario. Si hay alguien que pueda sobrevivir en esta frente sola eres tú. No me siento capaz de forzarte a abandonar a tu familia. Pero escuchemos que posibles líneas de acción tenemos para ayudar a Celene.
La exploradora dirige una mirada agradecida al paladín, pero tarda un rato en responder. Está intentando por todos los medios no ceder a las lágrimas que se le están agolpando tras haber pronunciado en voz alta lo que llevaba tanto tiempo temiendo y que había sido confirmado tan solo un rato atrás. Le gustaba tan poco que la vieran llorar...
Suspira largamente e intenta ignorar los ojos preocupados de sus compañeros en ella. Cuando por fin logra serenarse un poco, comenta:
- Creo, Rolthos, que en este caso estás confiando en mis habilidades en exceso. Puede que haya sido buena alumna de mi maestro y que haya aprendido mucho en todo este tiempo con vosotros, pero a tanto nivel creo que no llego aún - dice, intentando sonreír a pesar de todo - No con la Cacería rondando, al menos.
Medita sus palabras antes de continuar:
- No, creo que es mejor que permanezcamos juntos. Juntos es como hemos llegado hasta aquí y juntos es como acabaremos este camino, sea donde sea que nos lleve. Y es cierto que me gustaría ver a mi familia de nuevo, pero ...
"¿Es cierto, Nessa? ¿Te gustaría? ¿O prefieres huir *de nuevo* para no tener que verles? Ah.. al fin y al cabo, Andrew tenía razón..."
- ... la prioridad es otra ahora - se dirige ahora a Ornym - ¿Crees que en el Templo del Mal Elemental podríamos encontrar armas o artefactos que nos permitan ser más efectivos contra la Cacería o contra Zalphiros? Tú conoces el Templo y conoces además nuestras habilidades ... ¿crees que podemos enfrentarnos a lo que albergue en su interior? Si la respuesta a ambas preguntas es afirmativa - mira al grupo ahora - vayamos. Creo saber más o menos donde se encuentra...:
Bienvenido a su servicio de Google Oerth Maps + Yahoo Oerth Weather particular.
Viaje: Greykawk → Libernen / Día de viaje: 4 / Hora: Noche / Fecha: ¿Finales de Patchwall/Brightleaf/Octubre)? / Clima: anormalmente frío para la fecha (gracias, Zalphiros & Cacería Salvaje ¯\_(ツ)_/¯).
...al sur de la frontera entre Furyondy y Veluna, cerca de las Colinas de Kron - dirige una mirada interrogativa al elfo, para asegurarse de que está en lo correcto - así que podría guiarnos hasta allí. Pero no sé a priori cuántos días tardaríamos en llegar ni cómo es el Templo por dentro como para saber cuánto tiempo estaremos allí dentro. ¿Qué nos puedes decir de todo esto, Ornym?
-Saben bien los dioses que yo no tengo madera para el campo de batalla. Pero si en el templo encontramos una forma de golpear a Zalphiros en la nuca, estoy con vosotros.-
Su mirada se torna a Nessa, decidida, focalizada. -Como siempre, Nessa, tus palabras son certeras como flechas. Me parte el alma verte dividida de esta forma.... Pero si tenemos la oportunidad de atajar a ese hijo de puta, me aferraré a ella con uñas y dientes.-
-Daremos un entierro a Rose, si lo deseas. Esta noche, o la que viene, o cuando te sientas preparada.-
- Tienes más madera de la que crees, Jen - Nessa sonríe a su amiga al decir esto - Sólo necesitas un poco más de confianza. Es normal ... llevas en esto menos que nosotros. Pero precisamente por eso somos un equipo, ¿no? Porque nos complementamos ante las situaciones que se nos presentan.
Cuando la barda menciona un posible entierro, Nessa se queda unos segundos mirándola, luego menea un poco la cabeza con gesto cansado y triste:
- Dioses, ni se me había ocurrido - desvía un momento la mirada, pensativa, y luego continúa - Sí ... sí, me gustaría hacer algo pero ... quizás más adelante. Déjame pensarlo - dice mientras dirige una mirada agradecida a su amiga por la sugerencia.
El elfo toma una copa de vino y su mirada esmeralda se pierde en un punto indeterminado de la helada floresta que les rodea. El verde de sus ojos parece refulgir pese a la escasez de luz.
- Ese maldito lugar... -comienza, su voz casi un susurro obliga a los demás a prestar atención de manera intuitiva.
- Haré la historia lo más corta posible, no sólo porque los recuerdos duelan demasiado aún, si no porque narrar todos los hechos nos llevaría más de una noche. -toma otro sorbo, al parecer ajeno al efecto que el vino tiene sobre las cabezas y espíritus de sus compañeros.
- Lo que comenzó siendo un lugar de culto para ciertos bandidos creció rápidamente hasta convertirse en un lugar donde se adoraban a los aspectos más caóticos y malvados de los primordiales elementales. Pese a las rencillas entre las diferentes facciones el Templo fue creciendo y en poder e influencia, atrayendo cada vez más y más seguidores, hasta llegar a convertirse en una fuerza que amenazaba a los reinos colindantes. Celene, Furyondya, Verbonoc y los gnomos de las Colinas Krom unieron fuerzas para acabar con los ejércitos del Templo y con el lugar mismo. Por muy impresionantes que fueran sus fuerzas no tenían nada que hacer contra la cruzada que se desató sobre ellos y las batallas fueron rápidas y decisivas. Pese a la furia elemental desatada contra nosotros, sus fuerzas compuestas en su mayoría por goblinoides se estrellaron contra nosotros y y se dispersaron como hierba suelta en el vendalval que era la Cruzada. No pasaron más de dos semanas cuando por fin sitiamos el Templo mismo. Poco sabíamos de lo que realmente moraba allí. Por mucho que lanzamos ataques y partidas de guerra no conseguíamos derrotar al mal que acechaba en las profundidades del Templo. Al contrario, parecía fortalecerse con cada muerte y cuerpo, sin importar el bando, que pasaba a pudrirse en aquella tierra maldita y ser alimento de gusanos y hongos. -
Se detiene unos momentos, parece que va a dar otro sorbo a su vino, pero la copa permanece colgando inerte de una de sus manos.
- Entonces aquello comenzó a contraatacar. Nuestros magos y clérigos morían entre terribles estertores, nuestros guerreros vomitaban y sufrían terribles dolores. No conseguíamos protegernos contra aquello que pugnaba por salir de los últimos niveles del Templo. En un movimiento desesperado lanzamos un ataque compuesto por nuestros mejores guerreros. Éramos un pequeño grupo de apenas nueve miembros. Diente de Jade, un monje venido del monasterio del dragón, la Honorable Bathia, paladin de tu misma Orden Rolthos, jamás conocí a nadie tan valiente, Arcandor el Archimago, el Patriaca de San Cuthbert Azemar Brom, el habilidoso gnomo Slykmeduck, Krelzoshak, el fuerte guerrero de escamas negras, Solrg, el goliath que casi daba con el techo al cruzar el techo y cuya fuerza era digna de gigantes, mi hermana y yo. -el atisbo de una sonrisa asoma a sus labios al recordar a sus viejos amigos, pero enseguida desaparece.
