" mmm " asiente elpandra asimilando toda la información ... " ¿ entonces nadie sabe que fue de ese troceador, si sigue vivo ?, ¿ se conocian ya la hija de tobyn y el hermano de meiko?, ¿adoptada dices, de dondé vino? ", se queda pensativo mirando el mapa de puntarena ... " ¿que hay por esta zona?, ", señalando un grupo de casas donde se supone que era la entrada natural de la mazmorra
ILSOARI: El asesino era el propio Stoot. El altar era a un señor demoníaco alado... No se que llevaría al chico a hacer esas cosas, pero a saber si ese demonio le tentó con darle alas, o algo similar.
KENDRA: Es posible que se conocieran, sí... Nualia, que es como se llamaba.. se llama la hija de Tobyn, era inconfundible y todos los chicos se fijaban en ella.
AMEIKO: Que yo sepa no se veían ni tenían amistad por entonces.
El propio Ilsoari cogió el mapa para ver donde señalaba el paladín.
ILSOARI: Solo son casas, de las más sencillas que puedes encontrar en el pueblo. Apenas tienen un dormitorio y una pequeña cocina, a veces ni separado. ¿Por qué es eso importante?
El Padre Zantus llega con uno de los guardias interrumpiendo por un momento la reunión, después de que tomase asiento la alcaldesa le explica la situación y le enseña la nota de Tsuto, formulandole finalmente las preguntas sobre la hija de Tobyn.
ZANTUS: Les contaré lo que se sobre Nualia... era una niña abandonada, como muchos otros huérfanos de la Academia, pero la dejaron en la puerta de la antigua capilla. El Padre Tobyn en un principio iba a llevarla a la Academia, pero al mirar a la niña se dio cuenta de que era una aasimar. Si bien era aún un bebé, ya tenía el pelo blanco y los ojos dorados... asi que la cuidó como si fuese su propia hija y trató de protegerla de todo. Muchos en el pueblo empezaron a creer que ella era una bendición y que tocarla daba suerte, o curaba todo tipo de enfermedades... cada día el Padre Tobyn debía tratar con gente que hacia todo tipo de peticiones incómodas e incluso humillantes.
ZANTUS: Su adolescencia fue complicada, empezó a estar muy desaparecida hasta que un día ya no tuvo manera de ocultar que estaba embarazada. Ni Tobyn ni yo llegamos a saber con quién mantuvo relaciones... de todos modos el Padre Tobyn la confinó en su habitación y la sermoneaba cada día. Él tenía planes de que mantuviera su pureza y pudiera ir a un convento prestigioso, por lo que no se tomó nada bien aquello. Y ella tampoco su castigo, cada día sufría ataques de rabia que cada vez iban a más, tuvimos que reparar varias veces algunos muebles de su cuarto... hasta que más o menos cuando debía estar de siete meses tuvo un ataque de histeria que le hizo apuñalarse el vientre. Fui el primero en acudir al escuchar sus gritos, y enseguida tuve que llamar a las comadronas para que se llevasen el cuerpo deforme del niño. Era un monstruo, no tengo duda de ello, nunca había visto algo así.
ZANTUS: Ella quedó en coma después de eso... y un mes después tuvo lugar el incendio. Sabiendo que se encontraba en coma supusimos que murió sin poder hacer nada por escapar. Nunca hallamos el cuerpo, dimos por hecho que no quedó más de ella que cenizas.
ILSOARI: Uhm... la ira está siendo recurrente en todo lo que estamos hablando... ¿y habéis dicho que no debemos acercarnos a esas mazmorras porque hace perder el control y te llena de rabia?...
"Tze, eso han dicho" dice el ladrón con media sonrisa de chulería recordando lo que han vivido ahí dentro.
"En esa zona se encuentra derrumbada la entrada original de la mazmorra de la rabia, o de la ira, como gusteis llamarla. Desconocemos si esas casas datan después del derrumbamiento o si sus habitantes conocían la existencia de la misma"
"Esta claro que la chiquilla esta viva y tiene unos planes muy ambiciosos, pero qué sabemos de los que la apoyan?" Y mientras lo pregunta, señala el papel "Bruthaznus, Bugbear... Y qué o quién es Malfeshnekor?"
“Pues va a resultar que no he salido tan mal...” dice Elhara por lo bajo más para ella misma que a nadie en particular.
“Entre las cosas que hay ahí abajo hay una especie de... pozo, donde una demonio menor estaba invocando engendros,sin duda para atacar el pueblo desde abajo llegado el momento. Por suerte no los engendros ni la demonio son un problema ya. Pero ese pozo sigue activo. Nos preguntábamos Padre Zantus, si usted podría consagrar la zona, o si sabe cómo destruir ese pozo , para evitar que nadie lo vuelva a utilizar, nunca.”
KENDRA: No hemos tenido ningún derrumbamiento o nada similar como un terremoto en Punta Arena... y como dijo el señor Ilsoari son casas sencillas, de una única planta y apenas espacio.
El sacerdote esperó a que la alcaldesa terminase para contestar a Elhara, con su pausado y tranquilo tono de voz pese a las circunstancias.
ZANTUS: Seguramente sí, al fin y al cabo que un santuario a una deidad caiga y se convierta en un lugar impío no es del todo extraño, y hay métodos para purificarlo y consagrarlo de nuevo. Pero necesitaré estudiar mejor ese pozo para saber exactamente cómo actuar, ¿qué más sabéis sobre ese pozo?
Ilsoari coge la nota y se pone sus gafas para leerla, al terminarla la deja sobre la mesa y responde a Kaith, conteniendo una sonrisa por la confusión del pícaro de bugbear con un nombre propio.
ILSOARI: Los bugbear son una subespecie de goblinoides, y por como está escrita la nota este tal Bruthazmus debe ser uno. Son los más grandes y brutos de los goblinoides, pero aun así son sorprendentemente ágiles y sigilosos, tened cuidado de que no os pillen por sorpresa. Me topé con alguno en mis tiempos de aventurero y son duros, suelen liderar tribus goblins con facilidad a base de su fuerza bruta e intimidandolos, en cierto parte más que liderar los tiene de esclavos... lo que me lleva a otro rasgo habitual de los bugbear, suelen ser muy perezosos.
AMEIKO: Arrancapepitas suena a un nombre que se pondría un goblin, diría que debe ser otro de los líderes de alguna de las tribus. Lo que no se que puede ser es Malfeshnekor, pero pone que cuando sea liberado y bajo el control de Nualia...
