- Conocéis a ese tal Primewater, es amigo o enemigo? O alguien caído en desgracia y pobreza? Estos documentos tan solo tiene valor en sus manos ya que son nominativos.... Devolverlos sería favor por favor? O dar recursos a nuestros enemigos - Dijo mientras se regodeaba interiomente tras su demostración de habilidades.
Los objetos le resultaron extraños y algo alienígenas. Mientras los revelaba echo un vistazo a Ostor, asegurándose de que su preciado tesoro no se encontraba entre estos últimos hayazgos.
Godric tomó el objeto con la letanía de Lathander con cuidado, casi con reverencia. Aquel rezo al Dios de la Mañana era antiguo, muy antiguo. Con cuidado observó con cuidado el objeto, moviendo los labios al repasar la oración en un lenguaje que sonaba antiguo, el que se usaba hacía mucho tiempo en el reino.
( Tira de Religion en game log por si reconoce algo: 23. Si era necesaria historia tiene el mismo bono. )
- Deberíamos identificarlos y repartirlos- respondió Mablung y respecto a los documentos, haced lo que consideréis oportuno, no me interesan los devaneos de la nobleza- añadió mientras se encogía de hombros en un deje de indiferencia.
- Pero si queremos ir a Ghostfinguer y volver en el día deberíamos de darnos prisa, ¿ tenemos los materiales para poder identificar los objetos?- pregunto al resto, las cuestiones monetarias nunca habían preocupado al druida.
TocToc se detuvo para reflexionar un momento, después, con un chasquido a modo de eureka buscó en su legajo de anotaciones. - Claro... Según Leobald... Gellan Primewater, el Príncipe del Comercio de especias, era el dueño de “El Emperador de las Olas”, el pecio corrupto que visitamos. Según mis anotaciones Leobald dijo que a raíz del naufragio se había arruinado, pero que había logrado reconstruir su imperio, posiblemente con metodos poco eticos. Actualmente dirige el gremio de mercaderes locales y tiene un puesto entre el cónclave que dirige la ciudad, en el bando de los Tradicionalistas.
Mirando a los presentes y haciendo un gesto de agradecimiento al Paladín por tan útil información les preguntó.
- Quizás podríamos hacer valer estos documentos para granjearnos su favor... o quizás es darles demasiados recursos a los tradicionalistas. – Revisándolos un poco más finalizó. - Me pregunto también a quien perjudicarían todos estos títulos de propiedad, lo mismo algunas de estas propiedades han cambiado de manos y al revelar estos documentos ciertas personas, quizás aliados de la corona, podrían perder sus propiedades.
- Yo no quiero demorar más mi visita al campamento. Estoy seguro de que Targos, el encargado del almacén, tiene disponible alguna perla de unas 100 monedas de oro. Si no a la vuelta podríamos compra alguna. – Dijo respondiendo a Mablung... Si no hay más cosas partamos. - Dijo mientras se guardaba los documentos y hacia un ademan de partir.
Leobald secundó el gesto de Toctoc y recogió sus cosas dispuesto a partir de inmediato.
—Aún estamos al servicio de la Corona. Bastianes debería ver esos documentos. No estoy seguro de que nos corresponda a nosotros decidir su destino —comentó con tranquilidad mientras se pertrechaba—. Pero dudo que fueran el motivo por el que el druida empeñó su último aliento. Esos objetos, sin embargo... —dejo la frase en el aire mirando los artefactos—, deberíais mantenerlos ocultos hasta que sepamos más.
Adriana continuó sentada a la mesa mientras reposaba el contundente desayuno en el tiempo en el que sus compañeros intentaban abrir el cofre. No tenía mucho que aportar y su presencia solo podía suponerles un estorbo. Así que cuando finalmente aquella caja acorazada mostró su contenido al exterior, la alta elfa se irguió sorprendida, ya que sus esperanzas de poder abrirlo por sus propios medios eran más bien escasas.
Escuchó las diversas opiniones sobre qué hacer con los documentos y artefactos encontrados y, en cuanto tuvo ocasión, no dudó en mostrar su propia opinión.
- Me siento en la obligación de recordaros las palabras de aquel druida que dio su vida por ayudarnos, con las que nos rogó que devolviéramos estos objetos a sus amos. Estos artefactos no nos pertenecen, debemos encontrar a sus dueños y entregárselos. Y quizá posean información valiosa que compartir con nosotros. Investigar sobre sus propiedades puede darnos una pista de a quién pertenecen- comentó acercándose para valorarlos - pero no son nuestros. Debemos hacer lo correcto - aseveró dirigiéndose a Mablung que parecía el más interesado en apropiarse de ellos. Su tono de voz había variado sutilmente a una amable solicitud, como si le estuviera pidiendo un favor.
- Para poder devolver estos objetos a aquellos que les pertenecen, si no fueron arrastrados alas profundidades del océano cuando el barco se hundió, debemos averiguar qué son y su procedencia. Si la magia puede aportarnos esta información no creo que haya daño a nadie el usarla - dice delicadamente Godric - Pero permitid que estudie el cetro un poco más mientras os preparáis para salir. Sinceramente, creo que nos vendría bien empezar a saber más cosas sobre todo lo que ocurre a nuestro alrededor, a veces tengo la sensación de que vamos dando tumbos a ciegas y que seguimos vivos por pura suerte... y eso se nos acabará antes o después.. - hace una pausa, meditando sobre sus siguientes palabras -
- Déjame ver esos papeles Toc-Toc por favor, yo los llevaré, si no os importa, hasta Bastianes. Creo que tienes mucha razón en que estas propiedades pueden haber cambiado de manos y puede que simples granjeros se vean perjudicados si sacamos alegremente estos papeles a la luz. Una vez más, nos falta información y creo que Bastianes es nuestra mejor referencia. En mi tiempo pasado en la Corte... aprendí que este tipo de cosas pueden ser muy poderosas. Quizá consigamos que la Corona tenga un problema menos en la persona de este noble tradicionalista si le devuelve sus posesiones... o si le promete hacerlo. Pero eso, sinceramente, se escapa de nuestras capacidades. A riesgo de repetirme, creo que necesitamos más información para poder tomar decisiones acertadas. Y puede que no haya sido la persona más amable, pero Bastianes ha sido honesto y directo. -
La increíble intuición de TocToc no pareció fallarle cuando de reojo observó como el pequeño diablillo vigilaba con extrema curiosidad el contenido de la caja. Sus ojos pasaban de un objeto a otro analizando al detalle cada artefacto, expectante e impaciente, en efecto, parecía buscar algo muy específico, pero si lo había encontrado, no dejó entrever ninguna señal o lenguaje corporal que mostrara su triunfo o derrota. El único gesto que no pudo evitar exhalar fue cuando Godric se interesó por el misterioso cetro de Lathander, ... su rostro destiló desprecio y angustia, claramente esa elección no estaba para nada alineada con su naturaleza.
El rojizo imp parecio revoletear hasta el extremo más opuesto de la habitación, y se posó sobre el dintel superior de uno de los ventanales de ese ala de la posada, mostrando una fuerza de voluntad férrea por intentar mantenerse en la misma habitación que ese pío bastón. Su voz sonó quebrada y casi inaudible cuando se dispuso a dar su opinión al respecto.
- Ese objeto... debería ser el primero en ser devuelto a sus dueños... a la iglesia de Lathander... o a quien corresponda. Si fuera por mi lo destruiría y lo arrojaría al volcán más candente y virulento de Los Reinos, pero entiendo... el interés que tiene mi Amo por su religión... y aunque no lo comparto... en absoluto... creo que "eso" nos hará más mal que bien como grupo... y además quema... y duele...
Las palabras parecían más para sí mismo que para ser oídas o incluso respondidas por nadie, así que esperó pacientemente a que el resto del grupo se pertrechara para la marcha mientras Mablung estudiaba la capa, Khalion la piedra tallada con forma de gato y Godric el cetro de pureza inquebrantable...
