Los ojos de la criatura en la que se ha transformado Cruços irradian rabia. Su juicio está nublado y no distingue a los compañeros que tiene enfrente, solo se ve otra vez rodeado de demonios. Toda la ira contenida se ha liberado, sus instintos prevalecen ante cualquier cordura y parece que nada puede detener a la bestia.

Movement action: Cruços, en su forma de bestia se yergue delante de Rolthos. Ruge en su cara desde lo más hondo de sus pulmones y se prepara para lanzar un ataque fatídico.

...en Tenth desayunabas maldiciones?...

...

Action: ...

Bonus action: ...

Cuando levanta su garra al aire dispuesto a atacar, las palabras de Nessa parecen congelar la escena. La bestia retrocede un paso, dirige la mirada hacia el mapa celeste, hacia la luna llena y profiere un aullido que escucharán todas las criaturas en kilómetros a la redonda.

Sus corpulentos músculos empiezan a decrecer, el vello que cubre todo su cuerpo se retrotrae y las facciones lupinas encogen deformes hasta volver a la cara golpeada de Cruços. El aullido se transforma al unísono en un grito humano que parece le está desgarrando la garganta.

Cae de rodillas. Su torso se vuelca hacia el frente, apoyando las manos en el suelo. Un vómito de sangre ensucia el suelo.

Cruços se sienta agotado, con la respiración acelerada y la mirada perdida en las palmas de sus manos, otra vez humanas. Sonríe.

- Desayunábamos maldiciones...

Levanta la vista hacia sus compañeros, con un halo de agradecimiento cuando cruza la mirada con Nessa.

- Joder, menudo viaje, ¿eh?

Cruços apenas puede moverse, Nessa encuentra una pequeña tortura cada vez que quiere caminar, Lo Kag siente que le fallan los músculos y Aisha tiene tal dolor de cabeza que siente nauseas y a veces ve borroso. 

Rolthos se encarga de guiarlos de vuelta a la ciudad lo mejor que puede con ayuda de la elfa. Gracias a los dioses no encuentran más criaturas en su viaje de vuelta y cuando la madrugada comienza a teñir el cielo de púrpura de nuevo el maltrecho grupo cruza las puertas de la ciudad ante las atónitas miradas de los guardas. 

Llegan a la Posada del Dragón Verde y se desploman en sus camas. Lo que se preparaba como un simple paseo por el campo ha sido una odisea a vida o muerte que les ha pasado una gran factura a nivel físico y emocional. 

Cruços parece haber regresado de entre los muertos, pero le queda una cicatriz en su pecho, a la altura del corazón, y unas marcas en el cuello, cerca de la clavícula que le recordarán siempre aquella cripta. 

A la hora de la cena del día siguiente todos se reúnen en la sala común del Dragón Verde, algo más recuperados y hambrientos. La elfa les acompaña. Aún hay muchas incógnitas y ha llegado el momento de poner en común toda la inforamción que tienen. Y aún tienen la espada de piedra. 

Tirada para Hit Points: 1 + 5

En el punto en el que estamos, antes de planear nuestras próximas acciones, hay algo que debo hacer. Un tema que aún no hemos tratado y que no podemos postponer más. Así que, con todos en la mesa, me aclaro la garganta y digo:

- Todos visteis lo que hice con Eleanna. No pediré disculpas, puesto que hacerlo no la va a traer de vuelta. Pero acataré lo que decidáis para mí. Si queréis que abandone este grupo, así lo haré. Si esperáis hacérmelo pagar de alguna forma - miro a Rolthos al decir esto - sabéis donde estoy. No quiero decir con esto que me dejaré atacar o encerrar sin defenderme. Pero entenderé vuestras razones.

 Por un momento, una sombra cruza mi cara, mientras recuerdo la escena. El vampiro, el flechazo, la cara sin vida de Eleanna. 

Trago saliva.

- Sin embargo, si me permitís seguir con vosotros, sabed que siempre intentaré velar por la seguridad del grupo allá donde lleven nuestros pasos.