ILSOARI: Desconozco si hay alguna bestia encerrada en Cima del Cardo, desde siempre ha sido un lugar lleno de goblins.
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“Esta en el suelo, tiene forma triangular y está rodeado de runas. Una frí y extraña niebla naranja paece emanar del mismo. Si dejas caer sangre dentro se invoca un engendro. La quaist debía de llevar un tiempo usándolo pues tenía varios de esos engendros encerrados esperando el momento de atacar. Al invocar un engendro la cantidad de niebla que salía del pozo descendió un poco, casi como si se.. agotara un poco. Nos hemos planteado el ir lanzando pequeñas cantidades de sangre y acabar con los engendros que salieran, hasta agotar la energía del mismo. Pero no queríamos arriesgarnos a invocar algo que no pudiéramos controlar y que fuera peor el remedio que la enfermedad. Además no sabemos si la energía del pozo se regenera con el tiempo o quedaría realmente agotada en algún momento. Por eso quisimos subir a buscar ayuda y averiguar la mejor forma de acabar con esa amenaza.”
Elhara suelta toda la información deseando poder acabar con este asunto y dejarlo en manos más capaces.
A Ameiko le dice:
” A mi ese nombre me suena a demonio, pero puede ser cualquier cosa.”
ZANTUS: No había oído ni leído de algo así hasta ahora... pero si siempre que se ha derramado sangre ha salido uno de esos engendros es bastante posible que no sea un portal, sino que siempre genere uno de esos monstruos.
ILSOARI: Padre, es posible que pudieramos averiguar más de su funcionamiento con un conjuro de identificación.
El Padre Zantus parece asentir a Ilsoari, aunque tiene esa teoría prefiere saber más antes de hacer algo.
ZANTUS: De acuerdo, entonces podríamos investigarlo hasta que los héroes regresen, solo debemos tener cuidado de no activarlo... y dado que para ello parece requerirse sangre, no parece complicado. ¿O preferís que busquemos un modo de neutralizarlo para siempre antes de que partais?
ILSOARI: También evitemos exponernos a ese lugar demasiado tiempo, según dicen incita a la ira y a la violencia.
Elhara:
No habías leído la nota anteriormente, ni el grupo te había comentado gran cosa... pero ahora que se hablaban esos nombres, recuerdas haber oído sobre Malfeshnekor. Excepto que lo estés confundiendo con otro nombre parecido, jurarías que se trata de un demonio, o más concretamente un barghest, que formó parte de los ejércitos de Thassilon, aunque no recuerdas bajo el mando de quien.
Mientras Zantus e Isolari hablan Elhara parece pensativa.
”Respecto al pozo, confio en vuestra sabiduría sobre cómo proceder. Si preferís estudiarlo más antes de que partamos aseguraos de que nadie que no seais vosotros puede entrar, ni siquiera nosotros, para evitar que los enemigos puedan usarlo en contra del pueblo durante el ataque en caso de que fracasemos. Respecto a ese nombre, Malfeshnekor, si es la misma criatura de la que yo he oído hablar, nuestros problemas pueden ser más graves que unos goblin o bugbears. Este Malfeshnekor es un barghest, formó parte de los ejércitos de Thassilon y, por lo que se ve, escapó de su derrota.”
"Estoy con Elhara en que ese pozo hay que desactivarlo, y puedo añadir que la quasit cuando estuvimos allí dándola muerte, dudó en sacar más engendros temiendo que se gastara, incluso arriesgando su vida, no sacó mas engendros. Así que de alguna forma si ese pozo se agota, perderá su poder, porque si hubiera una forma de reactivarlo o de recargarse una vez vacío, no hubiera dudado ni un segundo en sacarnos los engendros necesarios para acabar con nosotros. Soy partidario de vaciarlo sacando cada engendro que aún pueda haber ahí hasta verlo gastado. Luego ya si, consagrarlo, quemarlo, pulirlo, destrozarlo o lo que se os ocurra, pero lo primero que habría que hacer es gastarlo. Es mi opinión"
El pícaro se da cuenta de que vuelven a intentar apartarle del pozo una vez más, como si fuera él quien estuviera consagrado a Lamatshu y quisiera ser su siervo fiel... Le indigna que piensen así de él, cuando lo único que quiere es sellarlo para siempre. Pero parece ser que el único que piensa que es la solución es él, como los demás no llegan a esa misma conclusión? no lo puede entender.
"Por lo demás, deben haber más altares, donde Stoot que ya os encargasteis de él, y en Cima del Cuervo, que sepamos, donde se esta llevando a cabo la transformación de Nualia, que ya se ha iniciado con los restos de su padre y necesita de la quema de toda Punta Arena para completarse y liberar al tal Malfeshnekor. Nuestro deber es impedirlo, ese poder no debe ser liberado"
" confiamos en vuestra sabiduria y buen hacer, seguro que encuentran la manera de desactivarlo, mientras tanto nosotros iremos a Cima del Cardo averiguar mas sobre la invocacion de Malfeshnekor y evitar el ataque trasgo. y traeremos al hermano de ameiko y a la hija del obispo para ser juzgados"
ILSOARI: Así se hará entonces. Por vuestra parte será mejor que os preparéis bien antes de salir, parece prometer que será duro...
KENDRA: Bien, daré una orden de que cualquier comercio os atienda esta noche a cualquier hora por si es necesario. Y si eso es todo podemos zanjar la reunión aquí. Se continuarán levantando las defensas necesarias y se impedirá el acceso a ese sótano a cualquiera que no sean el Padre Zantus y el señor Ilsoari.
Cada uno de los reunidos se va levantando de su sitio, al parecer sin tener que añadir nada más... excepto Ameiko, que al levantarse se acerca más a vosotros.
AMEIKO: Me gustaría acompañaros para intentar hacer entrar en razón a mi hermano cuando lo encontréis. Además... quizá os pueda ser de utilidad, pero como vosotros digais... pensároslo y decidmelo luego en la posada. Yo me marcho ya, voy a ir preparando una buena cena y víveres para nuestros héroes.
Eso último lo dice hacia todos, a modo de despedida y dedicandoos una sonrisa, tras lo cual es la primera en abandonar la sala.
((Ya podéis hacer compras y ventas, descanso largo, etc.))