Al final del short rest, los siguientes objectos son identificados: Stone of Good Luck (Luckstone), Duskcrusher y Nature's Mantle a falta de que alguno esté maldito... pero como ya os habéis frotado con ellos, pues si es el caso, os mando un privado con los "detalles".
Los caballos que descansaban en los establos de la parte interior de "La Cabra de Mimbre" parecían estar en buen estado y listos para el viaje, sin duda habían recibido cuidados externos, y sus abrevaderos estaban repletos de pastos frescos y heno. Khalión no dudó en terminar de ensillar el pura sangre y saltó sobre su lomo para dirigir la marcha, mientras el resto les siguieron, alegrándose de que de algún modo, el número de monturas había aumentado hasta no tener que compartirlas. ¿Un detalle de Eliander? posiblemente.
La ya familiar lluvia volvió a calar sobre las capas, armaduras y vestimentas de todos los agentes, aunque esta ver era fina, casi agradable, y de vez en cuando, alguna apertura en el nublado y encapotado cielo, permitía el paso de un haz de luz como un foco entre el gris que lo inundaba todo. El trayecto se antojó rápido a pesar del barro, el olor a plantas húmedas proveniente del increíble Mar de Hierbas, les acompañó a lo largo del camino. El va y ven de las altas briznas de casi tres metros de altura, se antojaba relajante de observar, y llamaba a adivinar que profundos secretos, a parte de los senderos ocultos, guardaba aquella inmensidad verde que se encontraba a su izquierda y que se perdía en la distancia hasta donde alcanzaba la vista.
Cuando llegaron al fortín a las casi tres horas de camino, las puertas se encontraban abiertas, y el cambio de guardia de los exploradores se estaba produciendo. Decenas de unidades de caballería ligera salían y entraban dispersándose rápidamente entre los bosquecillos cercanos que aún quedaban sin talar. En el aire, volando alto, destacaba un halcón que volando en amplias circunferencias parecía darles la bienvenida. Aún así, cuando los Agentes se acercaron, parecieron coger prioridad, y un par de soldados de infantería acompañados de un sargento se apresuraron a hacerse cargo de sus caballos y llevarlos a los establos situados cerca de la entrada, en el edificio anexo a las barracas.
Mientras eran escoltados, una cara familiar se les acercó, Broser, con una barba mucho más pronunciada que la última vez que le vieron, les indicó con cierto aire marcial que podían usar los aposentos para invitados cerca del faro, y que cuando estuvieran acomodados, le avisaran para organizar lo que necesitaran. Sin embargo, la amabilidad dedicada a los Agentes no fue compartida para Nadie, al que bruscamente le espetó que su lugar estaba en los barracones antiguos, el sitio original donde los Agentes pasaron sus primeras noches.
Godric pasó de observar con curiosidad el extraño cetro a manejarlo con cuidado y casi reverencia según iba reconociendo lo que tenía entre manos.
- No puedo creerlo. Esto si que es extraño...- dice casi más para sí mismo que para los demás. Ignorando de momento las quejas del pequeño diablillo Godric acerca el objeto a Adriana, para compartir con ella sus conocimientos, aunque cuando se da cuenta de que el resto también está escuchando intenta incluirlos a todos con su mirada mientras habla.
- Este arma... creo que este arma es Duskcrusher, un arma que fue forjada por los seguidores de Ammanutor. Veréis durante mucho tiempo se consideró a los seguidores de ese aspecto de Lathander, uno mucho más... expeditivo contra los enemigos de la Luz, como una secta que rezaba a un dios falso, incluso se llegó a hablar de herejía. Pero finalmente Lathander nos mostró el camino y reveló que Ammanutor y Él eran el mismo. Eso acabó con el cisma y las dos igleisas se fusionaron. Este arma fue, como decía, creada por los seguidores originales de Ammanutor para luchar contra los muertos vivientes, en concreto contra los vampiros que campaban a sus anchas en la ciudad de Westgate, asolándola. Tan grave era la situación que algunos dicen que no dio tiempo a terminar los poderosos encantamientos que se estaban elaborando para terminar su creación. Tuvo que ser enviada a Westgate y su reputación la precedía, pues se dice que los vampiros supervivientes de la urbe aún temen su nombre. Por desgracia, el contingente que la portaba hacia la ciudad fue emboscado y aniquilado, y el arma se perdió sin haber sido enarbolada ni una sola vez. Me pregunto cómo llegó hasta este cofre... Yo... no soy ni por asomo tan buen guerrero como aquellos de la historia pero humildemente la portaré ya que Lathander ha tenido a bien poner una en nuestro camino. Sin duda nos será de gran ayuda para combatir los muertos vivientes que podamos encontrar. -
Tras hablar sobre el destino del resto de los objetos y mientras guardaba los pergaminos de propiedad en su zurrón, Godric se acercó a un molesto Ostor.
- Mira el lado positivo- le dice en voz baja, intentando tranquilizar un poco a su pequeño compañero - Si la llevo nadie la usará contra ti...-
La cabalgata hacia Ghostfinger se le antoja al joven sacerdote agradable. Quizá sea por las revelaciones de aquella madrugada, o por ver, por fin, algún rayo de luz entre la perenne capa de nubes que cubre la región. Cuando se están acercando, Godric recomienda a Ostor volverse invisible, y andarse con precaución en presencia de Bastianes y el Mago o su familiar. No es, sin embargo, hasta que Broser trata con desdén a Nadie que su espíritu no se ensombrece.
- Disculpa Broser, pero Nadie es uno más de nosotros. No permitiré que pase una noche en aquellos barracones destartalados. Yo compartiré mis aposentos con él, como buenos compañeros. -
Con acertada desconfianza el aasimar caído en desgacia examinó el interior del cofre. Todo el contenido parecía estar sobre la mesa mientras el juego de papeles y objetos continuaba de mano en mano. La coraza marinera relucía con destellos escamosos y a su espalda Alure, la rompe olas. Dos cimitarras al cinto y dagas por doquier que se intepusieron en la puerta de la posada.
-No podemos entregar a nuestros carceleros esos papeles sin contraprestación.-sus palabras sonaban potentes sin la resonancia de la máscara, ahora colgada al cinto.-No hasta estar seguro de las consecuencias que pueda tener. Solo las entregaremos de ser la mejor alternativa. Por favor te pido que los devuelvas al cofre y que este sea custodiado por la guardia si así lo deseas..
Su posición cerrando el paso hacia la puerta escondía mas firmeza que sus educadas palabras. El amuleto que había investigado permanecía sobre la mesa después de haber comunicado sus propiedades mágicas a los demás.
Tras estudiar la capa Mablung se la ciño mientras decía a sus compañeros:- Esta capa pertenecía a los druidas, por lo que sus dueños están muertos o corrompidos, como último miembro de los druidas en Dreadwood la custodiaré, de igual forma veo lógico que Godric custodie el arma de su orden...el resto de objetos, lo suyo sería darles uso hasta que encontréis a sus dueños...si es que podéis-.
-Respecto a los papeles, haced con ello lo que gustéis como si los quemáis- añadió con un encogimiento de hombros.
Durante el viaje a Ghostfinguer, Mablung pensó en los sucesos de la noche anterior y en las pequeñas descargas que parecían recorrer su cuerpo y que no acaban de desaparecer, sin duda debería investigar sobre ello, posiblemente en la biblioteca de Fenrir pudiese encontrar algo al respecto o quizás el mago Julius pudiese saber algo.
Al llegar al fuerte, primero se encargó de su montura y luego le dijo a Broser:- ¿Esta Julius en el fuerte? necesito hablar con él, e imagino que el resto de mis compañeros querrán hablar con Bastianes.