- Mi hermana Isarana nos guió hasta que, por fin, conseguimos penetrar en que creíamos el último nivel. Allí, en el interior de una pirámide negra, sentada en su trono de hongos y putrefacción se encontraba Zuggtumoy, la Reina de los Hongos. La Archiduque del Infierno había penetrado en nuestro plano, aún desconocemos cómo, pero era la responsable de todo. No podíamos derrotarla, ni siquiera con nuestras habilidades y poderes combinados. Azemar consultó con su dios y nos sugirió que atrapáramos a la criatura de nuevo, Si había escapado de su prisión en los Infiernos era necesario volver a atraparla antes de que su poder siguiera creciendo y consumiera el mundo. Bathia confirmó que Mayaheine sugería lo mismo y entonces Arcandor dijo conocer el ritual adecuado, pero que el mismo requería un sacrificio incomensurable. - Su voz se quebró un poco pero continuó hablando - Debíamos activar cuatro sellos, pero tan sólo la fuerza y poder de aquellos comprometidos con detener a la demonio y salvar a los pueblos libres podría retenerla. Los elegidos librarian una batalla eterna contra ella para evitar que sus poderes y fuerza llegaran a la superficie. Dos almas para cada sello. Todos permanecimos en silencio, la primera en hablar fue Bathia, preguntándo porqué no habíamos empezado aún. Arcandor realizaria el ritual que crearía una esfera de poder y contendría las almas de los demás, incluida la suya que sería la primera en ser parte del orbe. Alguien tendría que llevar el orbe hasta los lugares designados para crear el resto de sellos. Ninguno queríamos ser el portador. - esta última frase deja entrever algo de orgullo por el valor de sus viejos amigos. - Dejámos pues, que la Dama de la Fortuna decidiera por nosotros quien sería el portador. - Hace una pausa mientras traga saliva - Tuve la mala suerte de ser el elegido. No mancillé entonces el valor del sacrificio de mis amigos con quejas ni lamentaciones, aunque al mirar a mi hermana a los ojos mi voluntad se quebró y le supliqué que me dejara tomar su lugar. Ella sólo me sonrió y me besó en la frente. Arcandor comenzó el ritual. Zuggtumoy, como si supiera de nuestros planes lanzó su ataque. Mientras mis compañeros entregaban voluntariamente su alma uno a uno yo luché hasta que me sangraron los dedos al disparar mis flechas y mis brazos se entumecieron de usar las espadas. Al final la propia Archidemonia se unió a la batalla- una de las manos de Ornym va hacia su costado derecho de manera inconsciente - fui herido por sus garras, pero mi hermana pudo lanzar una última flecha a la criatura que me liberó. Sus últimas palabras, mientras el fuego azul y plateado del hechizo la envolvían fueron "Corre". Tomé el igneo orbe con mis manos y comencé mi parte. Creando sellos que mantendrían a aquel abominable ser encerrado por toda la eternidad. En mi rápida huida hasta la superficie no dejé de escuchar las voces de mis amigos dándome ánimos pero cada vez me costaba más respirar. Caí al terminar el último sello, ante las puertas del Templo, pensé que la vida me abandonaba pero fui hallado y mis heridas sanadas. Al menos las físicas. Tras aquello necesitaba tiempo para recuperarme, así que me fui a una tranquila aldea humana donde nadie me conocía ni apenas habían oído hablar de todo esto. - Ornym hace una pausa.
- ¿Creo que podéis luchar contra lo que hay bajo el Templo? No. Sería un suicidio intentarlo siquiera. Pero creo que podéis bajar hasta allí y recuperar las armas de algunos de mis compañeros. El hacha de Slorg podía partir la misma roca, el bastón de Arcandor poseía increíbles habiliades arcanas, la hoja de Bathia estaba consagrada a Mayaheine y el arco de mi hermana, Isilcúnë, fue creado por Solonor Thelandria y Sheanine en Arvandor, sería sin duda un arma que el mismísimo general de la Cacería temería. Todas aquellas armas legendarias quedaron allí abandonadas mientras yo cumplía con mi deber y me aseguraba que el sacrificio de mis amigos no fue en vano. Sé que se han hecho intentos de recuperarlas antes por alguna expedición buscando estas reliquias o conocimiento sobre el Templo pero no se han hallado aún. Deben estar en algún lugar de aquel maldito lugar y, sinceramente, creo que daría algo de paz a mi corazón saber que han sido recuperadas. - se vuelve hacia Nessa - Mi hermana estaría orgullosa de que fueras tú quien portara su arco, si lográis hallarlo. Si además conseguís información de porqué los efectos del Templo están sintiéndose de nuevo en las tierras de alrededor estoy seguro que el Rey de Furyondya y el Archiduque de Verbonoc os estarán agradecidos. No toméis esta decisión a la ligera. Pese a vuestra involucración en las primeras etapas de esta historia por Zalphiros, no sois responsables de ello. El único culpable es Zalphiros, no carguéis con cargas que no son vuestras. No hay garantías de que podáis recuperar las armas y quizá vuestras habilidades y esfuerzos sean mejor aprovechados en otros lugares, ya sea en Liebernnen o en la ayuda de la defensa de la propia Celene. Este es tan sólo un sendero más frente a vosotros. Vuestra es la decisión de transitarlo o no. Decidáis lo que decidáis contáis con mi apoyo. -
Ahora si, y sin desviar los ojos esmeraldas de Nessa, tomó un último sorbo de vino de su copa.
Nessa escucha esta nueva perla del pasado de Ornym con atención, pero también con preocupación. En cierto sentido es lo que cabría esperar, por conocer de antemano que el desenlace fue tan trágico que obligó a alguien como él a recluirse en su pueblo en busca de paz y soledad. Pero no era sólo eso...
Con cada palabra que desgranaba, la joven iba descubriendo nuevas facetas en el elfo que hasta ahora eran completamente desconocidas para ella: el Ornym vulnerable, el Ornym asustado, falible, desgarrado por la pérdida de sus compañeros de armas, sus amigos, su hermana. Nessa se preguntaba también cómo sería Isarana: ¿sería ella la pequeña, como Rose? ¿se parecería físicamente a su hermano? Qué extraño era todo esto. En escasas horas había descubierto más detalles sobre su pasado que en todo el tiempo que habían pasado juntos como mentor y alumna, y esto tenía a la joven ranger muy desubicada.
Cuando menciona a Zuggtumoy, Nessa suelta un jadeo de sorpresa y mira automáticamente a sus compañeros, intercambiando miradas que indican que ellos también se han acordado de Belkar, el druida loco con el que habían luchado en las ruinas de las Planicies de Ceniza. ¿No había caído precisamente bajo el influjo de la afamada Reina de los Hongos?
Continuó escuchando la historia y cuando por fin terminó, Nessa no pudo más que musitar:
- Es una gran carga la que has arrastrado todo este tiempo... entiendo que no quisieras hablar de ello. Y aunque siento que hayas tenido que volver a revivirlo, espero al menos que compartirlo te suponga un cierto alivio…
Por un momento Nessa se para a pensar, y cuando vuelve a hablar sonríe:
- ¿Sabes? Me acuerdo de la primera vez que te ví en el pueblo. Creo yo que tenía ¿ocho? ¿nueve años? Recuerdo que iba corriendo, huyendo de Andrew que jugaba a perseguirme. En un momento dado me giré para asegurarme de que no se cayera - él tenía unos cinco añitos nada más - y cuando volví a mirar hacia adelante ... ¡plof! ... me choqué con un elfo que nunca había visto antes, ¡y que me miraba desde TAN arriba con una mirada TAN seria! - su sonrisa se amplía cuando añade - Creo que te saqué la lengua y acto seguido huí disparada. De hecho, mi padre, que lo vio todo, me riñó más tarde en casa - la joven frunce el ceño e, imitando la voz de Daelin Proudmoore, dice - "'¡Nessaia, déjate de tantas niñerías y compórtate de una vez!'"
Menea la cabeza, suspirando, y añade:
- Y aquí estamos, casi veinte años después: un suspiro para tí, pero toda una edad para mí. Y hablando, ni más ni menos, del lugar que provocó que te fueras a Libernen originalmente. Qué extraño es todo...
Inspira largamente, considerando las palabras que va a decir después:
- Mi postura ya era la de ir al Templo antes de que contaras lo que te sucedió. Ya consideraba que era una buena opción, a pesar de ... mi familia, y de que el Templo pareciera un lugar tan peligroso. Y tienes razón cuando dices que no somos responsables de los actos de Zalphiros. Pero creo que sí tenemos la responsabilidad de hacer lo posible por detenerle si tenemos la capacidad para ello...
Mira al resto de sus compañeros, preguntando silenciosamente si están de acuerdo. Y luego vuelve a mirar a Ornym directamente, y casi en un susurro añade:
- Ornym, no estoy segura de ser merecedora del arco de Isarana. Pero si localizarlo es importante para tí … entonces también lo es para mí.
Roltos asintió a Nessa y sintió una enorme consternación por la imposibilidad de que cumpliese de forma apropiada con un duelo por la muerte de su hermana. Admiraba la fortaleza y la voluntad de seguir delante y su integridad al poner el deber por encima de las imperiosas necesidades emocionales, pero sabía que aquello no era correcto. “Maldito sea Zalphiros!” pensó con mas rabia que nunca. “Esto lo tienes que pagar caro…” Después asintió a las palabras de Jen, un funeral o una ceremonia quizás diese algo de paz a Nessa.
La atención de Rolthos pasó de Nessa en su repentino luto, a su mentor. La cadencia de sus palabras y el quedo tono con la que empezó a narrar la historia le hizo entender que la historia que iba a narrar estaba también cargada de afligidas emociones. Al terminar Rolthos suspiró larga y silenciosamente.
- Lamento tu enorme perdida y el honorable y trágico destino de tus seres queridos. No nos es ajena la estrategia de encerrar demonio a demonios. - Dijo mirando a Cruços, esperando que fuese él el que quizás narrase la historia que había acontecido con su propia familia y el demonio.