El pícaro viendo como iban abandonando la sala cada uno de los que allí había, se acercó a Ilsoari y a Kendra "bueno... yo también me voy, si necesitais ayuda para lo del pozo, avisadme, creo firmemente que hay que vaciarlo primero antes de poder consagrarlo y me ofrezco voluntario antes de partir a Cima del Cardo, además allí quedaron un par de armas que mis compañeros no recogieron y me pertenecen, me gustaría poder recuperarlas. Gracias por vuestra disposición y ayuda."
Si le dicen algo o que les acompañe redactaré lo que ocurre.
Si no, simplemente va a la posada donde despertó a comer con el resto y a por sus cosas para trasladarse a la posada de su "amigo" donde el se siente más agusto sin tantos ojos que le observen. Esa noche tenía que hacer una visita a alguien.
Ocurra lo que ocurra, trasladarse se traslada.
Antes del anochecer, fue a hacer una visita al establo, buscó al dueño y esta vez no era para venderle nada, esta vez le buscaba para pedirle un trabajito... "Buenas tardes amigo, esta vez no te traigo un trofeo, esta vez, bueno, quiero que me embalsamen o disequen una pieza de caza propia, sabes quien podría hacerlo o si tu mismo podrías encargarte?" Con sumo cuidado sacó a la quasit de la mochila donde la llevaba empaquetada junto con su tiara y vestido y se la mostró al hombre.
Esa misma noche, ya en la posada de arriba, se preparó para hacer una visita a los callejones más oscuros de la ciudad, donde en teoría no llegaban las ordenes de toque de queda ni nada similar. Sin levantar sospechas y como una sombra, se acercó hasta donde le habían dicho que podrían ayudarle, se personó en la Despensa de la Cochinilla y pasó a la tienda sin destapar su rostro aun cubierto con la capucha de la capa. "¿Ha aparecido últimamente alguna cochinilla alegre?" y esperó respuesta.
ILSOARI: Lo que menos convendría ahora sería que sufrieras alguna herida de gravedad y no pudieras ayudar a tus compañeros. Mejor reserva todas tus fuerzas para Cima del Cardo... por lo que decís el pozo no debería suponernos una amenaza ahora mismo.
Rechazando así el que Kaith se ofreciera voluntario para terminar con el pozo él solo, Ilsoari también se marcha junto al Padre Zantus. Kendra solo se acerca hasta la puerta para despedir a los héroes.
KENDRA: Que tengáis buena suerte en Cima del Cardo, estaremos a la espera de vuestra llegada. Y... gracias, una vez más.
Más tarde, cuando Kaith visita a Daviren en el establo del Goblin Aplastado el hombre se queda mirando horrorizado a la criatura que le muestra.
DAVIREN: ¿Pero qué cojones...? Eso lo deberías quemar, y punto. ¿A dónde se te ocurre ir con eso por ahí? ¡Y no! ¡Si conociese a alguien que hiciese eso no tendría que conservarlos en salmuera!
Aunque con su cojera, el hombre empezó a arrastrar a Kaith para sacarlo de su establecimiento.
DAVIREN: ¡Vamos, vete! ¡Saca ese monstruo de aquí!
Por la noche, al ir a la Despensa de la Cochinilla y decir la clave que sabía gracias a sus contactos, recibe una corta respuesta.
COCHINILLA: He oído que ha aparecido una en el callejón de atrás...
No esta de humor para charlar con ninguno de sus compañeros y aunque Kaith había sido amable y Elpandra parecía haber dado el tema por zanjado tras sus disculpas frente al consejo del pueblo, Eldest no había dicho nada y apenas la había mirado. No la extrañaba. Había pasado lo mismo en el orfanato. Bueno alli fue peor. Elhara no dejaba de sorprenderse que, para ser un mundo donde la magia era algo habitual, como lña mayoría de la gente prefería tenerla a una distancia prudencial, sobretodo cuando se trataba de una magia tan imprevisible y destructiva como la suya.
Esos pensamientos la acompañaban en el camino a la posada y ni siquiera se dió cuenta de la ligera lluvia que caía del plomizo cielo.
Entró en la posada y pidió un plato de caldo caliente y algo de vino a Kameiko. Aún le dolían las heridas del arco de Kaith. Menos mal que había sido rápido y las flechas la noquearon a tiempo. Un poco más de tiempo para usar sus poderes y... no quería pensar en ello. Había vuelto a pasar. Esta vez no fue como cuando el Amo se hizo con su mente y su cuerpo. Contuvo una arcada al recordar lo que aquel ser la hizo, y lo que la obligo a hacer. Y cómo se regodeaba en su agonía permitiéndola ser consciente de lo que ocurría siendo prisionera de su propia mente. Bebió algo de vino para calmar el temblor de sus manos al rememorar aquellas horribles semaas.
Esta vez había sido distinto, pero habían llegado hasta ella por el mismo sitio. Sus sentimientos. Debía controlarlos, mantenerlos a raya, Dominarlos como dominaba el viento y el rayo, practicar como practicaba sus poderes. Solo con el control llegaba el conocimiento. Y gracias al conocimiento se obtenía el control.
Debía mantenerse ocupada, como había hecho desde que dejó la tutela del Maestro. Y parecía que aquel pueblo tenía suficientes problemas como para tenerla ocupada bastante tiempo.
Terminó su caldo y se retiró a su habitación.
A la mañana siguiente su humor no parece haber mejorado mucho pero estaba lista para partir.
Eldest abrumado ante tanta información se retira a sus aposentos dispuesto a vaciar ese pozo a toda costa con la tranquilidad de haber preparado una buena defensa.
"Seguro que Pandra acaba cediendo pero Elhara...*Suspiro* Que ser tan cabezón." Gruñe Eldest hacia si mientras sacaba sus enseres, hierbas y unos viales que había encargado requisar a un guardia de la fabrica cerrada antes de subir a su cuarto. (Me resto el precio que veas justo como compensacion al guardia)
Uso las 3 hierbas curativas que me quedan.
Preparacion de pocion : 13
A continuación, el druida lee el cada vez mas usado libro de venenos antes de entrar en su meditacion/sueño.
El druida se incorpora mientras escucha como las gotas de una lluvia pesada golpean el techo.
"Mmm, con estas lluvias crece un musgo con unas propiedades fantasticas" murmuro el druida hablando consigo mismo.