Con acertada desconfianza el aasimar caído en desgacia examinó el interior del cofre. Todo el contenido parecía estar sobre la mesa mientras el juego de papeles y objetos continuaba de mano en mano. La coraza marinera relucía con destellos escamosos y a su espalda Alure, la rompe olas. Dos cimitarras al cinto y dagas por doquier que se intepusieron en la puerta de la posada.
-No podemos entregar a nuestros carceleros esos papeles sin contraprestación.-sus palabras sonaban potentes sin la resonancia de la máscara, ahora colgada al cinto.-No hasta estar seguro de las consecuencias que pueda tener. Solo las entregaremos de ser la mejor alternativa. Por favor te pido que los devuelvas al cofre y que este sea custodiado por la guardia si así lo deseas..
Su posición cerrando el paso hacia la puerta escondía mas firmeza que sus educadas palabras. El amuleto que había investigado permanecía sobre la mesa después de haber comunicado sus propiedades mágicas a los demás.
El joven sacerdote lanzó un suspiro que pareció surgir de sus pies ante las palabras de Khalion.
- Entiendo que en tu mente sigas pensando que debes obtener algo por todo tu esfuerzo y trabajo... por eso hablas de... contraprestación. Pero tiendes a olvidar, y es normal pues gozamos de una libertad de acción y movimientos sin precedentes para reos, que seguimos siendo prisioneros de la Corona y estamos conmutando nuestra pena. Por otro lado, y que me corrija Adriana que tiene aún más experiencia que yo en asuntos cortesanos, si la Bastianes o Eliander hacen buen uso de estos papeles pueden ganar un aliado para la Corona. Eso quiere decir que nuestra redención a ojos de los oficiales y magistrados estará un paso más cerca. ¿Te parece poca contraprestación? Seguro que estas deseando verte libre de nosotros, de la Corona y de todas las reglas que parecen ir en contra de aquello que tú has entendido por normas durante toda tu vida. No te culpo - dice levantando las manos en gesto pacificador - pero Khalion tienes que entender que tu escala de valores no es la del resto de la sociedad... por eso, amigo mio, te has visto en esta situación. -
Godric se queda pensativo y observa los papeles un momento
- Te ofrezco un trato, yo entrego los papeles que son de posesión de tierras a Bastianes y tú conservas los que pagarés de los bancos. Son nominativos, por lo que es sólo ese noble quien debe cobrarlos, pero si en algún momento, y gracias a hacer aquello que nos han ordenado, volvemos a ser libres, imagino que lograrás de alguna manera de hacerlos efectivos. Si eso te vuelve a meter en problemas... - Godric se encoge de hombros - Pero si me gustaría advertirte de una cosa Khalion, los entresijos de la Corte pueden ser mucho más peligrosos que las dagas ocultas en la oscuridad y los sangrientos contratos entre los que te mueves... no te oculto que mi intención al entregar los papeles, y por mí los entregaría todos, es mantenernos lo más alejados posible de intrigas políticas. Si pretendes hacer uso de estos papeles - Godric acompaña palabra y acción y entrega los pagarés a Khalion - de una forma u otra, te verás arrastrado en esa telaraña y puede que te descubras añorando los simples días en que eras un reo y sólo tenías que cumplir las misiones que te enconmendaban para ganarte tu libertad. -
Broser se rascó la empapada barba mientras escuchaba la educada respuesta de Godric. Cuando el sacerdote acabó, el sargento desvió sus ojos sin girar la cabeza durante unos segundos a su derecha, donde quedaba la estructura del faro ubicada. Negra y fantasmal, imponía su sombra sobre todo el campamento, incluso cuando el Sol no conseguía traspasar las nubes.
- Son órdenes directas de Bastianes, ni él, ni la alta elfa disponen del mismo cargo oficial que vosotros, ... bastante ha tolerado, que a ella no la mandé a prisión directamente como lugar de "descanso". Entiendo que os consideráis compañeros, y que hay camaradería entre vosotros, llevo viviendo eso desde que tengo uso de razón aquí o en los destinos que se me han ido asignando, si es así, y queréis tener todos las mismas opciones, podéis ubicaros todos en los antiguos barracones... donde el Hobgoblin tiene que permanecer.
Con un suspiró, que acompañó con un gesto de su mano para despejar parte del aguacero que recorría su frente, el corpulento humano bajó el nivel aspereza de su discurso.
- Creéis que es un castigo, o un desprecio hacía él o hacía la alta elfa, pero... preguntaros donde estaban ambos la última vez que se alojaron aquí, ... el guerrero en una celda a punto de ser colgado, y la cortesana en un almacén medio destruido... No os está castigando, ... al contrario... y otro consejo más... Nunca discutáis órdenes de un oficial de la Corona. Ahora decidid vuestro lugar y cuando esteis listos avisadme, estaré en los campos de entrenamiento... el enmascarado ya sabe de sobra donde es.
Dirigiéndose a Mablung antes de marcharse definitivamente, el humano de mirada profunda admitió con la cabeza.
- Gracias por tus palabras Broser -dice Godric agradecido - Así haremos -
Una vez el veterano soldado se ha ido Godric se vuelve hacia Adriana y Nadie. - Yo al menos os acompañaré. No puedo llevar la contraria a las órdenes de Bastianes, pero espero que mi pequeño gesto se entienda como una silenciosa protesta. Vamos, cuanto antes dejemos nuestras cosas antes podemos hablar con Bastianes y Julius, ponerles al día y volver a Saltmarsh-dice dirigiéndose con aparente ánimo hacia los destartalados barracones.
El joven sacerdote lanzó un suspiro que pareció surgir de sus pies ante las palabras de Khalion.
- Entiendo que en tu mente sigas pensando que debes obtener algo por todo tu esfuerzo y trabajo... por eso hablas de... contraprestación. Pero tiendes a olvidar, y es normal pues gozamos de una libertad de acción y movimientos sin precedentes para reos, que seguimos siendo prisioneros de la Corona y estamos conmutando nuestra pena. Por otro lado, y que me corrija Adriana que tiene aún más experiencia que yo en asuntos cortesanos, si la Bastianes o Eliander hacen buen uso de estos papeles pueden ganar un aliado para la Corona. Eso quiere decir que nuestra redención a ojos de los oficiales y magistrados estará un paso más cerca. ¿Te parece poca contraprestación? Seguro que estas deseando verte libre de nosotros, de la Corona y de todas las reglas que parecen ir en contra de aquello que tú has entendido por normas durante toda tu vida. No te culpo - dice levantando las manos en gesto pacificador - pero Khalion tienes que entender que tu escala de valores no es la del resto de la sociedad... por eso, amigo mio, te has visto en esta situación. -
Godric se queda pensativo y observa los papeles un momento
- Te ofrezco un trato, yo entrego los papeles que son de posesión de tierras a Bastianes y tú conservas los que pagarés de los bancos. Son nominativos, por lo que es sólo ese noble quien debe cobrarlos, pero si en algún momento, y gracias a hacer aquello que nos han ordenado, volvemos a ser libres, imagino que lograrás de alguna manera de hacerlos efectivos. Si eso te vuelve a meter en problemas... - Godric se encoge de hombros - Pero si me gustaría advertirte de una cosa Khalion, los entresijos de la Corte pueden ser mucho más peligrosos que las dagas ocultas en la oscuridad y los sangrientos contratos entre los que te mueves... no te oculto que mi intención al entregar los papeles, y por mí los entregaría todos, es mantenernos lo más alejados posible de intrigas políticas. Si pretendes hacer uso de estos papeles - Godric acompaña palabra y acción y entrega los pagarés a Khalion - de una forma u otra, te verás arrastrado en esa telaraña y puede que te descubras añorando los simples días en que eras un reo y sólo tenías que cumplir las misiones que te enconmendaban para ganarte tu libertad. -
Momentos tensos antes de partir hacia Ghostfinger.