”Espero que nos lleven a dónde quiera que esté el padre de Eleanna”

Tras la intervención de Nessa, el silencio del grupo se ve roto por el suave raspar de una jarra de cerveza sobre la madera. Rolthos deja la cerveza medio vacía junto a otras dos y alza la cabeza para mirar, intensamente, a Nessa. 

- Si debes responder ante alguien sería ante la justicia... y que alguien imparcial judge tus acciones. Pero no seré yo quien inicie el procedimiento para meterte entre rejas. No querría eliminar de la batalla contra el omnipresente mal a una formidable cazadora como tu. Pero tener de compañera en dicha lucha a alguien como tu requerirá de algo más. No entiendo por que la mataste. ¿No viste que ella era una victima mas de la demencia de su padre? ¿Era venganza? ¿Justicia? ¿Lo hiciste para hacer daño a su padre? Eleanna ya estaba derrotada, indefensa, y su muerte fue una mera ejecución.

Inspiro suavemente, como para encontrar la tranquilidad necesaria para poder responder a Rolthos. Pongo mis manos sobre la mesa suavemente, y digo:

- Eleanna era una víctima, sí. Y a su vez ejecutora al sentenciarnos a todos nosotros a cambio de la vida de su hijo. Puedo entender su desesperación, pero antes que confiar en nosotros y pedir ayuda, decidió vendernos a una muerte casi segura.

Pauso un momento para elegir con cuidado mis siguientes palabras.

- El padre de Elanna exigió una vida a cambio de la de su hijo. Decidí entregar a quien para mí fue la verdadera causante de la muerte de Trevor, aunque fuese de forma indirecta. Y lo hice bajo la creencia de que así evitaría más daño al grupo. Concretamente a Cruços.

Miro al cazador de sangre y luego vuelvo la mirada a Rolthos:

- Por desgracia, erré al suponer que el vampiro se conformaría. Y este error es algo que llevaré conmigo siempre.  

En este punto, mis manos, aún sobre mesa, entrelazan sus dedos entre sí, pero siguen quietas, en actitud calmada. Miro fijamente esperando lo que pueda decir Rolthos o alguien más.

Al llegar a la habitación, Aisha cansada, y derrotada, sin encender ningún candil, tira su mochila sobre la cama y cuelga su capa en el triste perchero de madera vieja escondido tras la puerta. El tallaje de los pomos se le antojan retorcidos, como todo lo q acababa de vivir. 

Dirigiéndose a la cama decide volcar su mochila sobre esta para vaciar su contenido, al caer las velas que compró en el mercado justo antes de partir, recuerda vividamente su emoción ante la aventura por llegar. Sus ojos se empañan y una sensación de rabia la recorre el cuerpo "aaaaaaaaagggggggghhhhhhh" y con esa misma rabia revuelve las velas haciendo que caigan dos de ellas al suelo, rodando. Rodando por el piso de la habitación. Sin rumbo. Huyendo de ella. Caídas. 

Aisha agacha su cabeza y con los ojos cerrados y dejandose caer sobre sus rodillas, se apoya en la cama, hunde su cabeza en sus brazos y rompe a llorar.

El tiempo pasa sin darse cuenta. Así, derrotada, a los pies de su cama, cama que nunca deshace pues no la necesita, sale de su trance con un semblante serio, la determinación de su mirada fagocita la tristeza que la invadía. Sin perder un momento, recoge de por el suelo las velas caídas y se pone en pie para unirlas con las de la cama, se lleva todas a un rincón de la habitación y hace un circulo en el suelo con ellas. Vuelve a por su capa, se la echa por los hombros y enciende cada vela, una con otra hasta dejar la primera en su lugar en el suelo. Se cubre la cabeza con la capucha y lleva sus manos a buscar su colgante. "Raven Queen... Escucha a tu sierva..." 

A la mañana siguiente, con las velas derretidas, y habiéndose despejado el humo que emanaba de ellas al apagarse, Aisha abre sus ojos. Su energía estaba plena, su determinación, su mirada, todo en ella parecía haber madurado con la experiencia vivida. Era hora de reunirse con el grupo.