El Druida se disponia a bajar en busca de un buen desayuno cuando se encontro subiendo las escaleras a Elhara. Observo la cara que presentaba y esta no era muy buena, por lo que opto por no decir nada y no importunarla.
"La noto demasiado triste.. parece que haya estado escuchando los cantares del famoso bardo "Alexandre Uh'Vago. Hablare con ella cuando baje."
El druida encarga un plato de sopa para comer acompañado de un buen vaso de vino y se lo toma con calma.
Dicha la información de la cochinilla, Kaith sin descubrirse, tal cual había entrado y sin decir ni mu, salió hasta el callejón de atrás a encontrarse con ella. "Hola, necesito un kit de venenos, tú puedes conseguirme uno?" le ofrece además la tiara, y la ropa de la quasit, por si quiere hacer un trueque o rebajarle el precio a cambio de esos objetos. "y otra cosa, sabes quien puede estar interesado en experimentar con un demonio muerto? pasa desapercibido al ser pequeño pero fue de alto rango, toda una delicatesen" (offrol: aunque parezca que va a saco, es por abreviar un poco y no extenderme)
Cuando termina los negocios con el tipo del callejón, se vuelve para la posada a descansar, mentalmente repasa la lista de cosas que quiere llevarse y debe conseguir por la mañana.
Veneno (hecho por él si obtiene el kit)
1 cantimplora más
5 cordones
1 tela sencilla para empaquetar cosas sin tener que usar la capa u otra capa (lo que sea más barato)
15 flechas
El sueño la vence mientras repasa las cosas que le pueden hacer falta en la nueva misión.
Finalmente todos os vais a dormir... sin lograr pasar la mejor noche de vuestras vidas debido a toda la presión y responsabilidad que recae en vuestros hombros y a los horrores vividos en las Catacumbas de la Ira.
En vuestros sueños se replican escenas violentas, viendoos una y otra vez como protagonistas de sádicas masacres, incendios y devastaciones.
Eldest
Vendiste tu alma por conocimiento... y ese conocimiento te ha llevado al poder que posees actualmente. Pocos parecen apreciar la verdadera cara de la naturaleza, completamente caótica y cruel. Y ese es el poder que realmente deseas...
Y así te ves controlando la naturaleza a tu alrededor a tu antojo y para tus propios fines: recuperar tu alma. Pero la satisfacción de aprovecharte de las supersticiones locales hace que olvides ese objetivo, vagando por el mundo como un ser completamente apático pero que es sinónimo de terremotos y fisuras que se tragan edificios enteros, de erupciones volcánicas que petrifican ciudades y cambian completamente el entorno, de maremotos que desolan las costas y riadas que arrasan pueblos.
La personificación de la ira de la naturaleza y el fin de la civilización.
Elhara
Los negativos pensamientos con los que te fuiste a dormir hacen clara mella en tus sueños... ¿y si abrazases todo el poder que contienes? Sin ataduras ni restricciones... sin miedos...
Desde una montaña, una gran tormenta avanza rápidamente hacia Punta Arena de la que desciendes radiante, con la electricidad recorriendo tu cuerpo sin que te afecte lo más mínimo. Siendo una con la fuerza destructiva de la tormenta y los tornados. Tu mera presencia azota al pueblo, destruyendo hogares y vidas, lo que hace que los aldeanos supervivientes se sometan a tu voluntad, entre los arrodillados a tus pies ves incluso a El'Pandra y Eldest temblorosos ante tu poder.
Solo Kaith y su condenada tozudez se mantiene en pie encarándote. En un castigo ejemplar para todos, descargas todo tu poder sobre él, electrocutándolo hasta literalmente freirle, con el humo saliendo de cada uno de los orificios de su cabeza y cayendo desplomado al suelo entre convulsiones provocadas por las corrientes eléctricas que aun recorren sus nervios.
Y solo es el princpio... miras hacia el interior del continente... con la idea de desatar tu poder en Taldor.
El'Pandra
Te sientes convencido de tu misión, la que te has encomendado ante Iomedae. Librarás el mundo de todo pecado, de toda mala intención y acto dañino. Impedirás a toda costa que el mal domine Golarion...
Una luz sagrada te ilumina, la aprobación de tu diosa. Te quitas el yelmo para sentir su calor en el rostro, con la mirada de un fanático.
La misma luz cae sobre tu espada, que desclavas del cuerpo inerte de Ilsoari tras haber impedido que sus profanas investigaciones condenaran al mundo, evitando que liberase los demonios que aguardan al otro lado del Pozo. Después sales de la Catedral de la Ira y vuelves a la superficie, caminando entre unas calles llenas de cadáveres, todos ellos caídos bajo tu acero, todos ellos culpables de pecado.
Kaith
Te ves a ti mismo salpicado por la sangre de tus víctimas, con una larga sonrisa en la cara de satisfacción mientras degollas goblins, engendros pecaminosos, una serpiente, a Erylium, a Elhara.
Con cada una de estas víctimas tu visión se torna más rojiza, hasta que todo queda bañado en rojo carmesí pero siguen surgiendo rostros... dejando atras los de monstruos para ser personas que conoces... personas del pueblo, como el Padre Zantus al que deformas su rostro con tus espadas, o a El'Pandra, perforándole el corazón y retorciendo tus armas disfrutando de su agonía.
Más y más rostros llenan tu sueño, hasta que aparece el de él, tu padre. La persona a la que más odias... y cuando lo matas... solo queda el odio.
Un odio que nunca llegas a calmar, un odio que te acompaña el resto de tu vida, sembrando la muerte a tu paso... solo por placer, solo porque... sí.
Despertáis al día siguiente con la urgencia de tener que ir a Cima del Cardo a evitar una gran tragedia...
Eldest ha logrado hacer una poción de curación durante la noche. Kaith debe realizar una prueba de Inteligencia + Competencia para procesar el veneno, si al final aprovechó la noche para ello.
Al alba de la mañana siguiente Elhara está preparada en la sala común de la posada con sus pocas pertenencias. Unas profundas ojeras marcan sus ojos morados y lleva el pelo recogido en una coleta aunque parece que se la ha hecho más para evitar tener que arreglarse que por comodidad para el viaje.
No deja de mirar en dirección a la Cima del Cardo, y a las escaleras, esperando ver bajar al resto. Apenas ha tocado el desayuno y parece ansiosa por partir.