-Partes de un profundo desconocimiento fruto de juventud y de una experiencia vital entre sábanas de un poderoso banderizo. Mientras frecuentabas alcoba y disfrutabas festines dabas la espalda al verdadero sufrimiento. Tu Corona no es otra caso que un yugo explotador, un iceberg, que estando en superficie ignora todo lo que por abajo le sustenta.-toma un poco de aire. Sus ojos rezuman azul intenso contagiados por su pasión. -Todo es un juego para vosotros en la corte, de ratas y cobardía sin redaños para afrontar nada, necesitando de gente de mi calaña para suplir su impotencia.Soldadesca impune bajo bonitas banderas, banderizos de títulos nobilarios y apellidos rimbombantes que miraban a otro lado interesadamente son los que me han enseñado esa escala de valores de la que te burlas. -señalando a humanos y elfa.- Ni busco ni añoro perdón y si aquí estoy es por mis habilidades.. y si vosotros lo estais es tan solo por nombre. Normas a medida que bien os aplicais en camaradería. No hay justicia cuando no se imparte en igualdad a todos. Haced lo que os plazca, perder una baza y hacerle el juego quien solo los usará en beneficio propio, nunca comunal.
-No soy mas asesino que vosotros-respondió a la acusación del joven humano.- Mi antiguo trabajo no difiere en nada de lo que ahora todos estáis haciendo. El gremio de asesinos es mas frecuentado por gente de vuestra buena cuna que por baja estofa como yo. Sólo una vez mi "cliente" era inocente y..- las palabras se ahogan cuando los recuerdos afloran. Traga saliva y continúa.- Es momento de deshacerse de la moneda.. estar expuesto me consume. De no usarla en favor vuestra la entregaré por futuro trato. Conocer las vulnerabilidades de Chack acerca posturas con él. Quizá sea momento de separar caminos y presentarle cordialidades en su refugio temporal.
Cuando Godric le entrega los pagarés el aasimar los mira con desprecio. Asuntos de poderosos que solo extienden sus tentáculos aplastando y oprimiendo. Los arroja al interior del cofre dejando sobre la mesa el amuleto con la forma de cabeza de gato y falto de un ojo. De otro bolsillo que no lo parecía sacó la moneda que tanto había reclamado Chack, la ex-Sombra. Del pequeño petate saca las nueve barras de plata pura, botín reclamado por Sambalet.
-Necesitaré una aunque seguro me sobre, si la necesitamos. Las taso en 100 oros cada una.- y las dejó en el interior del cofre aún sin cerrar.-Y un amuleto de la suerte que seguro os resulta útil. Con pausa he posido además valorar las peculiaridades del majestuoso acero arrebatado al capitán del Fantasma.. Fabulosa arma, poderosa contra criaturas de la mar y con control sobre las aguas. Me considero la mejor baza para exprimir su potencial.-dijo sin duda alguna de la certeza de sus palabras y pensamientos, sin egoísmo aparente.
Se acercó entonces al humano mayor para dirigirle unas dedicadas palabras, ajeno a que el resto les escuchara o no. Sus ojos todo azul, sin iris ni pupilas miraron directamente al veterano caballero.-No debes faltar a tu deber y alertar a Ghostfinger del complot y la conspiración que sobre todos nosotros se cierne.. por mucho que manche el "buen nombre" de una familia. Guardo lealtad a mis camaradas como has visto pero no pondré en juego cientos de vidas por evitar la mácula de un apellido ajeno.
Una vez fuera ensilló el purasangre con meticulosidad, como un ritual lleno de respeto hacia el bravo animal, quizá empatizando desde su divina naturaleza. A las puertas de Saltmarsh separó caminos de sus compañeros- Entregaré la moneda y trataré de obtener información sobre tu perseguidor. Nos vemos a vuestra vuelta antes de la fiesta.- Y tomo rumbo contrario a sus compañeros.
- Confundes mi breve tiempo pasado en la Corte con un nacimiento privilegiado o sangre noble en mis venas. Ni lo uno ni lo otro. Si piensas que los callos de mis manos son de satisfacerme a mí mismo, deberías pensarlo dos veces. Hablas de yugos y opresión pero tus propios prejuicios nublan tu juicio amigo mio. Puedo comprender, y hasta compartir en ocasiones, tu desprecio por los nobles, pero estigmatizar a todo un colectivo por las malas acciones de unos de sus miembros creo que es injusto. Lo que no puedes negar es que la Corona nos tiene a todos prisioneros ahora. Estas aquí porque cumples una condena. Tus habilidades han hecho que en lugar de pudrirte en una celda estes aqui manejando una espada y dejando lingotes de plata en un cofre. Pero seguimos siendo reos. -
Godric suspira
- Os propongo una votación. Puedo hacerme cargo de todos los papeles -dice viendo que Khalion desprecia los que le ha ofrecido - y entregarlos a Bastianes cuando lleguemos a Ghostfinger. Creo que va siendo hora de que me haga responsable de los asuntos que nos atañen, como hacéis vosotros, o tú mismo, Khalion al encargarte del asunto de la moneda. Sinceramente opino que hacemos bien entregándolos a Bastianes, no lo veo como perder una baza, parafraseando a Khalion, si no, al contrario, ganarla con quienes deben decidir sobre nuestro futuro inmediato. Además de alejarnos lo máximo posible de maquinaciones cortesanas. Opino que ya tenemos bastante entre manos como para involucrarnos en la política local más de lo que ya nos vemos involucrados. Que sea Bastianes quien decida qué hacer con los títulos y pagares. ¿Qué opinais el resto? ¿Aceptas una votación entre todos Khalion, ya que lo que hacemos entre todos afecta a los demás? -
-Los pecados de juventud como la juventud misma se curan con el tiempo.-aunque su rostro aasimar no mostraba el paso del tiempo usaba un tono paternalista marcado por la experiencia- No eres de los suyos ni verán un igual en ti.. pero entiendo que te fascine. Es difícil resistir la tentación y atracción por lo prohibido y no parece ser hecho aislado -mirando al pequeño socio alado del sacerdote.- Los prejucios no son los míos.. yo no te juzgaré por tu nombre o ascendencia. La ley de los hombres si lo hará y deparará diferente destino según tu cuna.
Batalla ciertamente perdida y huérfano de apoyo entre el resto de agentes Khalion suspiró por le necedad que sea apoderaba del grupo. Cerró la pequeña mochila donde guardaba algunos de los útiles y herramientas de su oficio, mas ligero ahora que no portaba la plata de todos, tendió una de las cimitarras que ahora le sobraban a Nadie y enrolló el látigo para asegurarlo al cinto. Tomó por último la moneda maldita de la mesa ante la falta de portador voluntario ni fin en que usarla con la determinación de entregarla por futuras ayudas. Deshacerse ràpido de ella, antes de que apreciaran algún valor en ella.
-Entre las palabras y los actos te traicionas. Te reconoces reo pero actúas como si compartieras intereses. Eres desechable, despreciable e insignificante para ellos como los anteriores grupos con cero supervivientes. Pronto compras el término "agente" con el que nos llaman para enmascarar la realidad y lo asumes como propio. Si crees que entregando esos papeles conseguirás trato de favor o que cambiarán tu destino.. adelante. Desgraciadamente nuestros caminos no difieren de los que perecieron en los pantanos con sus bonitas cintas doradas al brazo. Llévalos, guárdalos o dáselos a tu pequeño acompañante, quien los porte es igual. Tan solo reconsiderar que lograreis mas allá de las caricias que le darías a tu perro cuando te trae el palo que le has arrojado.
Parece que Godric quiere responder a casi cada frase acusatoria del Aasimar. Pero el antiguo cazarrecompensas no hace pausas en su discruso.