En el salón, junto a sus compañeros, escucha en silencio lo que cada uno expone, no está ausente a la conversación, pero todos en la mesa pueden notar su seriedad.

 Cuando se toca el tema de Eleanna, una minúscula parte de Aisha se incomoda en su interior. Con desprecio en la mirada y sin ningún punto fijo donde volcar su opinión, lo suelta:

"Estaba maldita, y lo usó para hacernos daño, merecía morir" 

"Y aún así nos ha dejado su legado -dice esto sin cambiar el foco de su mirada de ninguna parte- espero que no tengamos que llegar al punto de tener que sacrificarle a él también" en ese momento sí fija su mirada en Cruços y la mantiene. "No quisiera tener que vivir la experiencia" 

"Por mi parte, esta todo en paz Nessa, no te juzgo, pues no soy quien para hacerlo, si hubiera tenido tu determinación en ese momento, hubiera actuado igual posiblemente" 

Y dando por concluido ese tema, escucha los siguientes que se debaten en la mesa.

Cruços sube casi arrastrándose las escaleras hasta su cuarto. Podríamos decir que se acuesta, pero realmente desfallece en su cama. Sonríe mientras el sueño se apodera de él, con la satisfacción de aquél que sabe que llegar al final del día vivo siempre es una buena noticia. Justo antes de caer dormido fantasea brevemente sobre como hubiera sido pasar una noche con Eleanna... Realmente cambiar de forma puede ser algo absolutamente divertidzzzzz

Al día siguiente despierta con esa sensación agridulce de haber soñado cosas maravillosas de las que no recuerda nada... Nada excepto las enanas barbudas. ¿Por qué siempre soñaré con enanas barbudas? Ya en la estancia común, con sus compañeros, pide una olla del mejor estofado y varias frascas de vino, de las que empieza a dar cuenta sin esperar a que el resto de comensales se sirvan. Sí, estofado y vino para desayunar.

Siempre sonriendo: - Esto está buenísimo, no dejéis de probarlo, anoche no cenamos y siempre hay que hacer cinco comidas y diez bebidas al día jajajagromph

Cuando se recupera del trozo de carne que casi se le atraganta, se une a la conversación que se está manteniendo:

- Eleanna no era ninguna santa mujer, desde luego, pero sí es cierto que me hubiera gustado conocer como hubiera actuado si la vida de su hijo no estuviera pendiente de un hilo. Algo me hace sospechar que se podría haber escarbado por una aliada debajo de toda esa tierra traicionera. De todos modos, si me permitís apostar, intuyo que volveremos a cruzarnos con ella, aunque no tengo claro cuanta de su carne no-muerta se habrá podrido para entonces - Cruços desvía la mirada hacia el infinito como si estuviera barajando entre ideas que le disgustan y le atraen a la vez.

Sacude la cabeza como si apartase sus pensamientos de un manotazo y vuelve a centrarse mirando a Aisha:

- Como bien os señalé de camino a la hacienda, seamos cautos en el juicio, mi buena compañera. - sonríe exageradamente mostrando los colmillos - No todas las maldiciones que moran en esta tierra son males a erradicar. Al igual que el fuego de un incendio es el mismo que os calienta en las noches de invierno y cocina vuestra comida, hay situaciones que solo es necesario entenderlas, respetarlas y mantenerlas bajo control... De todos modos, solo por si acaso, cuando estemos en combate procura mantenerte más lejos de mí que cualquier enemigo al que esté atacando, no sea que "pieerda el coontroool" - el tono de voz de esta última frase y las comillas que dibuja en el aire con sus dedos, hacen que al terminar la frase no pueda evitar soltar otra carcajada.

- Bueno, inestimable benefactora de cabellos plateados... No puedo más que agradecer vuestra presencia, sin vos, es más que probable que ninguno de nosotros estuviéramos hoy aquí sanos y salvos. Tengo una deuda de vida con vos. ¿Puedo preguntaros vuestro nombre y qué os puso tras nuestros pasos? - Cruços apoya los brazos y medio torso sobre la mesa, acercándose hasta meros centímetros del rostro de la bella elfa y en voz muy baja - ¿Pero sobre todo, puedes contarnos quién o qué diablos es Zalphiros?