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" mmm " asiente elpandra asimilando toda la información ... " ¿ entonces nadie sabe que fue de ese troceador, si sigue vivo ?, ¿ se conocian ya la hija de tobyn y el hermano de meiko?, ¿adoptada dices, de dondé vino? ", se queda pensativo mirando el mapa de puntarena ... " ¿que hay por esta zona?, ", señalando un grupo de casas donde se supone que era la entrada natural de la mazmorra
ILSOARI: El asesino era el propio Stoot. El altar era a un señor demoníaco alado... No se que llevaría al chico a hacer esas cosas, pero a saber si ese demonio le tentó con darle alas, o algo similar.
KENDRA: Es posible que se conocieran, sí... Nualia, que es como se llamaba.. se llama la hija de Tobyn, era inconfundible y todos los chicos se fijaban en ella.
AMEIKO: Que yo sepa no se veían ni tenían amistad por entonces.
El propio Ilsoari cogió el mapa para ver donde señalaba el paladín.
ILSOARI: Solo son casas, de las más sencillas que puedes encontrar en el pueblo. Apenas tienen un dormitorio y una pequeña cocina, a veces ni separado. ¿Por qué es eso importante?
El Padre Zantus llega con uno de los guardias interrumpiendo por un momento la reunión, después de que tomase asiento la alcaldesa le explica la situación y le enseña la nota de Tsuto, formulandole finalmente las preguntas sobre la hija de Tobyn.
ZANTUS: Les contaré lo que se sobre Nualia... era una niña abandonada, como muchos otros huérfanos de la Academia, pero la dejaron en la puerta de la antigua capilla. El Padre Tobyn en un principio iba a llevarla a la Academia, pero al mirar a la niña se dio cuenta de que era una aasimar. Si bien era aún un bebé, ya tenía el pelo blanco y los ojos dorados... asi que la cuidó como si fuese su propia hija y trató de protegerla de todo. Muchos en el pueblo empezaron a creer que ella era una bendición y que tocarla daba suerte, o curaba todo tipo de enfermedades... cada día el Padre Tobyn debía tratar con gente que hacia todo tipo de peticiones incómodas e incluso humillantes.
ZANTUS: Su adolescencia fue complicada, empezó a estar muy desaparecida hasta que un día ya no tuvo manera de ocultar que estaba embarazada. Ni Tobyn ni yo llegamos a saber con quién mantuvo relaciones... de todos modos el Padre Tobyn la confinó en su habitación y la sermoneaba cada día. Él tenía planes de que mantuviera su pureza y pudiera ir a un convento prestigioso, por lo que no se tomó nada bien aquello. Y ella tampoco su castigo, cada día sufría ataques de rabia que cada vez iban a más, tuvimos que reparar varias veces algunos muebles de su cuarto... hasta que más o menos cuando debía estar de siete meses tuvo un ataque de histeria que le hizo apuñalarse el vientre. Fui el primero en acudir al escuchar sus gritos, y enseguida tuve que llamar a las comadronas para que se llevasen el cuerpo deforme del niño. Era un monstruo, no tengo duda de ello, nunca había visto algo así.
ZANTUS: Ella quedó en coma después de eso... y un mes después tuvo lugar el incendio. Sabiendo que se encontraba en coma supusimos que murió sin poder hacer nada por escapar. Nunca hallamos el cuerpo, dimos por hecho que no quedó más de ella que cenizas.
ILSOARI: Uhm... la ira está siendo recurrente en todo lo que estamos hablando... ¿y habéis dicho que no debemos acercarnos a esas mazmorras porque hace perder el control y te llena de rabia?...
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"Tze, eso han dicho" dice el ladrón con media sonrisa de chulería recordando lo que han vivido ahí dentro.
"En esa zona se encuentra derrumbada la entrada original de la mazmorra de la rabia, o de la ira, como gusteis llamarla. Desconocemos si esas casas datan después del derrumbamiento o si sus habitantes conocían la existencia de la misma"
"Esta claro que la chiquilla esta viva y tiene unos planes muy ambiciosos, pero qué sabemos de los que la apoyan?" Y mientras lo pregunta, señala el papel "Bruthaznus, Bugbear... Y qué o quién es Malfeshnekor?"
“Pues va a resultar que no he salido tan mal...” dice Elhara por lo bajo más para ella misma que a nadie en particular.
“Entre las cosas que hay ahí abajo hay una especie de... pozo, donde una demonio menor estaba invocando engendros,sin duda para atacar el pueblo desde abajo llegado el momento. Por suerte no los engendros ni la demonio son un problema ya. Pero ese pozo sigue activo. Nos preguntábamos Padre Zantus, si usted podría consagrar la zona, o si sabe cómo destruir ese pozo , para evitar que nadie lo vuelva a utilizar, nunca.”
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KENDRA: No hemos tenido ningún derrumbamiento o nada similar como un terremoto en Punta Arena... y como dijo el señor Ilsoari son casas sencillas, de una única planta y apenas espacio.
El sacerdote esperó a que la alcaldesa terminase para contestar a Elhara, con su pausado y tranquilo tono de voz pese a las circunstancias.
ZANTUS: Seguramente sí, al fin y al cabo que un santuario a una deidad caiga y se convierta en un lugar impío no es del todo extraño, y hay métodos para purificarlo y consagrarlo de nuevo. Pero necesitaré estudiar mejor ese pozo para saber exactamente cómo actuar, ¿qué más sabéis sobre ese pozo?
Ilsoari coge la nota y se pone sus gafas para leerla, al terminarla la deja sobre la mesa y responde a Kaith, conteniendo una sonrisa por la confusión del pícaro de bugbear con un nombre propio.
ILSOARI: Los bugbear son una subespecie de goblinoides, y por como está escrita la nota este tal Bruthazmus debe ser uno. Son los más grandes y brutos de los goblinoides, pero aun así son sorprendentemente ágiles y sigilosos, tened cuidado de que no os pillen por sorpresa. Me topé con alguno en mis tiempos de aventurero y son duros, suelen liderar tribus goblins con facilidad a base de su fuerza bruta e intimidandolos, en cierto parte más que liderar los tiene de esclavos... lo que me lleva a otro rasgo habitual de los bugbear, suelen ser muy perezosos.
AMEIKO: Arrancapepitas suena a un nombre que se pondría un goblin, diría que debe ser otro de los líderes de alguna de las tribus. Lo que no se que puede ser es Malfeshnekor, pero pone que cuando sea liberado y bajo el control de Nualia...