"Ni verán un igual en ti" -Pero si yo no pretend.. -
"Atracción por lo prohibido"- Yo no tengo atracción por... -
"Los prejuicios no son.. "- Pero si antes me has llamad... -
"Actúas como si compartieras intereses "- No es eso.. es que no me import.. aaggh -
"Compras el término "agente"..- venga ya... si era por no repetirm... -
"Cambiarán tu destino... " - Cambiarlo no, pero sí conseguirlo antes.
"Que perecieron en el pantano"- Por cierto! respecto a eso creo que ahora pued... -
Finalmente se rinde y deja terminar a Khalion. Percatándose de que el usualmente enmascarado guerrero ha expuesto sus sentimientos de manera inteligible.
- Me gustaría que vieras las cosas de otro modo, y que pensaras que, pese a todo, hay redención para todos nosotros. No sólo a los ojos de las leyes que, reconozcamos o no, nos rigen a todos, si no de los dioses. Espero demostrarte que aún hay esperanza, al menos consiguiendo conmutar nuestra condena, para que luego cada uno pueda seguir su camino. Ya que algunos de vosotros os empeñáis en recordarnos que no os importa nada ni nadie salvo vosotros y vuestras ideas.. -esto último lo dice con un claro tono de pena, que no de reproche.
- Gracias Khalion -le dice cuando ya está en la puerta - por dejarme hacer esto de la manera que creo mejor para todos, aunque no estés de acuerdo. -
Mientras los demás se preparan recoge todos los papeles y los guarda en un su zurrón, que tiene cera para evitar que el contenido de sus instrumentos de primeros auxilios se mojen, y se va a su habitación para ponerse su armadura y salir hacia Ghostfinger.
- Dudo que use los barracones, estare en los campos de practicas hasta que nos reclamen- dijo Mabling mientras sacaba el arco -uno no tiene de estos todos los dias a mano-, añadio mientras salia de las caballerizas.
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- Conocéis a ese tal Primewater, es amigo o enemigo? O alguien caído en desgracia y pobreza? Estos documentos tan solo tiene valor en sus manos ya que son nominativos.... Devolverlos sería favor por favor? O dar recursos a nuestros enemigos - Dijo mientras se regodeaba interiomente tras su demostración de habilidades.
Los objetos le resultaron extraños y algo alienígenas. Mientras los revelaba echo un vistazo a Ostor, asegurándose de que su preciado tesoro no se encontraba entre estos últimos hayazgos.
- Deseáis repartirlos? Guardarlos? Identificarlos?
Zevatur, Rolthos
Godric tomó el objeto con la letanía de Lathander con cuidado, casi con reverencia. Aquel rezo al Dios de la Mañana era antiguo, muy antiguo. Con cuidado observó con cuidado el objeto, moviendo los labios al repasar la oración en un lenguaje que sonaba antiguo, el que se usaba hacía mucho tiempo en el reino.
( Tira de Religion en game log por si reconoce algo: 23. Si era necesaria historia tiene el mismo bono. )
PbP Character: A few ;)
- Deberíamos identificarlos y repartirlos- respondió Mablung y respecto a los documentos, haced lo que consideréis oportuno, no me interesan los devaneos de la nobleza- añadió mientras se encogía de hombros en un deje de indiferencia.
- Pero si queremos ir a Ghostfinguer y volver en el día deberíamos de darnos prisa, ¿ tenemos los materiales para poder identificar los objetos?- pregunto al resto, las cuestiones monetarias nunca habían preocupado al druida.
TocToc se detuvo para reflexionar un momento, después, con un chasquido a modo de eureka buscó en su legajo de anotaciones. - Claro... Según Leobald... Gellan Primewater, el Príncipe del Comercio de especias, era el dueño de “El Emperador de las Olas”, el pecio corrupto que visitamos. Según mis anotaciones Leobald dijo que a raíz del naufragio se había arruinado, pero que había logrado reconstruir su imperio, posiblemente con metodos poco eticos. Actualmente dirige el gremio de mercaderes locales y tiene un puesto entre el cónclave que dirige la ciudad, en el bando de los Tradicionalistas.
Mirando a los presentes y haciendo un gesto de agradecimiento al Paladín por tan útil información les preguntó.
- Quizás podríamos hacer valer estos documentos para granjearnos su favor... o quizás es darles demasiados recursos a los tradicionalistas. – Revisándolos un poco más finalizó. - Me pregunto también a quien perjudicarían todos estos títulos de propiedad, lo mismo algunas de estas propiedades han cambiado de manos y al revelar estos documentos ciertas personas, quizás aliados de la corona, podrían perder sus propiedades.
- Yo no quiero demorar más mi visita al campamento. Estoy seguro de que Targos, el encargado del almacén, tiene disponible alguna perla de unas 100 monedas de oro. Si no a la vuelta podríamos compra alguna. – Dijo respondiendo a Mablung... Si no hay más cosas partamos. - Dijo mientras se guardaba los documentos y hacia un ademan de partir.
Zevatur, Rolthos
Leobald secundó el gesto de Toctoc y recogió sus cosas dispuesto a partir de inmediato.
—Aún estamos al servicio de la Corona. Bastianes debería ver esos documentos. No estoy seguro de que nos corresponda a nosotros decidir su destino —comentó con tranquilidad mientras se pertrechaba—. Pero dudo que fueran el motivo por el que el druida empeñó su último aliento. Esos objetos, sin embargo... —dejo la frase en el aire mirando los artefactos—, deberíais mantenerlos ocultos hasta que sepamos más.
Ash el guerrero — Dragon's Hoard (Spanish)
Leobald el caballero — Death and Pain at Saltmarsh (Spanish)
Keeper — Vigilantes en el Cielo (Spanish)
Remington Wizz — Shadow of the Dragon Queen (Spanish)
"Hay una grieta en todo, así es como entra la luz"
- Para poder devolver estos objetos a aquellos que les pertenecen, si no fueron arrastrados alas profundidades del océano cuando el barco se hundió, debemos averiguar qué son y su procedencia. Si la magia puede aportarnos esta información no creo que haya daño a nadie el usarla - dice delicadamente Godric - Pero permitid que estudie el cetro un poco más mientras os preparáis para salir. Sinceramente, creo que nos vendría bien empezar a saber más cosas sobre todo lo que ocurre a nuestro alrededor, a veces tengo la sensación de que vamos dando tumbos a ciegas y que seguimos vivos por pura suerte... y eso se nos acabará antes o después.. - hace una pausa, meditando sobre sus siguientes palabras -
- Déjame ver esos papeles Toc-Toc por favor, yo los llevaré, si no os importa, hasta Bastianes. Creo que tienes mucha razón en que estas propiedades pueden haber cambiado de manos y puede que simples granjeros se vean perjudicados si sacamos alegremente estos papeles a la luz. Una vez más, nos falta información y creo que Bastianes es nuestra mejor referencia. En mi tiempo pasado en la Corte... aprendí que este tipo de cosas pueden ser muy poderosas. Quizá consigamos que la Corona tenga un problema menos en la persona de este noble tradicionalista si le devuelve sus posesiones... o si le promete hacerlo. Pero eso, sinceramente, se escapa de nuestras capacidades. A riesgo de repetirme, creo que necesitamos más información para poder tomar decisiones acertadas. Y puede que no haya sido la persona más amable, pero Bastianes ha sido honesto y directo. -
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La increíble intuición de TocToc no pareció fallarle cuando de reojo observó como el pequeño diablillo vigilaba con extrema curiosidad el contenido de la caja. Sus ojos pasaban de un objeto a otro analizando al detalle cada artefacto, expectante e impaciente, en efecto, parecía buscar algo muy específico, pero si lo había encontrado, no dejó entrever ninguna señal o lenguaje corporal que mostrara su triunfo o derrota. El único gesto que no pudo evitar exhalar fue cuando Godric se interesó por el misterioso cetro de Lathander, ... su rostro destiló desprecio y angustia, claramente esa elección no estaba para nada alineada con su naturaleza.