- Me preocupa el nombre que has mencionado - Dijo mientras cruzó su mirada con la de Nessa, Jen y Crucos, sorprendido por la coincidencia. – ¡Zuggtumoy! No es la primera vez que nos topamos con ese demonio. Tuvimos un encuentro con un adorador que intentaba traerla a este plano. Y su influencia no era residual, aunque desde luego no tan extrema como la que narras en el templo. - Dijo Rolthos mostrando preocupación. La idea de que ocho almas mortales se enfrentasen a eternas batallas contra una Archiduque del infierno durante toda la eternidad le parecía una locura. Aunque ganasen un millón de batallas, al perder una sola de ellas la reina de los hogos se podría liberar. No podían ganar la guerra, solo ganar tiempo. Con preocupación buscó las siguientes palabas con cuidado para no herir a Ornyn. - ¿Es posible que los sellos se estén debilitando? ¿Hay alguien cuidado los sellos en este plano? Dices que uno de ellos estaba en la entrada del templo.
Cuando Nessa se mostró tan decidida a acudir al templo Rolthos frunció el ceño. A pesar de la imperiosa situación del templo, la situación del ejercito de los muertos vivientes también parecía imperiosa. Pero desconocía como se estaba desarrollando la guerra, Ornyn no les había dado ninguna información concreta y no habían recibido noticias de Greyhawck. - Ir al templo para tener más medios para enfrentarse al ejército del Zalphios me parece una insensatez. Cuantos días podríamos tardar en llegar allí… ¿Unos cinco? ¿Y otros cinco en regresar y un par más en explorar el templo? Casi 15 días… Zalphiros en apenas dos meses ha levantado todo un ejército y organizado el ataque, no me quiero ni imaginar lo que puede hacer en un par de semanas con el ejercito ya en marcha. O a donde puede llegar. Me temo que llegaríamos tarde a todo, tarde, aunque bien preparados.
Negó con la cabeza antes de que le replicasen y prosiguió. - Pero las noticias del templo, y su reactivación quizás si tengan más urgencia… En la guerra contra Zalphiros somos una pequeña fuerza más. En el templo puede que seamos la única defensa que se interponga entre la Archiduquesa y este plano.
Asintiendo a las palabras de Rolthos acerca de Zuggtumoy, Nessa complemente la información del paladín:
- Pudimos acceder al diario del tal druida, Belkar, y la influencia de Zuggtumoy sobre él pareció empezar hace unos tres años. Y continuaba hablando de ella, y de sus tratos con un vampiro - Gulthias - y algunos de sus lugartenientes bastante más recientemente. A Gulthias y la mayoría de sus lugartenientes creo que podemos darlos por muertos. Sin embargo, Lyncariel Garra Roja sí que se nos escapó... Me pregunto si seguirá en las ruinas de Oakhurst...
Cuando Rolthos termina de hablar, añade:
- Entiendo el fondo de tu mensaje, Rolthos. No creas que no he pensado en todo el tiempo que tendríamos que invertir en el templo ... pero está claro que tenemos que tomar una decisión difícil, y cualquiera de las opciones tendrá consecuencias. Pienso que preparar una buena base para un ataque contra Zalphiros no es una insensatez, ni tiempo perdido. Es algo necesario. ¿De qué nos serviría querer ir rápido para llegar y perder... quizás perecer ... ya no contra Zalphiros, sino quizá contra los miembros de la Cacería Salvaje? Además, como tú mismo dices, no somos los únicos luchando contra Zalphiros. Muchísima gente está luchando contra él ... muchos de ellos más capaces y experimentados que nosotros ... debemos confiar en ellos también, ¿no?
Si fuera un perro, Jen estaría con las orejas en alto. Incluso a la severa máscara de la tiefling se le ponen los ojos como platos al escuchar la historia del elfo. Se palpa por todas partes maldiciendo mentalmente la falta de papel y pluma en su persona inmediatamente.
-Bueno, bueno! No me lo puedo creer.- Su expresion se hace mas viva con cada palabra, cada parte del relato, y su mirada se cruza con la de Rolthos en un gesto de reconociemiento. -Ese druida, pensaba que simplemente estaba como una cabra! Pero ya veo que no. Otra vez hongos no. Ugh!- se estremece y pone cara de asco. -Pero si es lo que hace falta para adelantarnos un paso hacia Zalphiros, iré de cabeza. Mierda, por qué no tendré papel y pluma conmigo?!-
A esto Rolthos responde mostrando papel, pluma y tinta de su equipo, items que la tiefling casi le arranca de las manos con un "gracias!" antes de ponerse a escribir freneticamente. Sin levantar la vista del papel, sigue hablando.-Esta historia tiene que ser contada, por los siglos de los siglos. Tus compañeros merecen ser honrados, Ornym. Y no caer en el olvido.-
-Ornym sonríe a Jen - Mi pueblo tiene una canción para ellos…. - se corrige - para nosotros. El título podría traducirse como los Increíbles Nueve - parece sonrojarse algo - pero no me siento muy increíble por ello. Seguro que tu historia les hace justicia-
De alguna manera todos sienten que Ornym está dejando fuera de su narración la mayor parte de sus hazañas. Ser capaz de soportar el ataque de Zuggtumoy y luchar contra ella y sus siervos y los elementos del Templo mientras concluía el ritual y sellaba al demonio para siempre no debió ser precisamente tarea fácil. - No me sorprende- continúa - que la Archidemonia siga influenciando a algunos mortales. Es lo que hacen al fin y al cabo ya estén atrapados en su palmo o aquí… si alguien les busca… encontraran la forma de ofrecer a esas pobres almas lo que creen anhelar y ellos obtendrán más poder. Me alegra saber que acabasteis con ese druida loco y sus planes. No tuvo que ser sencillo. -
Mientras Nessa relata su primer encuentro Ornym la mira con una mirada algo extraña. - Si bueno… - dice algo incómodo - espero que con el tiempo hayas visto que no soy tan… enorme…-
Ornym espera a que el grupo termine de decidir y arroja algo más de información y ayuda.
- Si estáis decidíos de ir al Templo puedo ofreceros mi ayuda como guía. Ni siquiera Nessa conoce todos los caminos y puede que ahorremos algunos días usando los senderos secretos de Mi Pueblo. Podemos llegar a Libernenn y desde ahí ir hacia el norte este hacia el Templo. Me quedare con vosotros tanto como me sea posible pues los ataques de la Cacería presionan nuestras defensas. - ofrece el veterano elfo. - No os voy a engañar. Durante años he pensado que sería bueno intentar recuperar las armas de mis amigos, en especial las de mi hermana. Ahora es más una necesidad que la nostalgia de un veterano o un familiar dolido. Son embargo ahora mismo Celene no puede disponer de ninguno de sus defensores para emprender tal búsqueda. Vosotros, que no estáis incluidos en los planes de defensa de nadie, podéis ser la pieza que desequilibre la balanza en nuestro favor. -
La sorpresa se dibuja en el rostro de Nessa cuando escucha la sugerencia de Ornym de ir a Libernen.
- ¿De verdad? ¿Podemos ir al pueblo? ¡No lo creía posible sin alargar demasiado el trayecto al templo...! Si podemos usar esos caminos que mencionas y acortar el camino, desde luego... , por favor, vayamos.
Suena decidida, pero en su interior se arremolina un cúmulo de nervios. La idea de ver de nuevo a su hermano y sus padres ya le generaba bastante agobio de buenas a primeras y las malas nuevas sobre Rose no hacen más que incrementar esta sensación. Recordó la carta de Andrew ... no iba a ser bien recibida en el que fuera su hogar y no tenía ni idea de cómo iba a enfrentarse aquello. Solo sabía que, si existía la posibilidad, tenía que intentar verles de nuevo y ponerles sobre aviso de lo que estaba sucediendo con Zalphiros. Quizás podrían huir, ponerse a salvo.
Eso suponiendo que no hubiera pasado nada aún... ¿Quizás los ataques de Zalphiros y sus lugartenientes empezaran desde más al Norte? Al fin y al cabo, el suyo no era uno de los pueblos más grandes. Nadie obtendrían un gran beneficio de atacar un pueblo así ... ¿verdad?
Mientras va pensando en todo esto, Nessa juguetea con su pulsera de muérdago y sauce. Al fin, se da cuenta de que lleva un rato sin decir nada, así que levanta la mirada hacia el grupo y sonríe con cierto nerviosismo:
- Mmm, bueno, ¿estamos todos de acuerdo? ¿El plan queda cerrado entonces? ¿Cuánto crees que podríamos tardar en llegar a Libernen, Ornym? ¿Tienes la posibilidad de conjurar un mensajero para que vayan sobre aviso de los ataques que está habiendo? Esa idea lleva rondando bastantes días en mi cabeza, pero desgraciadamente, no puedo hacerlo estando aún tan lejos.