ILSOARI: Desconozco si hay alguna bestia encerrada en Cima del Cardo, desde siempre ha sido un lugar lleno de goblins.
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“Esta en el suelo, tiene forma triangular y está rodeado de runas. Una frí y extraña niebla naranja paece emanar del mismo. Si dejas caer sangre dentro se invoca un engendro. La quaist debía de llevar un tiempo usándolo pues tenía varios de esos engendros encerrados esperando el momento de atacar. Al invocar un engendro la cantidad de niebla que salía del pozo descendió un poco, casi como si se.. agotara un poco. Nos hemos planteado el ir lanzando pequeñas cantidades de sangre y acabar con los engendros que salieran, hasta agotar la energía del mismo. Pero no queríamos arriesgarnos a invocar algo que no pudiéramos controlar y que fuera peor el remedio que la enfermedad. Además no sabemos si la energía del pozo se regenera con el tiempo o quedaría realmente agotada en algún momento. Por eso quisimos subir a buscar ayuda y averiguar la mejor forma de acabar con esa amenaza.”
Elhara suelta toda la información deseando poder acabar con este asunto y dejarlo en manos más capaces.
A Ameiko le dice:
” A mi ese nombre me suena a demonio, pero puede ser cualquier cosa.”
Arcana? Por si me sonara el nombre?: 21
PbP Character: A few ;)
ZANTUS: No había oído ni leído de algo así hasta ahora... pero si siempre que se ha derramado sangre ha salido uno de esos engendros es bastante posible que no sea un portal, sino que siempre genere uno de esos monstruos.
ILSOARI: Padre, es posible que pudieramos averiguar más de su funcionamiento con un conjuro de identificación.
El Padre Zantus parece asentir a Ilsoari, aunque tiene esa teoría prefiere saber más antes de hacer algo.
ZANTUS: De acuerdo, entonces podríamos investigarlo hasta que los héroes regresen, solo debemos tener cuidado de no activarlo... y dado que para ello parece requerirse sangre, no parece complicado. ¿O preferís que busquemos un modo de neutralizarlo para siempre antes de que partais?
ILSOARI: También evitemos exponernos a ese lugar demasiado tiempo, según dicen incita a la ira y a la violencia.
Elhara:
No habías leído la nota anteriormente, ni el grupo te había comentado gran cosa... pero ahora que se hablaban esos nombres, recuerdas haber oído sobre Malfeshnekor. Excepto que lo estés confundiendo con otro nombre parecido, jurarías que se trata de un demonio, o más concretamente un barghest, que formó parte de los ejércitos de Thassilon, aunque no recuerdas bajo el mando de quien.
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Mientras Zantus e Isolari hablan Elhara parece pensativa.
”Respecto al pozo, confio en vuestra sabiduría sobre cómo proceder. Si preferís estudiarlo más antes de que partamos aseguraos de que nadie que no seais vosotros puede entrar, ni siquiera nosotros, para evitar que los enemigos puedan usarlo en contra del pueblo durante el ataque en caso de que fracasemos. Respecto a ese nombre, Malfeshnekor, si es la misma criatura de la que yo he oído hablar, nuestros problemas pueden ser más graves que unos goblin o bugbears. Este Malfeshnekor es un barghest, formó parte de los ejércitos de Thassilon y, por lo que se ve, escapó de su derrota.”
PbP Character: A few ;)
"Estoy con Elhara en que ese pozo hay que desactivarlo, y puedo añadir que la quasit cuando estuvimos allí dándola muerte, dudó en sacar más engendros temiendo que se gastara, incluso arriesgando su vida, no sacó mas engendros. Así que de alguna forma si ese pozo se agota, perderá su poder, porque si hubiera una forma de reactivarlo o de recargarse una vez vacío, no hubiera dudado ni un segundo en sacarnos los engendros necesarios para acabar con nosotros. Soy partidario de vaciarlo sacando cada engendro que aún pueda haber ahí hasta verlo gastado. Luego ya si, consagrarlo, quemarlo, pulirlo, destrozarlo o lo que se os ocurra, pero lo primero que habría que hacer es gastarlo. Es mi opinión"
El pícaro se da cuenta de que vuelven a intentar apartarle del pozo una vez más, como si fuera él quien estuviera consagrado a Lamatshu y quisiera ser su siervo fiel... Le indigna que piensen así de él, cuando lo único que quiere es sellarlo para siempre. Pero parece ser que el único que piensa que es la solución es él, como los demás no llegan a esa misma conclusión? no lo puede entender.
"Por lo demás, deben haber más altares, donde Stoot que ya os encargasteis de él, y en Cima del Cuervo, que sepamos, donde se esta llevando a cabo la transformación de Nualia, que ya se ha iniciado con los restos de su padre y necesita de la quema de toda Punta Arena para completarse y liberar al tal Malfeshnekor. Nuestro deber es impedirlo, ese poder no debe ser liberado"
" confiamos en vuestra sabiduria y buen hacer, seguro que encuentran la manera de desactivarlo, mientras tanto nosotros iremos a Cima del Cardo averiguar mas sobre la invocacion de Malfeshnekor y evitar el ataque trasgo. y traeremos al hermano de ameiko y a la hija del obispo para ser juzgados"
ILSOARI: Así se hará entonces. Por vuestra parte será mejor que os preparéis bien antes de salir, parece prometer que será duro...
KENDRA: Bien, daré una orden de que cualquier comercio os atienda esta noche a cualquier hora por si es necesario. Y si eso es todo podemos zanjar la reunión aquí. Se continuarán levantando las defensas necesarias y se impedirá el acceso a ese sótano a cualquiera que no sean el Padre Zantus y el señor Ilsoari.
Cada uno de los reunidos se va levantando de su sitio, al parecer sin tener que añadir nada más... excepto Ameiko, que al levantarse se acerca más a vosotros.
AMEIKO: Me gustaría acompañaros para intentar hacer entrar en razón a mi hermano cuando lo encontréis. Además... quizá os pueda ser de utilidad, pero como vosotros digais... pensároslo y decidmelo luego en la posada. Yo me marcho ya, voy a ir preparando una buena cena y víveres para nuestros héroes.
Eso último lo dice hacia todos, a modo de despedida y dedicandoos una sonrisa, tras lo cual es la primera en abandonar la sala.
((Ya podéis hacer compras y ventas, descanso largo, etc.))