El rojizo imp parecio revoletear hasta el extremo más opuesto de la habitación, y se posó sobre el dintel superior de uno de los ventanales de ese ala de la posada, mostrando una fuerza de voluntad férrea por intentar mantenerse en la misma habitación que ese pío bastón. Su voz sonó quebrada y casi inaudible cuando se dispuso a dar su opinión al respecto.
- Ese objeto... debería ser el primero en ser devuelto a sus dueños... a la iglesia de Lathander... o a quien corresponda. Si fuera por mi lo destruiría y lo arrojaría al volcán más candente y virulento de Los Reinos, pero entiendo... el interés que tiene mi Amo por su religión... y aunque no lo comparto... en absoluto... creo que "eso" nos hará más mal que bien como grupo... y además quema... y duele...
Las palabras parecían más para sí mismo que para ser oídas o incluso respondidas por nadie, así que esperó pacientemente a que el resto del grupo se pertrechara para la marcha mientras Mablung estudiaba la capa, Khalion la piedra tallada con forma de gato y Godric el cetro de pureza inquebrantable...
Al final del short rest, los siguientes objectos son identificados: Stone of Good Luck (Luckstone), Duskcrusher y Nature's Mantle a falta de que alguno esté maldito... pero como ya os habéis frotado con ellos, pues si es el caso, os mando un privado con los "detalles".
" ¡Oh la Oscuridad...! "
Los caballos que descansaban en los establos de la parte interior de "La Cabra de Mimbre" parecían estar en buen estado y listos para el viaje, sin duda habían recibido cuidados externos, y sus abrevaderos estaban repletos de pastos frescos y heno. Khalión no dudó en terminar de ensillar el pura sangre y saltó sobre su lomo para dirigir la marcha, mientras el resto les siguieron, alegrándose de que de algún modo, el número de monturas había aumentado hasta no tener que compartirlas. ¿Un detalle de Eliander? posiblemente.
La ya familiar lluvia volvió a calar sobre las capas, armaduras y vestimentas de todos los agentes, aunque esta ver era fina, casi agradable, y de vez en cuando, alguna apertura en el nublado y encapotado cielo, permitía el paso de un haz de luz como un foco entre el gris que lo inundaba todo. El trayecto se antojó rápido a pesar del barro, el olor a plantas húmedas proveniente del increíble Mar de Hierbas, les acompañó a lo largo del camino. El va y ven de las altas briznas de casi tres metros de altura, se antojaba relajante de observar, y llamaba a adivinar que profundos secretos, a parte de los senderos ocultos, guardaba aquella inmensidad verde que se encontraba a su izquierda y que se perdía en la distancia hasta donde alcanzaba la vista.
Cuando llegaron al fortín a las casi tres horas de camino, las puertas se encontraban abiertas, y el cambio de guardia de los exploradores se estaba produciendo. Decenas de unidades de caballería ligera salían y entraban dispersándose rápidamente entre los bosquecillos cercanos que aún quedaban sin talar. En el aire, volando alto, destacaba un halcón que volando en amplias circunferencias parecía darles la bienvenida. Aún así, cuando los Agentes se acercaron, parecieron coger prioridad, y un par de soldados de infantería acompañados de un sargento se apresuraron a hacerse cargo de sus caballos y llevarlos a los establos situados cerca de la entrada, en el edificio anexo a las barracas.
Mientras eran escoltados, una cara familiar se les acercó, Broser, con una barba mucho más pronunciada que la última vez que le vieron, les indicó con cierto aire marcial que podían usar los aposentos para invitados cerca del faro, y que cuando estuvieran acomodados, le avisaran para organizar lo que necesitaran. Sin embargo, la amabilidad dedicada a los Agentes no fue compartida para Nadie, al que bruscamente le espetó que su lugar estaba en los barracones antiguos, el sitio original donde los Agentes pasaron sus primeras noches.
" ¡Oh la Oscuridad...! "
Godric pasó de observar con curiosidad el extraño cetro a manejarlo con cuidado y casi reverencia según iba reconociendo lo que tenía entre manos.
- No puedo creerlo. Esto si que es extraño... - dice casi más para sí mismo que para los demás. Ignorando de momento las quejas del pequeño diablillo Godric acerca el objeto a Adriana, para compartir con ella sus conocimientos, aunque cuando se da cuenta de que el resto también está escuchando intenta incluirlos a todos con su mirada mientras habla.
- Este arma... creo que este arma es Duskcrusher, un arma que fue forjada por los seguidores de Ammanutor. Veréis durante mucho tiempo se consideró a los seguidores de ese aspecto de Lathander, uno mucho más... expeditivo contra los enemigos de la Luz, como una secta que rezaba a un dios falso, incluso se llegó a hablar de herejía. Pero finalmente Lathander nos mostró el camino y reveló que Ammanutor y Él eran el mismo. Eso acabó con el cisma y las dos igleisas se fusionaron. Este arma fue, como decía, creada por los seguidores originales de Ammanutor para luchar contra los muertos vivientes, en concreto contra los vampiros que campaban a sus anchas en la ciudad de Westgate, asolándola. Tan grave era la situación que algunos dicen que no dio tiempo a terminar los poderosos encantamientos que se estaban elaborando para terminar su creación. Tuvo que ser enviada a Westgate y su reputación la precedía, pues se dice que los vampiros supervivientes de la urbe aún temen su nombre. Por desgracia, el contingente que la portaba hacia la ciudad fue emboscado y aniquilado, y el arma se perdió sin haber sido enarbolada ni una sola vez. Me pregunto cómo llegó hasta este cofre... Yo... no soy ni por asomo tan buen guerrero como aquellos de la historia pero humildemente la portaré ya que Lathander ha tenido a bien poner una en nuestro camino. Sin duda nos será de gran ayuda para combatir los muertos vivientes que podamos encontrar. -
Tras hablar sobre el destino del resto de los objetos y mientras guardaba los pergaminos de propiedad en su zurrón, Godric se acercó a un molesto Ostor.
- Mira el lado positivo - le dice en voz baja, intentando tranquilizar un poco a su pequeño compañero - Si la llevo nadie la usará contra ti...-
La cabalgata hacia Ghostfinger se le antoja al joven sacerdote agradable. Quizá sea por las revelaciones de aquella madrugada, o por ver, por fin, algún rayo de luz entre la perenne capa de nubes que cubre la región. Cuando se están acercando, Godric recomienda a Ostor volverse invisible, y andarse con precaución en presencia de Bastianes y el Mago o su familiar. No es, sin embargo, hasta que Broser trata con desdén a Nadie que su espíritu no se ensombrece.
- Disculpa Broser, pero Nadie es uno más de nosotros. No permitiré que pase una noche en aquellos barracones destartalados. Yo compartiré mis aposentos con él, como buenos compañeros. -
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Con acertada desconfianza el aasimar caído en desgacia examinó el interior del cofre. Todo el contenido parecía estar sobre la mesa mientras el juego de papeles y objetos continuaba de mano en mano. La coraza marinera relucía con destellos escamosos y a su espalda Alure, la rompe olas. Dos cimitarras al cinto y dagas por doquier que se intepusieron en la puerta de la posada.
-No podemos entregar a nuestros carceleros esos papeles sin contraprestación.- sus palabras sonaban potentes sin la resonancia de la máscara, ahora colgada al cinto.-No hasta estar seguro de las consecuencias que pueda tener. Solo las entregaremos de ser la mejor alternativa. Por favor te pido que los devuelvas al cofre y que este sea custodiado por la guardia si así lo deseas..