 Intervengo diciendo lo siguiente:

- Recordad que aún tengo la bolsa con 40 halcones de oro que nos dió Eleanna. ¿Qué haremos con esto...? Por ejemplo, no nos vendría mal equiparnos con algunas pociones, de cara a lo que pueda suceder en los próximos días.

Y también añado:

- Tenemos la espada de piedra que, junto con  el escudo que aún no poseemos, parecen ser la llave que nos dé más información acerca del pasado de los Gloomwood.

Tirada de puntos de golpe: 10

Después de ver como la bestia a la que se enfrentaba se transforma de vuelta en Cruços, Lo Kag no da crédito a sus ojos. Continúa con cierto recelo durante buena parte del viaje de vuelta a Greyhawk y aprovecha para acribillar a Cruços a preguntas: ¿Qué pasó en el mausoleo? ¿Quién es la elfa que nos acompaña ahora? ¿A quien os cargasteis en el ataúd?¿Cómo narices ha resucitado? ¿Desde cuándo y por qué es un hombre lobo? ¿Qué conlleva que lo sea? ¿Puede resucitar de muerto cada luna llena? ¿qué sabe sobre el vampiro padre? ¿Por qué estaban en el mausoleo? ¿A dónde se fueron? ¿ Por qué nos atacaron para después dejarnos ir?...

Suponiendo que Cruços contesta a la mayoría de las preguntas satisfactoriamente Lo Kag irá tranquilizándose y su humor volverá a su natural estado entusiasta y despreocupado.

Cuando lleguemos a la ciudad irá a buscar al señor Barbalarga y al menos un par de birras serán suyas, nos las hemos ganado. Posteriormente en la posada, se emborrachará y disfrutará del ambiente entre carcajadas atronadoras e historias embellecidas. Cuando su maltrecho cuerpo haya tenido suficiente se desmayará y dormirá pesadamente durante unas 20 horas.

 - ¿Realmente pensaste que cuando el no muerto patriarca pedía una vida, se referia a cualquiera y no a una de nustro grupo? ¿Que se conformaria con la muerte de su propia hija? - Matar a alguien para salvar a otra vida, es algo que no debería hacerse a la ligera, en cierta forma es lo que Eleanna hacía para salvar la vida de su hijo. Coacionada. Ese fue su crimen, repetidamente y posiblemente merecia la muerte, pero creo que te precipitaste en su muerte. - Ante los comentarios del resto - Estiy de acuerdo en que posiblemente volveremos a ver a Eleanna... y está vez no habrá esperanza en su redención, tan solo la muerte podrá liberarla de su destino. Veremos.

Cuando el tema de la conversacion cambia hacia la extraña, Rolthos mantiene su mirada unos segundo más en Nessa y después mira hacia la elfa, esperando oir sus explicaciones. - Tras las palabras Rolthos parece calmarse, y para de pedir cerveza, pensando en acudir a la capilla de Mayahenine a primera hora de la mañana.

La elfa permanece extrañamente callada durante la mayor parte del viaje de vuelta a la ciudad y está en la sala común esperando en una mesa a que los compañeros vayan reuniéndose de nuevo. 

- Xan'drila Fel'talya es mi nombre - dice cuando le preguntan - Y soy una cazadora de sangre, como nuestro amigo Cruços aquí presente. Llevo persiguiendo al patriarca de los Gloomwood, Shenconry Gloomwood desde hace unos meses, pero no ha sido hasta anoche que descubrí su verdadera identidad. Tan sólo perseguía a un poderoso vampiro y hechicero que ha causado problemas en la frontera de Celene. El vampiro con el que acabamos era Trevor Gloomwood, aunque su padre no le había liberado de su yugo aún y no había podido desarrollar todo su potencial. Por eso fue tan sencillo acabar con él. Por lo que habláis sospecho que la hermana os atrajo con algún pretexto hasta la cripta para que sirvierais de alimento al resto de su familia. Y por lo que vimos allí parece que era la única que no era una no-muerta, pero sí una licántropo. Aunque parecía actuar coaccionada para evitar la muerte del niño. No voy a entrar a juzgar si actuaste bien o mal - le dice a Nessa - eso lo dejo a tu conciencia, pero si puedes hallar algo de consuelo en que acabaste con la vida de una criatura peligrosa, quédate con eso. - 