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descanso largo, ya lo llevo todo .... " acordaos de las pociones "
El pícaro viendo como iban abandonando la sala cada uno de los que allí había, se acercó a Ilsoari y a Kendra "bueno... yo también me voy, si necesitais ayuda para lo del pozo, avisadme, creo firmemente que hay que vaciarlo primero antes de poder consagrarlo y me ofrezco voluntario antes de partir a Cima del Cardo, además allí quedaron un par de armas que mis compañeros no recogieron y me pertenecen, me gustaría poder recuperarlas. Gracias por vuestra disposición y ayuda."
Si le dicen algo o que les acompañe redactaré lo que ocurre.
Si no, simplemente va a la posada donde despertó a comer con el resto y a por sus cosas para trasladarse a la posada de su "amigo" donde el se siente más agusto sin tantos ojos que le observen. Esa noche tenía que hacer una visita a alguien.
Ocurra lo que ocurra, trasladarse se traslada.
Antes del anochecer, fue a hacer una visita al establo, buscó al dueño y esta vez no era para venderle nada, esta vez le buscaba para pedirle un trabajito... "Buenas tardes amigo, esta vez no te traigo un trofeo, esta vez, bueno, quiero que me embalsamen o disequen una pieza de caza propia, sabes quien podría hacerlo o si tu mismo podrías encargarte?" Con sumo cuidado sacó a la quasit de la mochila donde la llevaba empaquetada junto con su tiara y vestido y se la mostró al hombre.
Esa misma noche, ya en la posada de arriba, se preparó para hacer una visita a los callejones más oscuros de la ciudad, donde en teoría no llegaban las ordenes de toque de queda ni nada similar. Sin levantar sospechas y como una sombra, se acercó hasta donde le habían dicho que podrían ayudarle, se personó en la Despensa de la Cochinilla y pasó a la tienda sin destapar su rostro aun cubierto con la capucha de la capa. "¿Ha aparecido últimamente alguna cochinilla alegre?" y esperó respuesta.
ILSOARI: Lo que menos convendría ahora sería que sufrieras alguna herida de gravedad y no pudieras ayudar a tus compañeros. Mejor reserva todas tus fuerzas para Cima del Cardo... por lo que decís el pozo no debería suponernos una amenaza ahora mismo.
Rechazando así el que Kaith se ofreciera voluntario para terminar con el pozo él solo, Ilsoari también se marcha junto al Padre Zantus. Kendra solo se acerca hasta la puerta para despedir a los héroes.
KENDRA: Que tengáis buena suerte en Cima del Cardo, estaremos a la espera de vuestra llegada. Y... gracias, una vez más.
Más tarde, cuando Kaith visita a Daviren en el establo del Goblin Aplastado el hombre se queda mirando horrorizado a la criatura que le muestra.
DAVIREN: ¿Pero qué cojones...? Eso lo deberías quemar, y punto. ¿A dónde se te ocurre ir con eso por ahí? ¡Y no! ¡Si conociese a alguien que hiciese eso no tendría que conservarlos en salmuera!
Aunque con su cojera, el hombre empezó a arrastrar a Kaith para sacarlo de su establecimiento.
DAVIREN: ¡Vamos, vete! ¡Saca ese monstruo de aquí!
Por la noche, al ir a la Despensa de la Cochinilla y decir la clave que sabía gracias a sus contactos, recibe una corta respuesta.
COCHINILLA: He oído que ha aparecido una en el callejón de atrás...
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Elhara se retira a su habitación a dormir.
No esta de humor para charlar con ninguno de sus compañeros y aunque Kaith había sido amable y Elpandra parecía haber dado el tema por zanjado tras sus disculpas frente al consejo del pueblo, Eldest no había dicho nada y apenas la había mirado. No la extrañaba. Había pasado lo mismo en el orfanato. Bueno alli fue peor. Elhara no dejaba de sorprenderse que, para ser un mundo donde la magia era algo habitual, como lña mayoría de la gente prefería tenerla a una distancia prudencial, sobretodo cuando se trataba de una magia tan imprevisible y destructiva como la suya.
Esos pensamientos la acompañaban en el camino a la posada y ni siquiera se dió cuenta de la ligera lluvia que caía del plomizo cielo.
Entró en la posada y pidió un plato de caldo caliente y algo de vino a Kameiko. Aún le dolían las heridas del arco de Kaith. Menos mal que había sido rápido y las flechas la noquearon a tiempo. Un poco más de tiempo para usar sus poderes y... no quería pensar en ello. Había vuelto a pasar. Esta vez no fue como cuando el Amo se hizo con su mente y su cuerpo. Contuvo una arcada al recordar lo que aquel ser la hizo, y lo que la obligo a hacer. Y cómo se regodeaba en su agonía permitiéndola ser consciente de lo que ocurría siendo prisionera de su propia mente. Bebió algo de vino para calmar el temblor de sus manos al rememorar aquellas horribles semaas.
Esta vez había sido distinto, pero habían llegado hasta ella por el mismo sitio. Sus sentimientos. Debía controlarlos, mantenerlos a raya, Dominarlos como dominaba el viento y el rayo, practicar como practicaba sus poderes. Solo con el control llegaba el conocimiento. Y gracias al conocimiento se obtenía el control.
Debía mantenerse ocupada, como había hecho desde que dejó la tutela del Maestro. Y parecía que aquel pueblo tenía suficientes problemas como para tenerla ocupada bastante tiempo.
Terminó su caldo y se retiró a su habitación.
A la mañana siguiente su humor no parece haber mejorado mucho pero estaba lista para partir.
PbP Character: A few ;)
Eldest abrumado ante tanta información se retira a sus aposentos dispuesto a vaciar ese pozo a toda costa con la tranquilidad de haber preparado una buena defensa.
"Seguro que Pandra acaba cediendo pero Elhara...*Suspiro* Que ser tan cabezón." Gruñe Eldest hacia si mientras sacaba sus enseres, hierbas y unos viales que había encargado requisar a un guardia de la fabrica cerrada antes de subir a su cuarto. (Me resto el precio que veas justo como compensacion al guardia)
Uso las 3 hierbas curativas que me quedan.
Preparacion de pocion : 13
A continuación, el druida lee el cada vez mas usado libro de venenos antes de entrar en su meditacion/sueño.
------------------------------------------------------------------------Descanso largo--------------------------------------------------------------------------------------------------
El druida se incorpora mientras escucha como las gotas de una lluvia pesada golpean el techo.