Espera las respuestas y finalmente añade:
- No quería ni sugerir la posibilidad de que vinieras con nosotros, dadas las circunstancias y tus responsabilidades, Ornym. Muchas gracias ... de verdad.
Mientras dice esto, Nessa piensa en que las circunstancias, las malditas circunstancias, siempre han conseguido mantenerles separados a ella y a Ornym, de una forma u otra. Como caminos en un mapa que se bifurcan y se alejan, solo para encontrarse en un pequeño punto y ... ¿volver a separarse de nuevo?
-Los...Increibles...nueve.- Recita Jen para si misma mientras garabatea en el pergamino prestado por Rolthos. Hace algunas anotaciones mas mientras la conversación continua, pero cuando Ornym se ofrece a hacerles de guia si que levanta la vista del papel, alzando las cejas en un claro gesto de sorpresa.
-Hombre, pues viendo como nos las apañamos con la cacería salvaje, agradecemos mucho la ayuda.- Afirma, estremeciendose al recordar la lamentable batalla. -Y si podemos matar dos pájaros de un tiro, mejor.- Asiente. La posibilidad de pasar por Liebernen también había quedado descartada para ella al cambiar el plan hacia el templo del mal elemental. -No me gustaba la idea de tener que dejar tu pueblo totalmente apartado.-
-En fin.- Guarda el pergamino y se sacude el regazo.- si nadie tiene nada mas que añadir, estoy molida. Es como si me hubiera pasado un caballo por encima, asi que con permiso, yo me retiro.-
Ornym asiente - Puedo pedir a un Mirlo que lleve el mensaje a tu padre o hermano. No puedo asegurar que le escuchen.. - dice sonriendo. -
- Si estamos decididos - dice Vraak - Acabémonos el vino y descansemos. Nos esperan unos días de mucho viaje si no me equivoco. - dice el semi-orco levantando su vino.
Rollback Post to RevisionRollBack
PbP Character: A few ;)
To post a comment, please login or register a new account.
El vino está realmente delicioso, pero la ranger bebe poco, consciente como es de que no aguanta mucho el alcohol y que no tiene el día siguiente para relajarse, precisamente.
Va escuchando las preguntas del paladín, y cuando ve que este insiste con el tema que claramente remueve un pasado doloroso en Ornym, le lanza una mirada significativa al tiempo que dice un simple:
- Rolthos...
Diving deep to the surface ♫ Auriel | Chase | Shenua | Arren | Lyra | Jadzia
Cuando Ornym ve el carcaj de Nessa se acerca, sorprendido.
- Este es un carcaj de los Caballeros Verdes. ¿Dónde lo has encontrado? -
Cuando Nessa le dice donde fue el elfo se lo devuelve con una sonrisa - Me alegro que lo hayas encontrado y no esté más en aquel lúgubre lugar. -
Tienes razón joven paladín- responde Ornym a Rolthos -
Me he quedado demasiado tiempo en el pasado. Ha llegado el momento de mirar hacia delante y seguir viviendo -
De nuevo sus ojos esmeralda se dirigen hacia Nessa y a Jen no se le escapa que Vraak se envara un poco.
- La situación es grave. La Cacería apareció en varios puntos de la frontera y atacó e incendio las poblaciones y el bosque de la frontera. Avanza hacia el centro del reino hacia Calen Othron pero hemos sido capaces de contenerlos. Uno de los mayores problemas de combatir contra la Cacería es que pueden volver al Feywild con relativa facilidad y seguir sus movimientos es complicado.
Pero el mayor de los problemas es que sus propia naturaleza les hace muy resistentes a las armas y Magia de este plano, como ya habréis comprobado. Solo armas divinas, aquellas creadas en el Feywild o extremadamente poderosas pueden dañarlos. Desconozco el paradero de Lady Xan’dryla o de Sir Cynair, solo espero que estén bien. En los primeros embates de todo conflicto suele reinar el caos y el ataque nos pillo por sorpresa y aunque atacaron en la frontera el ataque vino desde el interior del Reino. Aquí es donde creemos que la traidora Aldalanatüste ha jugado un papel importante. Por suerte no conocía las defensas más interiores, si no el ataque podría haber sido mucho peor. Sabemos que tanto Zalphiros como ella se dirigen hacia el norte a lo largo de la frontera. Irán a incrementar su ejército de no-muertos, que harán desde ahí no lo sabemos.
Respecto al Templo - hace una pequeña pausa - nosotros también creemos que los rumores de su reciente actividad no tienen que ver con Zalphiros y sus planes, aunque es evidente que puede utilizarlo en su favor. Cuando lo he mencionado es por que quizá, dependiendo de vuestras decisiones, tengáis que ir allí. -
PbP Character: A few ;)
- No sólo el carcaj, también la cuerda flameante salió de aquél lugar. Y he de decir que tenemos que darle las gracias a Cruços, que se empeñó en investigar una zona muy concreta de aquellas ruinas. Si hubiera dependido de mí, habríamos salido antes y no habríamos encontrado todo esto - la ranger dirige una sonrisa agradecida al cazador de sangre, que le devuelve una mirada de complicidad - No lo pasamos bien en aquél sitio, no...
La mirada de Nessa se pierde un poco en la oscuridad de la noche, recordando.
- Varios compañeros abandonaron la misión por uno u otro motivo, pero encontramos a Jen, y ... ¡ahora ya no sé ni peinarme sin ella! - dice, dandole un toque cariñoso a la barda en el brazo.
La ranger parece estar encontrando un huequito de paz .... que por desgracia se vuelve a romper cuando Rolthos hace una nueva mención al Templo del Mal Elemental. Sin quererlo, el paladín provoca una respuesta en Ornym que hace envararse a Vraak y, por ende, también a ella.
Internamente, la ranger le da vueltas a qué demonios está pasando. Porque algo está pasando. ¿No? ¿Tiene que hacer algo al respecto? ¿Nada? Busca la mirada de Jen en un intento notar si la barda se está dando cuenta...
Externamente, Nessa sigue la explicación del elfo acerca de la situación tras el ataque de Zalphiros y la Cacería Salvaje, y cuando nota que el vino élfico le está afectando bastante (a pesar de haber bebido tan poco) comenta:
- Esto... esto es unnnn pooooco ... fuerte, ¿no? - notando el rubor en las mejillas y un cierto dolor de cabeza, la chica mira a Jen - a la que ve perfectamente bien - y a Rolthos - que sí parece más afectado - Eeeerm, creo que yo me planto aquí. ¿No estáis cansados los demás? Yo mucho, la verdad. Creo que necesito dormir ya...
Diving deep to the surface ♫ Auriel | Chase | Shenua | Arren | Lyra | Jadzia
Ornym sonríe dando un sorbo del vino
- Los licores élficos no están hechos para todo el mundo, pero podéis disfrutar algo más de ellos hoy al menos. -
- Y que lo digas amigo - dice Vraak sirviéndose otra copa y pasándole la botella a Cruços el cual le da un buen tiento sonriendo.
- Aún tenéis que decidir qué vais a hacer - dice Ornym a la idea de Nessa de ir a dormir - ¿****inuareis a vuestro pueblo? ¿Hablábais en serio cuando decíais que querías ayudar a Celene? -
Como si sus palabras tuvieran algún efecto mágico, todos notaron cómo los efectos del vino se apaciguaban, aún tenían la cabeza ligera, y el calor en el estómago, pero más que la voz de Ornym, la gravedad de la situación hizo que el ambiente festivo se contuviera un poco, al menos hasta que tomaran una decisión.
PbP Character: A few ;)
Jen responde a Nessa levantando una ceja y encogiendose de hombros. El acróbata en su interior daba brincos de histeria, quería salir a ser testigo de aquel triángulo amoroso que se estaba cociendo allí. La tiefling se arrebuja en su capa con un gruñido, y da una palmada a Nessa en el brazo -Mañana hablamos en el camino.- Le promete.
-------
(Mientras Nessa y Ornym hablan)
Ve a Julian dejar el vaso tras el primer trago, atragantarse con la fuerza del licor y sujetarse la cabeza entre las manos, no acostumbrado a la intemperie, la comida y el vino. Debe de habersele revuelto todo un poco.
Con un suspiro deja su propio vaso, y se acerca a su lado, sentándose de piernas cruzadas frente al médico, demandando espacio. -Julian.- Llama, posando la mano en su hombro. Su expresion es severa. Nada de "Ilya" u otros apodos que hayan podido surgir a lo largo de su relacion. Julian responde con un quejido hecho murmullo.