Luego se vuelve a Cruços 

- Lo que nos lleva a ti. Sinceramente no entiendo cómo alguien ha podido meterte en la Orden, careces de la disciplina y la inteligencia mínimas necesarias para desarrollar un trabajo tan importante como el nuestro. Quizá si estuvieras más concentrado en el mismo y no tan preocupado por enanas barbudas y cerveza - Cruços se pregunta cómo demonios ha sabido lo de las enanas - habrías podido oler la trampa ha leguas de distancia y haber reconocido a Eleanna por lo que era, como debería ser tu trabajo. Si no llego a estar siguiendo el rastro de la familia y haber coincidido allí, ahora estaríais todos muertos, o sirviendo a los Gloomwood como zombies. No diré sin cerebro porque parece que algunos ya lo habéis perdido. - 

Se queda unos instantes mirando a Cruços de nuevo. 

- Sin embargo eres fuerte. Y afortunado. La licantropía, combinada con la maldición que corre por nuestras venas te ha devuelto a la vida. Hace muchos años que nadie de nuestra Orden muestra los atributos de la licantropía. Hace cientos de años, algunos de nosotros lo buscábamos abiertamente, y mediante olvidados ritos se utilizaba la maldición en nuestro favor. Muchos argumentaban que había que utilizar cualquier arma disponible a nuestro alcance en nuestra lucha contra el mal. Otros que era ir demasiado lejos. - se queda pensativa unos segundos - parece ser que no sólo la licantropía y la maldición son los rasgos que definían a esta Orden, pues todos eran unos orgullosos pretenciosos que pensaban que podían salir con vida de cualquier situación. Al final esta fue su perdición. Toda la Orden se reunió para luchar contra un demonio, Kerthinox, y le atacaron prácticamente sin ningún plan más que el acabar con él con sus armas, garras y magia. - hace una pausa mirando al crepitante fuego de la chimenea. - Lo consiguieron. Muchos miembros de nuestra Orden murieron aquel día en la batalla contra Kerthinox y sus seguidores, pero el ataque de los Lycan consiguió debilitarle lo suficiente como para que pudiéramos acabar con él y mandarlo de vuelta al abismo del que había salido. - 

Toma un sorbo de vino, para pasar los amargos recuerdos y vuelve a centrar la vista en Cruços 

- No ha habido un miembro de la Orden de Lycan desde entonces. Debes ir con cuidado. La licantropía puede ser una ventaja en combate, pero a la vez puede causarte más problemas de los que puede solventar. Debes aprender a controlarlo y esto requiere mucha más autodisciplina de la que has demostrado hasta ahora. - 

Con esto parece haber terminado de hablar y os deja hablar a vosotros para tomar las decisiones que queráis tomar. 

El gesto de Rolthos se tuerce al escuchar las condescendientes y arrogantes palabras de la elfa.

- Sandrila, puede que alguno de nosotros no tengamos cerebro y que Cruços carezca de la autodisciplina para controlar sus recien descubiertos poderes... - Rolthos hace una preocupada pausa al decir esto, aunque lo intenta disimular con un corto carraspeo. - Pero demostro mas coraje que nadie al sacrificarse para salvar nuestras vidas, incluida la tuya. Lo que no llego a entender es como o porque el patriarca nos perdono la vida en vez de acabar con todos alli mismo. Existe la posibilidad de que Eleanna se pueda levantar de nuevo?