"Mmm, con estas lluvias crece un musgo con unas propiedades fantasticas" murmuro el druida hablando consigo mismo.
El Druida se disponia a bajar en busca de un buen desayuno cuando se encontro subiendo las escaleras a Elhara. Observo la cara que presentaba y esta no era muy buena, por lo que opto por no decir nada y no importunarla.
"La noto demasiado triste.. parece que haya estado escuchando los cantares del famoso bardo "Alexandre Uh'Vago. Hablare con ella cuando baje."
El druida encarga un plato de sopa para comer acompañado de un buen vaso de vino y se lo toma con calma.
Dicha la información de la cochinilla, Kaith sin descubrirse, tal cual había entrado y sin decir ni mu, salió hasta el callejón de atrás a encontrarse con ella. "Hola, necesito un kit de venenos, tú puedes conseguirme uno?" le ofrece además la tiara, y la ropa de la quasit, por si quiere hacer un trueque o rebajarle el precio a cambio de esos objetos. "y otra cosa, sabes quien puede estar interesado en experimentar con un demonio muerto? pasa desapercibido al ser pequeño pero fue de alto rango, toda una delicatesen" (offrol: aunque parezca que va a saco, es por abreviar un poco y no extenderme)
Cuando termina los negocios con el tipo del callejón, se vuelve para la posada a descansar, mentalmente repasa la lista de cosas que quiere llevarse y debe conseguir por la mañana.
Veneno (hecho por él si obtiene el kit)
1 cantimplora más
5 cordones
1 tela sencilla para empaquetar cosas sin tener que usar la capa u otra capa (lo que sea más barato)
15 flechas
El sueño la vence mientras repasa las cosas que le pueden hacer falta en la nueva misión.
Finalmente todos os vais a dormir... sin lograr pasar la mejor noche de vuestras vidas debido a toda la presión y responsabilidad que recae en vuestros hombros y a los horrores vividos en las Catacumbas de la Ira.
En vuestros sueños se replican escenas violentas, viendoos una y otra vez como protagonistas de sádicas masacres, incendios y devastaciones.
Eldest
Vendiste tu alma por conocimiento... y ese conocimiento te ha llevado al poder que posees actualmente. Pocos parecen apreciar la verdadera cara de la naturaleza, completamente caótica y cruel. Y ese es el poder que realmente deseas...
Y así te ves controlando la naturaleza a tu alrededor a tu antojo y para tus propios fines: recuperar tu alma. Pero la satisfacción de aprovecharte de las supersticiones locales hace que olvides ese objetivo, vagando por el mundo como un ser completamente apático pero que es sinónimo de terremotos y fisuras que se tragan edificios enteros, de erupciones volcánicas que petrifican ciudades y cambian completamente el entorno, de maremotos que desolan las costas y riadas que arrasan pueblos.
La personificación de la ira de la naturaleza y el fin de la civilización.
Elhara
Desde una montaña, una gran tormenta avanza rápidamente hacia Punta Arena de la que desciendes radiante, con la electricidad recorriendo tu cuerpo sin que te afecte lo más mínimo. Siendo una con la fuerza destructiva de la tormenta y los tornados. Tu mera presencia azota al pueblo, destruyendo hogares y vidas, lo que hace que los aldeanos supervivientes se sometan a tu voluntad, entre los arrodillados a tus pies ves incluso a El'Pandra y Eldest temblorosos ante tu poder.
Solo Kaith y su condenada tozudez se mantiene en pie encarándote. En un castigo ejemplar para todos, descargas todo tu poder sobre él, electrocutándolo hasta literalmente freirle, con el humo saliendo de cada uno de los orificios de su cabeza y cayendo desplomado al suelo entre convulsiones provocadas por las corrientes eléctricas que aun recorren sus nervios.
Y solo es el princpio... miras hacia el interior del continente... con la idea de desatar tu poder en Taldor.
El'Pandra
Te sientes convencido de tu misión, la que te has encomendado ante Iomedae. Librarás el mundo de todo pecado, de toda mala intención y acto dañino. Impedirás a toda costa que el mal domine Golarion...
Una luz sagrada te ilumina, la aprobación de tu diosa. Te quitas el yelmo para sentir su calor en el rostro, con la mirada de un fanático.
La misma luz cae sobre tu espada, que desclavas del cuerpo inerte de Ilsoari tras haber impedido que sus profanas investigaciones condenaran al mundo, evitando que liberase los demonios que aguardan al otro lado del Pozo. Después sales de la Catedral de la Ira y vuelves a la superficie, caminando entre unas calles llenas de cadáveres, todos ellos caídos bajo tu acero, todos ellos culpables de pecado.
Kaith
Te ves a ti mismo salpicado por la sangre de tus víctimas, con una larga sonrisa en la cara de satisfacción mientras degollas goblins, engendros pecaminosos, una serpiente, a Erylium, a Elhara.
Con cada una de estas víctimas tu visión se torna más rojiza, hasta que todo queda bañado en rojo carmesí pero siguen surgiendo rostros... dejando atras los de monstruos para ser personas que conoces... personas del pueblo, como el Padre Zantus al que deformas su rostro con tus espadas, o a El'Pandra, perforándole el corazón y retorciendo tus armas disfrutando de su agonía.
Más y más rostros llenan tu sueño, hasta que aparece el de él, tu padre. La persona a la que más odias... y cuando lo matas... solo queda el odio.
Un odio que nunca llegas a calmar, un odio que te acompaña el resto de tu vida, sembrando la muerte a tu paso... solo por placer, solo porque... sí.
Despertáis al día siguiente con la urgencia de tener que ir a Cima del Cardo a evitar una gran tragedia...
Eldest ha logrado hacer una poción de curación durante la noche.
Kaith debe realizar una prueba de Inteligencia + Competencia para procesar el veneno, si al final aprovechó la noche para ello.
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Procesar veneno: 5
Al alba de la mañana siguiente Elhara está preparada en la sala común de la posada con sus pocas pertenencias. Unas profundas ojeras marcan sus ojos morados y lleva el pelo recogido en una coleta aunque parece que se la ha hecho más para evitar tener que arreglarse que por comodidad para el viaje.
No deja de mirar en dirección a la Cima del Cardo, y a las escaleras, esperando ver bajar al resto. Apenas ha tocado el desayuno y parece ansiosa por partir.
PbP Character: A few ;)