Su posición cerrando el paso hacia la puerta escondía mas firmeza que sus educadas palabras. El amuleto que había investigado permanecía sobre la mesa después de haber comunicado sus propiedades mágicas a los demás.
Tras estudiar la capa Mablung se la ciño mientras decía a sus compañeros:- Esta capa pertenecía a los druidas, por lo que sus dueños están muertos o corrompidos, como último miembro de los druidas en Dreadwood la custodiaré, de igual forma veo lógico que Godric custodie el arma de su orden...el resto de objetos, lo suyo sería darles uso hasta que encontréis a sus dueños...si es que podéis-.
-Respecto a los papeles, haced con ello lo que gustéis como si los quemáis- añadió con un encogimiento de hombros.
Durante el viaje a Ghostfinguer, Mablung pensó en los sucesos de la noche anterior y en las pequeñas descargas que parecían recorrer su cuerpo y que no acaban de desaparecer, sin duda debería investigar sobre ello, posiblemente en la biblioteca de Fenrir pudiese encontrar algo al respecto o quizás el mago Julius pudiese saber algo.
Al llegar al fuerte, primero se encargó de su montura y luego le dijo a Broser:- ¿Esta Julius en el fuerte? necesito hablar con él, e imagino que el resto de mis compañeros querrán hablar con Bastianes.
El joven sacerdote lanzó un suspiro que pareció surgir de sus pies ante las palabras de Khalion.
- Entiendo que en tu mente sigas pensando que debes obtener algo por todo tu esfuerzo y trabajo... por eso hablas de... contraprestación. Pero tiendes a olvidar, y es normal pues gozamos de una libertad de acción y movimientos sin precedentes para reos, que seguimos siendo prisioneros de la Corona y estamos conmutando nuestra pena. Por otro lado, y que me corrija Adriana que tiene aún más experiencia que yo en asuntos cortesanos, si la Bastianes o Eliander hacen buen uso de estos papeles pueden ganar un aliado para la Corona. Eso quiere decir que nuestra redención a ojos de los oficiales y magistrados estará un paso más cerca. ¿Te parece poca contraprestación? Seguro que estas deseando verte libre de nosotros, de la Corona y de todas las reglas que parecen ir en contra de aquello que tú has entendido por normas durante toda tu vida. No te culpo - dice levantando las manos en gesto pacificador - pero Khalion tienes que entender que tu escala de valores no es la del resto de la sociedad... por eso, amigo mio, te has visto en esta situación. -
Godric se queda pensativo y observa los papeles un momento
- Te ofrezco un trato, yo entrego los papeles que son de posesión de tierras a Bastianes y tú conservas los que pagarés de los bancos. Son nominativos, por lo que es sólo ese noble quien debe cobrarlos, pero si en algún momento, y gracias a hacer aquello que nos han ordenado, volvemos a ser libres, imagino que lograrás de alguna manera de hacerlos efectivos. Si eso te vuelve a meter en problemas... - Godric se encoge de hombros - Pero si me gustaría advertirte de una cosa Khalion, los entresijos de la Corte pueden ser mucho más peligrosos que las dagas ocultas en la oscuridad y los sangrientos contratos entre los que te mueves... no te oculto que mi intención al entregar los papeles, y por mí los entregaría todos, es mantenernos lo más alejados posible de intrigas políticas. Si pretendes hacer uso de estos papeles - Godric acompaña palabra y acción y entrega los pagarés a Khalion - de una forma u otra, te verás arrastrado en esa telaraña y puede que te descubras añorando los simples días en que eras un reo y sólo tenías que cumplir las misiones que te enconmendaban para ganarte tu libertad. -
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Broser se rascó la empapada barba mientras escuchaba la educada respuesta de Godric. Cuando el sacerdote acabó, el sargento desvió sus ojos sin girar la cabeza durante unos segundos a su derecha, donde quedaba la estructura del faro ubicada. Negra y fantasmal, imponía su sombra sobre todo el campamento, incluso cuando el Sol no conseguía traspasar las nubes.
- Son órdenes directas de Bastianes, ni él, ni la alta elfa disponen del mismo cargo oficial que vosotros, ... bastante ha tolerado, que a ella no la mandé a prisión directamente como lugar de "descanso". Entiendo que os consideráis compañeros, y que hay camaradería entre vosotros, llevo viviendo eso desde que tengo uso de razón aquí o en los destinos que se me han ido asignando, si es así, y queréis tener todos las mismas opciones, podéis ubicaros todos en los antiguos barracones... donde el Hobgoblin tiene que permanecer.
Con un suspiró, que acompañó con un gesto de su mano para despejar parte del aguacero que recorría su frente, el corpulento humano bajó el nivel aspereza de su discurso.
- Creéis que es un castigo, o un desprecio hacía él o hacía la alta elfa, pero... preguntaros donde estaban ambos la última vez que se alojaron aquí, ... el guerrero en una celda a punto de ser colgado, y la cortesana en un almacén medio destruido... No os está castigando, ... al contrario... y otro consejo más... Nunca discutáis órdenes de un oficial de la Corona. Ahora decidid vuestro lugar y cuando esteis listos avisadme, estaré en los campos de entrenamiento... el enmascarado ya sabe de sobra donde es.
Dirigiéndose a Mablung antes de marcharse definitivamente, el humano de mirada profunda admitió con la cabeza.
- Le haré saber de tu interés.
" ¡Oh la Oscuridad...! "
- Gracias por tus palabras Broser - dice Godric agradecido - Así haremos -
Una vez el veterano soldado se ha ido Godric se vuelve hacia Adriana y Nadie. - Yo al menos os acompañaré. No puedo llevar la contraria a las órdenes de Bastianes, pero espero que mi pequeño gesto se entienda como una silenciosa protesta. Vamos, cuanto antes dejemos nuestras cosas antes podemos hablar con Bastianes y Julius, ponerles al día y volver a Saltmarsh- dice dirigiéndose con aparente ánimo hacia los destartalados barracones.
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Momentos tensos antes de partir hacia Ghostfinger.
-Partes de un profundo desconocimiento fruto de juventud y de una experiencia vital entre sábanas de un poderoso banderizo. Mientras frecuentabas alcoba y disfrutabas festines dabas la espalda al verdadero sufrimiento. Tu Corona no es otra caso que un yugo explotador, un iceberg, que estando en superficie ignora todo lo que por abajo le sustenta. -toma un poco de aire. Sus ojos rezuman azul intenso contagiados por su pasión. -Todo es un juego para vosotros en la corte, de ratas y cobardía sin redaños para afrontar nada, necesitando de gente de mi calaña para suplir su impotencia.Soldadesca impune bajo bonitas banderas, banderizos de títulos nobilarios y apellidos rimbombantes que miraban a otro lado interesadamente son los que me han enseñado esa escala de valores de la que te burlas. -señalando a humanos y elfa.- Ni busco ni añoro perdón y si aquí estoy es por mis habilidades.. y si vosotros lo estais es tan solo por nombre. Normas a medida que bien os aplicais en camaradería. No hay justicia cuando no se imparte en igualdad a todos. Haced lo que os plazca, perder una baza y hacerle el juego quien solo los usará en beneficio propio, nunca comunal.
-No soy mas asesino que vosotros-respondió a la acusación del joven humano.- Mi antiguo trabajo no difiere en nada de lo que ahora todos estáis haciendo. El gremio de asesinos es mas frecuentado por gente de vuestra buena cuna que por baja estofa como yo. Sólo una vez mi "cliente" era inocente y..- las palabras se ahogan cuando los recuerdos afloran. Traga saliva y continúa.- Es momento de deshacerse de la moneda.. estar expuesto me consume. De no usarla en favor vuestra la entregaré por futuro trato. Conocer las vulnerabilidades de Chack acerca posturas con él. Quizá sea momento de separar caminos y presentarle cordialidades en su refugio temporal.