 - Tras una corta pausa y antes de que nadie pueda decir nada Rolthos lanza una pregunta al aire... - Y el padre? Quizas el padre o su familia esten interesados en recuperar a su hijo, quizas la historia que Eleanna contaba tenia parte de verdad. Es un asunto a investigar.

Las palabras de Xan'drila Fel'talya me intranquilizan. El propio Trevor se encontraba fuera de nuestras posibilidades sin la ayuda de la blood hunter, el patriarca Shenconry parece una empresa inabordable.

Por otro lado está el asunto de Poot, el tesoro custodiado por el dragón verde. Eleanna conoce la historia y aunque aún tengo dudas sobre sus verdaderas fidelidades, tenemos que asumir que en cuanto usen sus oscuras artes sobre su cadaver, toda la familia Gloomwood conocerá la existencia y querrá recuperar la mitad de la llave que tenemos en forma de espada de piedra... Sin olvidarnos de la figura encapuchada que intentó acabar con el pobre anciano o el desaparecido Pelthros, que  seguro nos cruzaremos mientras conservemos esta posibilidad.

- Desde luego no conocía ni la existencia ni la agria suerte que corrieron los miembros de la Orden de Lycan. Sin embargo no entiendo de donde os sacáis que sea una persona carente de autodisciplina... [apura su plato de estofado y el vacía una de las frascas de vino en el vaso que tiene delante, agitándola para que caiga la última gota]. Crear el caos que te satisface cuando la norma encorseta es lo que todos los "tengounpalometidoporelculo" deberíais probar alguna vez... [Levanta la cabeza del vaso y mira tranquilamente al grupo] Podéis estar tranquilos, de momento, el hervor de la sangre está bajo control.

Hay algo que me dice, que entre los compañeros de mi tío, que fueron quienes dijeron aquellas palabras de "La sangre es fuerte en tu familia", habría quién podría decir algo ante esa afirmación de que toda la orden de Lycan fue masacrada...

- Pero aún queda un detalle por esclarecer, para entender por qué semejante criatura no nos barrió de la existencia como velas en un tornado. Cuéntanos Xan'drila, ¿quién o qué diablos es Zalphiros?

La elfa asiente a las palabras de Rolthos mientras Cruços termina su comida.

- Sin duda tienen el poder de traerla desde los muertos, pero dudo que lo hagan. Por lo que pude averiguar Eleanna se negó a recibir el “don de la inmortalidad “ como el resto de su familia y huyó a Furyondy. Sin embargo su padre no podía permitir ese desafío a su autoridad y la capturó de nuevo. Desconozco los detalles pero sé que luego volvió a aparecer ya cambiada en la criatura que nos atacó en la cripta. Y seguía las órdenes de su padre. Hasta anoche no entendí el cambio de actitud en ella. Creo que de alguna manera detectó tus habilidades - le dice a Cruços - o simplemente olió la maldición de nuestra orden en tu sangre y quería saber si podía utilizarla en su beneficio, seguramente para romper el control que tuviera su padre sobre ella y poder liberarse de nuevo. - Toma otro sorbo de vino - No digo que no merecería morir, pero desde luego era la única diferente de la famila... - dice casi absorta en sus pensamientos. Tras unos segundos ensimismada en sus pensamientos parece volver a la realidad y contesta a Cruços, ignorado el comentario de los palos y los culos como si no hubiera existido. 

- Por lo que sé Zalphiros es un aliado de Shenconry desde hace bastantes años. Pero no he podido averiguar mucho sobre su naturaleza o propósitos. - 

Un largo suspiro hace de preambulo a las palabras de Rolthos. - Eleanna, en su maraña de mentiras contó que venia de Furyondy, lo que me reafrima en mi idea de que posiblemente algo de más de verdad había en ellas. No estaría de más considerar ir allí a investigar con más detalle ese asunto, quizás el padre dejó alguna pista que pudiesemos seguir desde ese lugar. - Dice Roltos en lo que parce más una reflexión en voz alta que otra cosa.