-Ven.- Da un pequeño apreton en su hombro, su tacto firme y real. -Apóyate en mi.- Da un empujoncito a su hombro para que se recueste en una posicion más cómoda, y se dedica a pasar los dedos por el espeso cabello del doctor, presionando ligeramente el camino que hacen estos de sien a nuca, en un constante masaje.
Dicho esto vuelve a centrarse en la conversacion, a tiempo para pillar la ultima pregunta del elfo.
Julián da un suspiro y se relaja en el hombro de Jen
- Recuérdame que les diga a los de los viñedos que hagan este tipo de vino. Es fuerte pero esta buenísimo- dice dando un pequeño sorbo de su copa - Tenemos que hablar cuando toda esta conversación acabe - le susurra
PbP Character: A few ;)
Aunque sigue siendo cierto que está muy muy cansada, Nessa se espabila de golpe con las preguntas de Ornym. Suspira diciendo:
- Perdón... creía podríamos esperar a la mañana. Esas ocho horas de sueño tan humanas las sigo - seguimos - necesitando ... sobre todo después de un día como el de hoy.
Frotándose un poquito los ojos, la ranger intenta recuperar el hilo de pensamiento para responder:
- Ehh, veamos. Lo primero: creo que hablo por todos cuando digo que no lanzaríamos el mensaje de ayudar a Celene de otra forma que no sea completamente en serio. Es algo que todos hemos ido pronunciando en diferentes momentos los últimos días, desde que Abraldazin nos teleportó a las murallas de Greyhakw y vimos el fuego en la distancia por primera vez... Por supuesto que queremos ayudar. La cuestión es, ¿cómo? ¿La manera de hacerlo pasa por el Templo del Mal Elemental? ¿Hay otras opciones? Evaluémoslas, claro.
Para un momento, en el que mira de nuevo a la lejanía, intentando elegir bien las siguientes palabras:
- Lo lógico sería hacer esto ahora que ya estamos en Celene. Pero esto obviamente implicará retrasar el volver a Furyondy, con primera parada en Libernen. Y os soy sincera: por mucho que intente ser fría y pensar en que hay más gente afectada que mi familia y mi pueblo, no puedo dejar pensar en ellos. Ya sé que ... que es menos importante y además, uno de mis principales motivos para volver a casa ha perdido todo el sentido ...
A la ranger le cuesta continuar.
- ... ahora ya sé que puedo dar a Rose por perdida - mira a Ornym brevemente, en una mezcla de agradecimiento por haber intentando buscarla, y de completa tristeza al mismo tiempo - Pero me gustaría intentar todo lo que esté en nuestras manos para enviar al menos un aviso al pueblo para que se preparen ... si es que aún pueden hacerlo. Yo sólo puedo conjurar un mensajero cuando estemos a 24 horas de distancia del pueblo, y aún estamos a tres días. ¿Hay alguna opción mejor para avisarles? En cualquier caso .. si la opinión general es que el mejor plan de acción es quedarnos en Celene o ir al Templo en lugar de ir a Libernen ... bien, así sea.
Contraria a su primera opinión, Nessa toma otro trago de vino que le parece bastante menos dulce en esta ocasión pero le sienta igual de fuerte que el anterior. ¿Acaso podía ser de otra manera?
Diving deep to the surface ♫ Auriel | Chase | Shenua | Arren | Lyra | Jadzia
Escuchando a Ornym y ante la mirada reprobadora de Nessa, Rolthos endureció su expresión. La situación era bastante desesperada y por muy dolorosas que fuesen las experiencias del veterano elfo, no era el momento de que tan antiguas heridas entorpecieran posibles soluciónes. Por desgracia la información del elfo no pareció aclarar nada de forma definitiva y un resignado Rolthos asintió pesadamente. La incertidumbre de lo que había ocurrido en el frente y en particular a Xan’dryla o a Sir Cynair le hizo suspirar con impotente ansiedad. A pesar de las pullas de Xan’dryla, las múltiples peripecias a su lado le habían hecho apreciarla como compañera. Y la admiración por Cynair había crecido en los dos meses que había pasado entrenando con él.
- Mi idea, ¿nuestra idea?... era intentar capturar algún lugarteniente para ver si podíamos discernir la intención de Zalphiros, Lanthiel... Entiendo que quizás no sea tan fácil hacerlo como decirlo… sobre todo si no disponemos de más información. En Greyhawck prometieron contactar con nosotros, pero aún no hemos recibido nada, imagino que o no hay noticias que nos incumban o tienen más acuciantes necesidades. – Dijo mirando al cielo. - Si el templo es un peligro, ciertamente sería ventajoso atajarlo cuando el mal es aún incipiente, antes de que se convierta en algo mucho peor, en ese caso, información sobre los peligros del templo sería una definitiva ventaja.
Pronto Rolthos sintió el efecto del vino causándole un pequeño rubor y mareo. - Es un vino extraordinario… pero no esperaba que un vino élfico fuese tan fuerte… espero que al menos no nos deje una resaca mañana. - Dijo sirviéndose una copa y brindando con sus compañeros. - ¡Por todos nosotros, porque derrotemos a los peligros que tenemos por delante! - Dijo con el ánimo algo más ligero. Una sonrisa apareció al ver los cruces de miradas y afectos entre los compañeros.
Ante la pregunta del elfo y el cambio de aire a algo más serio Rolthos dejó la copa a un lado. - Me reitero… no sé dónde estarán mejor utilizados nuestros recursos. Pero si podemos ayudar a Celene sería excelente. Me siento responsable en parte por lo que está pasando y ocuparme de esas consecuencias es casi una obligación por mis votos de paladín.
Rolthos miró con preocupación y compasión a la compungida Ranger. - Siento lo que le ha pasado a Rose, Nessa... - Si lo consideras necesario podrías ir a avisarles tú en solitario. Si hay alguien que pueda sobrevivir en esta frente sola eres tú. No me siento capaz de forzarte a abandonar a tu familia. Pero escuchemos que posibles líneas de acción tenemos para ayudar a Celene.
Zevatur, Rolthos
La exploradora dirige una mirada agradecida al paladín, pero tarda un rato en responder. Está intentando por todos los medios no ceder a las lágrimas que se le están agolpando tras haber pronunciado en voz alta lo que llevaba tanto tiempo temiendo y que había sido confirmado tan solo un rato atrás. Le gustaba tan poco que la vieran llorar...
Suspira largamente e intenta ignorar los ojos preocupados de sus compañeros en ella. Cuando por fin logra serenarse un poco, comenta:
- Creo, Rolthos, que en este caso estás confiando en mis habilidades en exceso. Puede que haya sido buena alumna de mi maestro y que haya aprendido mucho en todo este tiempo con vosotros, pero a tanto nivel creo que no llego aún - dice, intentando sonreír a pesar de todo - No con la Cacería rondando, al menos.
Medita sus palabras antes de continuar:
- No, creo que es mejor que permanezcamos juntos. Juntos es como hemos llegado hasta aquí y juntos es como acabaremos este camino, sea donde sea que nos lleve. Y es cierto que me gustaría ver a mi familia de nuevo, pero ...
"¿Es cierto, Nessa? ¿Te gustaría? ¿O prefieres huir *de nuevo* para no tener que verles? Ah.. al fin y al cabo, Andrew tenía razón..."
- ... la prioridad es otra ahora - se dirige ahora a Ornym - ¿Crees que en el Templo del Mal Elemental podríamos encontrar armas o artefactos que nos permitan ser más efectivos contra la Cacería o contra Zalphiros? Tú conoces el Templo y conoces además nuestras habilidades ... ¿crees que podemos enfrentarnos a lo que albergue en su interior? Si la respuesta a ambas preguntas es afirmativa - mira al grupo ahora - vayamos. Creo saber más o menos donde se encuentra...:
Bienvenido a su servicio de
GoogleOerth Maps +YahooOerth Weather particular.Viaje: Greykawk → Libernen / Día de viaje: 4 / Hora: Noche / Fecha: ¿Finales de Patchwall/Brightleaf/Octubre)? / Clima: anormalmente frío para la fecha (gracias, Zalphiros & Cacería Salvaje ¯\_(ツ)_/¯).
...al sur de la frontera entre Furyondy y Veluna, cerca de las Colinas de Kron - dirige una mirada interrogativa al elfo, para asegurarse de que está en lo correcto - así que podría guiarnos hasta allí. Pero no sé a priori cuántos días tardaríamos en llegar ni cómo es el Templo por dentro como para saber cuánto tiempo estaremos allí dentro. ¿Qué nos puedes decir de todo esto, Ornym?