Cuando Godric le entrega los pagarés el aasimar los mira con desprecio. Asuntos de poderosos que solo extienden sus tentáculos aplastando y oprimiendo. Los arroja al interior del cofre dejando sobre la mesa el amuleto con la forma de cabeza de gato y falto de un ojo. De otro bolsillo que no lo parecía sacó la moneda que tanto había reclamado Chack, la ex-Sombra. Del pequeño petate saca las nueve barras de plata pura, botín reclamado por Sambalet.
-Necesitaré una aunque seguro me sobre, si la necesitamos. Las taso en 100 oros cada una.- y las dejó en el interior del cofre aún sin cerrar.-Y un amuleto de la suerte que seguro os resulta útil. Con pausa he posido además valorar las peculiaridades del majestuoso acero arrebatado al capitán del Fantasma.. Fabulosa arma, poderosa contra criaturas de la mar y con control sobre las aguas. Me considero la mejor baza para exprimir su potencial.-dijo sin duda alguna de la certeza de sus palabras y pensamientos, sin egoísmo aparente.
Se acercó entonces al humano mayor para dirigirle unas dedicadas palabras, ajeno a que el resto les escuchara o no. Sus ojos todo azul, sin iris ni pupilas miraron directamente al veterano caballero.-No debes faltar a tu deber y alertar a Ghostfinger del complot y la conspiración que sobre todos nosotros se cierne.. por mucho que manche el "buen nombre" de una familia. Guardo lealtad a mis camaradas como has visto pero no pondré en juego cientos de vidas por evitar la mácula de un apellido ajeno.
Una vez fuera ensilló el purasangre con meticulosidad, como un ritual lleno de respeto hacia el bravo animal, quizá empatizando desde su divina naturaleza. A las puertas de Saltmarsh separó caminos de sus compañeros- Entregaré la moneda y trataré de obtener información sobre tu perseguidor. Nos vemos a vuestra vuelta antes de la fiesta.- Y tomo rumbo contrario a sus compañeros.
Antes de salir a Ghosfinger:
- Confundes mi breve tiempo pasado en la Corte con un nacimiento privilegiado o sangre noble en mis venas. Ni lo uno ni lo otro. Si piensas que los callos de mis manos son de satisfacerme a mí mismo, deberías pensarlo dos veces. Hablas de yugos y opresión pero tus propios prejuicios nublan tu juicio amigo mio. Puedo comprender, y hasta compartir en ocasiones, tu desprecio por los nobles, pero estigmatizar a todo un colectivo por las malas acciones de unos de sus miembros creo que es injusto. Lo que no puedes negar es que la Corona nos tiene a todos prisioneros ahora. Estas aquí porque cumples una condena. Tus habilidades han hecho que en lugar de pudrirte en una celda estes aqui manejando una espada y dejando lingotes de plata en un cofre. Pero seguimos siendo reos. -
Godric suspira
- Os propongo una votación. Puedo hacerme cargo de todos los papeles - dice viendo que Khalion desprecia los que le ha ofrecido - y entregarlos a Bastianes cuando lleguemos a Ghostfinger. Creo que va siendo hora de que me haga responsable de los asuntos que nos atañen, como hacéis vosotros, o tú mismo, Khalion al encargarte del asunto de la moneda. Sinceramente opino que hacemos bien entregándolos a Bastianes, no lo veo como perder una baza, parafraseando a Khalion, si no, al contrario, ganarla con quienes deben decidir sobre nuestro futuro inmediato. Además de alejarnos lo máximo posible de maquinaciones cortesanas. Opino que ya tenemos bastante entre manos como para involucrarnos en la política local más de lo que ya nos vemos involucrados. Que sea Bastianes quien decida qué hacer con los títulos y pagares. ¿Qué opinais el resto? ¿Aceptas una votación entre todos Khalion, ya que lo que hacemos entre todos afecta a los demás? -
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Terminando en la posada antes de marchar.
-Los pecados de juventud como la juventud misma se curan con el tiempo.-aunque su rostro aasimar no mostraba el paso del tiempo usaba un tono paternalista marcado por la experiencia- No eres de los suyos ni verán un igual en ti.. pero entiendo que te fascine. Es difícil resistir la tentación y atracción por lo prohibido y no parece ser hecho aislado -mirando al pequeño socio alado del sacerdote.- Los prejucios no son los míos.. yo no te juzgaré por tu nombre o ascendencia. La ley de los hombres si lo hará y deparará diferente destino según tu cuna.
Batalla ciertamente perdida y huérfano de apoyo entre el resto de agentes Khalion suspiró por le necedad que sea apoderaba del grupo. Cerró la pequeña mochila donde guardaba algunos de los útiles y herramientas de su oficio, mas ligero ahora que no portaba la plata de todos, tendió una de las cimitarras que ahora le sobraban a Nadie y enrolló el látigo para asegurarlo al cinto. Tomó por último la moneda maldita de la mesa ante la falta de portador voluntario ni fin en que usarla con la determinación de entregarla por futuras ayudas. Deshacerse ràpido de ella, antes de que apreciaran algún valor en ella.
-Entre las palabras y los actos te traicionas. Te reconoces reo pero actúas como si compartieras intereses. Eres desechable, despreciable e insignificante para ellos como los anteriores grupos con cero supervivientes. Pronto compras el término "agente" con el que nos llaman para enmascarar la realidad y lo asumes como propio. Si crees que entregando esos papeles conseguirás trato de favor o que cambiarán tu destino.. adelante. Desgraciadamente nuestros caminos no difieren de los que perecieron en los pantanos con sus bonitas cintas doradas al brazo. Llévalos, guárdalos o dáselos a tu pequeño acompañante, quien los porte es igual. Tan solo reconsiderar que lograreis mas allá de las caricias que le darías a tu perro cuando te trae el palo que le has arrojado.
Parece que Godric quiere responder a casi cada frase acusatoria del Aasimar. Pero el antiguo cazarrecompensas no hace pausas en su discruso.
"Ni verán un igual en ti" - Pero si yo no pretend.. -
"Atracción por lo prohibido" - Yo no tengo atracción por... -
"Los prejuicios no son.. " - Pero si antes me has llamad... -
"Actúas como si compartieras intereses " - No es eso.. es que no me import.. aaggh -
"Compras el término "agente".. - venga ya... si era por no repetirm... -
"Cambiarán tu destino... " - Cambiarlo no, pero sí conseguirlo antes.
"Que perecieron en el pantano" - Por cierto! respecto a eso creo que ahora pued... -
Finalmente se rinde y deja terminar a Khalion. Percatándose de que el usualmente enmascarado guerrero ha expuesto sus sentimientos de manera inteligible.
- Me gustaría que vieras las cosas de otro modo, y que pensaras que, pese a todo, hay redención para todos nosotros. No sólo a los ojos de las leyes que, reconozcamos o no, nos rigen a todos, si no de los dioses. Espero demostrarte que aún hay esperanza, al menos consiguiendo conmutar nuestra condena, para que luego cada uno pueda seguir su camino. Ya que algunos de vosotros os empeñáis en recordarnos que no os importa nada ni nadie salvo vosotros y vuestras ideas.. - esto último lo dice con un claro tono de pena, que no de reproche.
- Gracias Khalion - le dice cuando ya está en la puerta - por dejarme hacer esto de la manera que creo mejor para todos, aunque no estés de acuerdo. -
Mientras los demás se preparan recoge todos los papeles y los guarda en un su zurrón, que tiene cera para evitar que el contenido de sus instrumentos de primeros auxilios se mojen, y se va a su habitación para ponerse su armadura y salir hacia Ghostfinger.
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- Dudo que use los barracones, estare en los campos de practicas hasta que nos reclamen- dijo Mabling mientras sacaba el arco -uno no tiene de estos todos los dias a mano-, añadio mientras salia de las caballerizas.