[Tiro historia a ver si me suenan estos nombres de los que habla Xan'drila History : 7 ]

- Tiene sentido lo que dices, Rolthos. Poot nos dibujó un mapa de la localización de la torre que supuestamente contiene un tesoro de interés para los Gloomwood. El mapa .... supongo que se perdió con Elanna, pero creo que más o menos  memoricé la ubicación.

Me quedo pensativa un instante:

- Deberíamos ir a las colinas al noreste de la ciudad. Eso nos lleva directamente a Furyondy.

Miro al resto de los comensales, y digo:

- ¿Los demás estáis de acuerdo? ¿Vamos en busca de la torre y, con ello, de más información acerca del pasado de los Gloomwod? En ese caso deberemos pertrecharnos adecuadamente para hacer frente a los enemigos que, con total seguridad, nos volveremos a encontrar. Deberíamos comprar armas, flechas, pociones, etcétera usando esto - les enseño el saquito con monedas de Eleanna, y lo vuelvo a guardar -Propongo emplear el resto del día día de hoy y el de mañana para terminar de recuperarnos y poner todo esto en orden. Tras eso, podremos partir. ¿Qué os parece?

[Supongo que estarán de acuerdo. Si no pasa nada raro, lo que voy a hacer es terminar mi comida, despedirme y levantarme de la mesa. Iré a hablar con el tabernero :]

- Me gustaría disponer de un buen baño esta noche. ¿Me lo podéis proporcionar?

 [Luego volveré a la mesa y diré: ]

- ¿Vamos "de compras", pues?

 - Por supuesto. Un buen baño caliente estará disponible. ¿Lo quiere en su habitación? - le responde uno de los camareros que trabajan en la posada a Nessa. 

- Sí, por favor.

[Ok, entonces primero habría que ir al sur a examinar la estatua. Luego a las colinas del norte. Opino que lo de Furyondy de momento podríamos olvidarlo, tenemos suficientes pistas para avanzar]

 Aisha escucha a sus compañeros hablar con la nueva integrante del grupo, les presta atención aunque no está muy conversadora desde lo vivido en la Hacienda de los Gloomwood.

Le sabe a derrota lo acontecido con esa familia pero es consciente de que aún están en un nivel muy alejado para poder plantarles cara, la idea de seguir por el lado de la espada de piedra y la aventura del Sr. Poot, se le antoja más cercano y factible, quizás por el camino encuentre la fe suficiente para alimentar su alma y crecerse como persona.

"Estoy con Nessa, vayamos a investigar esos terrenos, ya tendremos tiempo de plantar cara a esa familia más adelante"

[Con respecto a la conversacion con Xan'drila Fel'talya]

- San'drila - Dice Rolthos esforzandose un poco mas por pronunciar complicado nombre elfico. - Quienes son esos tales Zalphiros y Shenconry? Aun sin conocer su identidad sus nombres me produce cierto ensombrecimiento en el alma.

[Con respecto a los planes de ir a por el supuesto tesoro]

- No me agrada mucho la idea de desviarme de la investigacion de la familia Gloomwood, pero hay muchos interrogantes que resolver, y quizas alli podamos atar alguno cabos sueltos. Estoy de acuerdo de que nuestros siguientes pasos nos lleven hacia ese lugar.

[Y con respecto a la visita a la guardia de la ciudad]

- Yo di mi palabra de ir hasta alli y asi lo hare. Vosotros sois libres de acudir o no, pero no suele ser recomendable tener una order de captura de la guardia sobre la cabeza de uno, cierra muchas puertas y hace la vida mas complicada de lo que deberia. - Considera un momento sus palabras. - Con respecto al ataque a Poot, seguimos sin esclarecer sobre lo que ocurrio, pero si le han tomado declaracion sus palabras deberian habernos liberado de culta. Con respecto a los Gloomwood, poco hay que decir excepto que su nombre ha caido en la mas horrenda ignominia. Y odesaria que la ciudad despache una fuerza a la mansion y la limpie de lo que haya podido quedar en ese foco de corrupcion y peligros.

[Con respecto a mis planes futuros]

- Yo debo acudir a la capilla de Mayaheine, estais invitados a la pequeña ceremonia que llevare a cabo alli.