Diving deep to the surface ♫ Auriel | Chase | Shenua | Arren | Lyra | Jadzia
-Saben bien los dioses que yo no tengo madera para el campo de batalla. Pero si en el templo encontramos una forma de golpear a Zalphiros en la nuca, estoy con vosotros.-
Su mirada se torna a Nessa, decidida, focalizada. -Como siempre, Nessa, tus palabras son certeras como flechas. Me parte el alma verte dividida de esta forma.... Pero si tenemos la oportunidad de atajar a ese hijo de puta, me aferraré a ella con uñas y dientes.-
-Daremos un entierro a Rose, si lo deseas. Esta noche, o la que viene, o cuando te sientas preparada.-
- Tienes más madera de la que crees, Jen - Nessa sonríe a su amiga al decir esto - Sólo necesitas un poco más de confianza. Es normal ... llevas en esto menos que nosotros. Pero precisamente por eso somos un equipo, ¿no? Porque nos complementamos ante las situaciones que se nos presentan.
Cuando la barda menciona un posible entierro, Nessa se queda unos segundos mirándola, luego menea un poco la cabeza con gesto cansado y triste:
- Dioses, ni se me había ocurrido - desvía un momento la mirada, pensativa, y luego continúa - Sí ... sí, me gustaría hacer algo pero ... quizás más adelante. Déjame pensarlo - dice mientras dirige una mirada agradecida a su amiga por la sugerencia.
Diving deep to the surface ♫ Auriel | Chase | Shenua | Arren | Lyra | Jadzia
El elfo toma una copa de vino y su mirada esmeralda se pierde en un punto indeterminado de la helada floresta que les rodea. El verde de sus ojos parece refulgir pese a la escasez de luz.
- Ese maldito lugar... - comienza, su voz casi un susurro obliga a los demás a prestar atención de manera intuitiva.
- Haré la historia lo más corta posible, no sólo porque los recuerdos duelan demasiado aún, si no porque narrar todos los hechos nos llevaría más de una noche. - toma otro sorbo, al parecer ajeno al efecto que el vino tiene sobre las cabezas y espíritus de sus compañeros.
- Lo que comenzó siendo un lugar de culto para ciertos bandidos creció rápidamente hasta convertirse en un lugar donde se adoraban a los aspectos más caóticos y malvados de los primordiales elementales. Pese a las rencillas entre las diferentes facciones el Templo fue creciendo y en poder e influencia, atrayendo cada vez más y más seguidores, hasta llegar a convertirse en una fuerza que amenazaba a los reinos colindantes. Celene, Furyondya, Verbonoc y los gnomos de las Colinas Krom unieron fuerzas para acabar con los ejércitos del Templo y con el lugar mismo. Por muy impresionantes que fueran sus fuerzas no tenían nada que hacer contra la cruzada que se desató sobre ellos y las batallas fueron rápidas y decisivas. Pese a la furia elemental desatada contra nosotros, sus fuerzas compuestas en su mayoría por goblinoides se estrellaron contra nosotros y y se dispersaron como hierba suelta en el vendalval que era la Cruzada. No pasaron más de dos semanas cuando por fin sitiamos el Templo mismo. Poco sabíamos de lo que realmente moraba allí. Por mucho que lanzamos ataques y partidas de guerra no conseguíamos derrotar al mal que acechaba en las profundidades del Templo. Al contrario, parecía fortalecerse con cada muerte y cuerpo, sin importar el bando, que pasaba a pudrirse en aquella tierra maldita y ser alimento de gusanos y hongos. -
Se detiene unos momentos, parece que va a dar otro sorbo a su vino, pero la copa permanece colgando inerte de una de sus manos.
- Entonces aquello comenzó a contraatacar. Nuestros magos y clérigos morían entre terribles estertores, nuestros guerreros vomitaban y sufrían terribles dolores. No conseguíamos protegernos contra aquello que pugnaba por salir de los últimos niveles del Templo. En un movimiento desesperado lanzamos un ataque compuesto por nuestros mejores guerreros. Éramos un pequeño grupo de apenas nueve miembros. Diente de Jade, un monje venido del monasterio del dragón, la Honorable Bathia, paladin de tu misma Orden Rolthos, jamás conocí a nadie tan valiente, Arcandor el Archimago, el Patriaca de San Cuthbert Azemar Brom, el habilidoso gnomo Slykmeduck, Krelzoshak, el fuerte guerrero de escamas negras, Solrg, el goliath que casi daba con el techo al cruzar el techo y cuya fuerza era digna de gigantes, mi hermana y yo. - el atisbo de una sonrisa asoma a sus labios al recordar a sus viejos amigos, pero enseguida desaparece.
- Mi hermana Isarana nos guió hasta que, por fin, conseguimos penetrar en que creíamos el último nivel. Allí, en el interior de una pirámide negra, sentada en su trono de hongos y putrefacción se encontraba Zuggtumoy, la Reina de los Hongos. La Archiduque del Infierno había penetrado en nuestro plano, aún desconocemos cómo, pero era la responsable de todo. No podíamos derrotarla, ni siquiera con nuestras habilidades y poderes combinados. Azemar consultó con su dios y nos sugirió que atrapáramos a la criatura de nuevo, Si había escapado de su prisión en los Infiernos era necesario volver a atraparla antes de que su poder siguiera creciendo y consumiera el mundo. Bathia confirmó que Mayaheine sugería lo mismo y entonces Arcandor dijo conocer el ritual adecuado, pero que el mismo requería un sacrificio incomensurable. - Su voz se quebró un poco pero continuó hablando - Debíamos activar cuatro sellos, pero tan sólo la fuerza y poder de aquellos comprometidos con detener a la demonio y salvar a los pueblos libres podría retenerla. Los elegidos librarian una batalla eterna contra ella para evitar que sus poderes y fuerza llegaran a la superficie. Dos almas para cada sello. Todos permanecimos en silencio, la primera en hablar fue Bathia, preguntándo porqué no habíamos empezado aún. Arcandor realizaria el ritual que crearía una esfera de poder y contendría las almas de los demás, incluida la suya que sería la primera en ser parte del orbe. Alguien tendría que llevar el orbe hasta los lugares designados para crear el resto de sellos. Ninguno queríamos ser el portador. - esta última frase deja entrever algo de orgullo por el valor de sus viejos amigos. - Dejámos pues, que la Dama de la Fortuna decidiera por nosotros quien sería el portador. - Hace una pausa mientras traga saliva - Tuve la mala suerte de ser el elegido. No mancillé entonces el valor del sacrificio de mis amigos con quejas ni lamentaciones, aunque al mirar a mi hermana a los ojos mi voluntad se quebró y le supliqué que me dejara tomar su lugar. Ella sólo me sonrió y me besó en la frente. Arcandor comenzó el ritual. Zuggtumoy, como si supiera de nuestros planes lanzó su ataque. Mientras mis compañeros entregaban voluntariamente su alma uno a uno yo luché hasta que me sangraron los dedos al disparar mis flechas y mis brazos se entumecieron de usar las espadas. Al final la propia Archidemonia se unió a la batalla - una de las manos de Ornym va hacia su costado derecho de manera inconsciente - fui herido por sus garras, pero mi hermana pudo lanzar una última flecha a la criatura que me liberó. Sus últimas palabras, mientras el fuego azul y plateado del hechizo la envolvían fueron "Corre". Tomé el igneo orbe con mis manos y comencé mi parte. Creando sellos que mantendrían a aquel abominable ser encerrado por toda la eternidad. En mi rápida huida hasta la superficie no dejé de escuchar las voces de mis amigos dándome ánimos pero cada vez me costaba más respirar. Caí al terminar el último sello, ante las puertas del Templo, pensé que la vida me abandonaba pero fui hallado y mis heridas sanadas. Al menos las físicas. Tras aquello necesitaba tiempo para recuperarme, así que me fui a una tranquila aldea humana donde nadie me conocía ni apenas habían oído hablar de todo esto. - Ornym hace una pausa.
- ¿Creo que podéis luchar contra lo que hay bajo el Templo? No. Sería un suicidio intentarlo siquiera. Pero creo que podéis bajar hasta allí y recuperar las armas de algunos de mis compañeros. El hacha de Slorg podía partir la misma roca, el bastón de Arcandor poseía increíbles habiliades arcanas, la hoja de Bathia estaba consagrada a Mayaheine y el arco de mi hermana, Isilcúnë, fue creado por Solonor Thelandria y Sheanine en Arvandor, sería sin duda un arma que el mismísimo general de la Cacería temería. Todas aquellas armas legendarias quedaron allí abandonadas mientras yo cumplía con mi deber y me aseguraba que el sacrificio de mis amigos no fue en vano. Sé que se han hecho intentos de recuperarlas antes por alguna expedición buscando estas reliquias o conocimiento sobre el Templo pero no se han hallado aún. Deben estar en algún lugar de aquel maldito lugar y, sinceramente, creo que daría algo de paz a mi corazón saber que han sido recuperadas. - se vuelve hacia Nessa - Mi hermana estaría orgullosa de que fueras tú quien portara su arco, si lográis hallarlo. Si además conseguís información de porqué los efectos del Templo están sintiéndose de nuevo en las tierras de alrededor estoy seguro que el Rey de Furyondya y el Archiduque de Verbonoc os estarán agradecidos. No toméis esta decisión a la ligera. Pese a vuestra involucración en las primeras etapas de esta historia por Zalphiros, no sois responsables de ello. El único culpable es Zalphiros, no carguéis con cargas que no son vuestras. No hay garantías de que podáis recuperar las armas y quizá vuestras habilidades y esfuerzos sean mejor aprovechados en otros lugares, ya sea en Liebernnen o en la ayuda de la defensa de la propia Celene. Este es tan sólo un sendero más frente a vosotros. Vuestra es la decisión de transitarlo o no. Decidáis lo que decidáis contáis con mi apoyo. -
Ahora si, y sin desviar los ojos esmeraldas de Nessa, tomó un último sorbo de vino de su copa.
PbP Character: A few ;)
Nessa escucha esta nueva perla del pasado de Ornym con atención, pero también con preocupación. En cierto sentido es lo que cabría esperar, por conocer de antemano que el desenlace fue tan trágico que obligó a alguien como él a recluirse en su pueblo en busca de paz y soledad. Pero no era sólo eso...
Con cada palabra que desgranaba, la joven iba descubriendo nuevas facetas en el elfo que hasta ahora eran completamente desconocidas para ella: el Ornym vulnerable, el Ornym asustado, falible, desgarrado por la pérdida de sus compañeros de armas, sus amigos, su hermana. Nessa se preguntaba también cómo sería Isarana: ¿sería ella la pequeña, como Rose? ¿se parecería físicamente a su hermano? Qué extraño era todo esto. En escasas horas había descubierto más detalles sobre su pasado que en todo el tiempo que habían pasado juntos como mentor y alumna, y esto tenía a la joven ranger muy desubicada.
Cuando menciona a Zuggtumoy, Nessa suelta un jadeo de sorpresa y mira automáticamente a sus compañeros, intercambiando miradas que indican que ellos también se han acordado de Belkar, el druida loco con el que habían luchado en las ruinas de las Planicies de Ceniza. ¿No había caído precisamente bajo el influjo de la afamada Reina de los Hongos?
Continuó escuchando la historia y cuando por fin terminó, Nessa no pudo más que musitar:
- Es una gran carga la que has arrastrado todo este tiempo... entiendo que no quisieras hablar de ello. Y aunque siento que hayas tenido que volver a revivirlo, espero al menos que compartirlo te suponga un cierto alivio…
Por un momento Nessa se para a pensar, y cuando vuelve a hablar sonríe:
- ¿Sabes? Me acuerdo de la primera vez que te ví en el pueblo. Creo yo que tenía ¿ocho? ¿nueve años? Recuerdo que iba corriendo, huyendo de Andrew que jugaba a perseguirme. En un momento dado me giré para asegurarme de que no se cayera - él tenía unos cinco añitos nada más - y cuando volví a mirar hacia adelante ... ¡plof! ... me choqué con un elfo que nunca había visto antes, ¡y que me miraba desde TAN arriba con una mirada TAN seria! - su sonrisa se amplía cuando añade - Creo que te saqué la lengua y acto seguido huí disparada. De hecho, mi padre, que lo vio todo, me riñó más tarde en casa - la joven frunce el ceño e, imitando la voz de Daelin Proudmoore, dice - "'¡Nessaia, déjate de tantas niñerías y compórtate de una vez!'"
Menea la cabeza, suspirando, y añade:
- Y aquí estamos, casi veinte años después: un suspiro para tí, pero toda una edad para mí. Y hablando, ni más ni menos, del lugar que provocó que te fueras a Libernen originalmente. Qué extraño es todo...
Inspira largamente, considerando las palabras que va a decir después:
- Mi postura ya era la de ir al Templo antes de que contaras lo que te sucedió. Ya consideraba que era una buena opción, a pesar de ... mi familia, y de que el Templo pareciera un lugar tan peligroso. Y tienes razón cuando dices que no somos responsables de los actos de Zalphiros. Pero creo que sí tenemos la responsabilidad de hacer lo posible por detenerle si tenemos la capacidad para ello...
Mira al resto de sus compañeros, preguntando silenciosamente si están de acuerdo. Y luego vuelve a mirar a Ornym directamente, y casi en un susurro añade:
- Ornym, no estoy segura de ser merecedora del arco de Isarana. Pero si localizarlo es importante para tí … entonces también lo es para mí.
Diving deep to the surface ♫ Auriel | Chase | Shenua | Arren | Lyra | Jadzia
Roltos asintió a Nessa y sintió una enorme consternación por la imposibilidad de que cumpliese de forma apropiada con un duelo por la muerte de su hermana. Admiraba la fortaleza y la voluntad de seguir delante y su integridad al poner el deber por encima de las imperiosas necesidades emocionales, pero sabía que aquello no era correcto. “Maldito sea Zalphiros!” pensó con mas rabia que nunca. “Esto lo tienes que pagar caro…” Después asintió a las palabras de Jen, un funeral o una ceremonia quizás diese algo de paz a Nessa.
La atención de Rolthos pasó de Nessa en su repentino luto, a su mentor. La cadencia de sus palabras y el quedo tono con la que empezó a narrar la historia le hizo entender que la historia que iba a narrar estaba también cargada de afligidas emociones. Al terminar Rolthos suspiró larga y silenciosamente.
- Lamento tu enorme perdida y el honorable y trágico destino de tus seres queridos. No nos es ajena la estrategia de encerrar demonio a demonios. - Dijo mirando a Cruços, esperando que fuese él el que quizás narrase la historia que había acontecido con su propia familia y el demonio.
- Me preocupa el nombre que has mencionado - Dijo mientras cruzó su mirada con la de Nessa, Jen y Crucos, sorprendido por la coincidencia. – ¡Zuggtumoy! No es la primera vez que nos topamos con ese demonio. Tuvimos un encuentro con un adorador que intentaba traerla a este plano. Y su influencia no era residual, aunque desde luego no tan extrema como la que narras en el templo. - Dijo Rolthos mostrando preocupación. La idea de que ocho almas mortales se enfrentasen a eternas batallas contra una Archiduque del infierno durante toda la eternidad le parecía una locura. Aunque ganasen un millón de batallas, al perder una sola de ellas la reina de los hogos se podría liberar. No podían ganar la guerra, solo ganar tiempo. Con preocupación buscó las siguientes palabas con cuidado para no herir a Ornyn. - ¿Es posible que los sellos se estén debilitando? ¿Hay alguien cuidado los sellos en este plano? Dices que uno de ellos estaba en la entrada del templo.
Cuando Nessa se mostró tan decidida a acudir al templo Rolthos frunció el ceño. A pesar de la imperiosa situación del templo, la situación del ejercito de los muertos vivientes también parecía imperiosa. Pero desconocía como se estaba desarrollando la guerra, Ornyn no les había dado ninguna información concreta y no habían recibido noticias de Greyhawck. - Ir al templo para tener más medios para enfrentarse al ejército del Zalphios me parece una insensatez. Cuantos días podríamos tardar en llegar allí… ¿Unos cinco? ¿Y otros cinco en regresar y un par más en explorar el templo? Casi 15 días… Zalphiros en apenas dos meses ha levantado todo un ejército y organizado el ataque, no me quiero ni imaginar lo que puede hacer en un par de semanas con el ejercito ya en marcha. O a donde puede llegar. Me temo que llegaríamos tarde a todo, tarde, aunque bien preparados.
Negó con la cabeza antes de que le replicasen y prosiguió. - Pero las noticias del templo, y su reactivación quizás si tengan más urgencia… En la guerra contra Zalphiros somos una pequeña fuerza más. En el templo puede que seamos la única defensa que se interponga entre la Archiduquesa y este plano.
Zevatur, Rolthos
Asintiendo a las palabras de Rolthos acerca de Zuggtumoy, Nessa complemente la información del paladín:
- Pudimos acceder al diario del tal druida, Belkar, y la influencia de Zuggtumoy sobre él pareció empezar hace unos tres años. Y continuaba hablando de ella, y de sus tratos con un vampiro - Gulthias - y algunos de sus lugartenientes bastante más recientemente. A Gulthias y la mayoría de sus lugartenientes creo que podemos darlos por muertos. Sin embargo, Lyncariel Garra Roja sí que se nos escapó... Me pregunto si seguirá en las ruinas de Oakhurst...
Cuando Rolthos termina de hablar, añade:
- Entiendo el fondo de tu mensaje, Rolthos. No creas que no he pensado en todo el tiempo que tendríamos que invertir en el templo ... pero está claro que tenemos que tomar una decisión difícil, y cualquiera de las opciones tendrá consecuencias. Pienso que preparar una buena base para un ataque contra Zalphiros no es una insensatez, ni tiempo perdido. Es algo necesario. ¿De qué nos serviría querer ir rápido para llegar y perder... quizás perecer ... ya no contra Zalphiros, sino quizá contra los miembros de la Cacería Salvaje? Además, como tú mismo dices, no somos los únicos luchando contra Zalphiros. Muchísima gente está luchando contra él ... muchos de ellos más capaces y experimentados que nosotros ... debemos confiar en ellos también, ¿no?
Diving deep to the surface ♫ Auriel | Chase | Shenua | Arren | Lyra | Jadzia
Si fuera un perro, Jen estaría con las orejas en alto. Incluso a la severa máscara de la tiefling se le ponen los ojos como platos al escuchar la historia del elfo. Se palpa por todas partes maldiciendo mentalmente la falta de papel y pluma en su persona inmediatamente.
-Bueno, bueno! No me lo puedo creer.- Su expresion se hace mas viva con cada palabra, cada parte del relato, y su mirada se cruza con la de Rolthos en un gesto de reconociemiento. -Ese druida, pensaba que simplemente estaba como una cabra! Pero ya veo que no. Otra vez hongos no. Ugh!- se estremece y pone cara de asco. -Pero si es lo que hace falta para adelantarnos un paso hacia Zalphiros, iré de cabeza. Mierda, por qué no tendré papel y pluma conmigo?!-
A esto Rolthos responde mostrando papel, pluma y tinta de su equipo, items que la tiefling casi le arranca de las manos con un "gracias!" antes de ponerse a escribir freneticamente. Sin levantar la vista del papel, sigue hablando.-Esta historia tiene que ser contada, por los siglos de los siglos. Tus compañeros merecen ser honrados, Ornym. Y no caer en el olvido.-
-Ornym sonríe a Jen - Mi pueblo tiene una canción para ellos…. - se corrige - para nosotros. El título podría traducirse como los Increíbles Nueve - parece sonrojarse algo - pero no me siento muy increíble por ello. Seguro que tu historia les hace justicia-
De alguna manera todos sienten que Ornym está dejando fuera de su narración la mayor parte de sus hazañas. Ser capaz de soportar el ataque de Zuggtumoy y luchar contra ella y sus siervos y los elementos del Templo mientras concluía el ritual y sellaba al demonio para siempre no debió ser precisamente tarea fácil.
- No me sorprende- continúa - que la Archidemonia siga influenciando a algunos mortales. Es lo que hacen al fin y al cabo ya estén atrapados en su palmo o aquí… si alguien les busca… encontraran la forma de ofrecer a esas pobres almas lo que creen anhelar y ellos obtendrán más poder. Me alegra saber que acabasteis con ese druida loco y sus planes. No tuvo que ser sencillo. -
Mientras Nessa relata su primer encuentro Ornym la mira con una mirada algo extraña.
- Si bueno… - dice algo incómodo - espero que con el tiempo hayas visto que no soy tan… enorme…-
Ornym espera a que el grupo termine de decidir y arroja algo más de información y ayuda.
- Si estáis decidíos de ir al Templo puedo ofreceros mi ayuda como guía. Ni siquiera Nessa conoce todos los caminos y puede que ahorremos algunos días usando los senderos secretos de Mi Pueblo. Podemos llegar a Libernenn y desde ahí ir hacia el norte este hacia el Templo. Me quedare con vosotros tanto como me sea posible pues los ataques de la Cacería presionan nuestras defensas. - ofrece el veterano elfo.
- No os voy a engañar. Durante años he pensado que sería bueno intentar recuperar las armas de mis amigos, en especial las de mi hermana. Ahora es más una necesidad que la nostalgia de un veterano o un familiar dolido. Son embargo ahora mismo Celene no puede disponer de ninguno de sus defensores para emprender tal búsqueda. Vosotros, que no estáis incluidos en los planes de defensa de nadie, podéis ser la pieza que desequilibre la balanza en nuestro favor. -
PbP Character: A few ;)
La sorpresa se dibuja en el rostro de Nessa cuando escucha la sugerencia de Ornym de ir a Libernen.
- ¿De verdad? ¿Podemos ir al pueblo? ¡No lo creía posible sin alargar demasiado el trayecto al templo...! Si podemos usar esos caminos que mencionas y acortar el camino, desde luego... , por favor, vayamos.
Suena decidida, pero en su interior se arremolina un cúmulo de nervios. La idea de ver de nuevo a su hermano y sus padres ya le generaba bastante agobio de buenas a primeras y las malas nuevas sobre Rose no hacen más que incrementar esta sensación. Recordó la carta de Andrew ... no iba a ser bien recibida en el que fuera su hogar y no tenía ni idea de cómo iba a enfrentarse aquello. Solo sabía que, si existía la posibilidad, tenía que intentar verles de nuevo y ponerles sobre aviso de lo que estaba sucediendo con Zalphiros. Quizás podrían huir, ponerse a salvo.
Eso suponiendo que no hubiera pasado nada aún... ¿Quizás los ataques de Zalphiros y sus lugartenientes empezaran desde más al Norte? Al fin y al cabo, el suyo no era uno de los pueblos más grandes. Nadie obtendrían un gran beneficio de atacar un pueblo así ... ¿verdad?
Mientras va pensando en todo esto, Nessa juguetea con su pulsera de muérdago y sauce. Al fin, se da cuenta de que lleva un rato sin decir nada, así que levanta la mirada hacia el grupo y sonríe con cierto nerviosismo:
- Mmm, bueno, ¿estamos todos de acuerdo? ¿El plan queda cerrado entonces? ¿Cuánto crees que podríamos tardar en llegar a Libernen, Ornym? ¿Tienes la posibilidad de conjurar un mensajero para que vayan sobre aviso de los ataques que está habiendo? Esa idea lleva rondando bastantes días en mi cabeza, pero desgraciadamente, no puedo hacerlo estando aún tan lejos.
Espera las respuestas y finalmente añade:
- No quería ni sugerir la posibilidad de que vinieras con nosotros, dadas las circunstancias y tus responsabilidades, Ornym. Muchas gracias ... de verdad.
Mientras dice esto, Nessa piensa en que las circunstancias, las malditas circunstancias, siempre han conseguido mantenerles separados a ella y a Ornym, de una forma u otra. Como caminos en un mapa que se bifurcan y se alejan, solo para encontrarse en un pequeño punto y ... ¿volver a separarse de nuevo?
Diving deep to the surface ♫ Auriel | Chase | Shenua | Arren | Lyra | Jadzia
-Los...Increibles...nueve.- Recita Jen para si misma mientras garabatea en el pergamino prestado por Rolthos. Hace algunas anotaciones mas mientras la conversación continua, pero cuando Ornym se ofrece a hacerles de guia si que levanta la vista del papel, alzando las cejas en un claro gesto de sorpresa.
-Hombre, pues viendo como nos las apañamos con la cacería salvaje, agradecemos mucho la ayuda.- Afirma, estremeciendose al recordar la lamentable batalla.
-Y si podemos matar dos pájaros de un tiro, mejor.- Asiente. La posibilidad de pasar por Liebernen también había quedado descartada para ella al cambiar el plan hacia el templo del mal elemental. -No me gustaba la idea de tener que dejar tu pueblo totalmente apartado.-
-En fin.- Guarda el pergamino y se sacude el regazo.- si nadie tiene nada mas que añadir, estoy molida. Es como si me hubiera pasado un caballo por encima, asi que con permiso, yo me retiro.-
Ornym asiente - Puedo pedir a un Mirlo que lleve el mensaje a tu padre o hermano. No puedo asegurar que le escuchen.. - dice sonriendo. -
- Si estamos decididos - dice Vraak - Acabémonos el vino y descansemos. Nos esperan unos días de mucho viaje si no me equivoco. - dice el semi-orco levantando su vino.
PbP Character: A few ;)