Martín, que se encuentra de pie apoyado con la espalda pegada a una de las paredes y con su capucha puesta tapando la mitad de su rostro, parece medir cada una de las palabras del paladin de Lathander. Esperando pacientemente a que acabe su petición, el pícaro parece algo nervioso y no deja de acariciar el pomo de su espada con cierta compulsión. Cuando este acabe se decide intervenir justo después de que Morko plantee su muy apropiada pregunta.
- Discúlpeme caballero, a parte de la cuestión logística que ha puesto en la mesa muy sabiamente maese Morko, ¿cual sería el ... beneficio ... que nosotros ... ganaríamos? Nuestra misión principal está relacionada con el Culto, que además mencionas que conoces y que tus sospechas podrían ser ciertas ¿Qué sospechas son esas? No me malinterpretes, no nos importa ayudar a la ciudad, pero me gustaría conocer toda la información de antemano... y sobre todo saber cuanto costará que nos desviemos de nuestro objetivo prioritario.
El pícaro parece hablar rápido y de manera algo torpe, como si no se encontrara cómodo de algún modo, intentando evitar además referirse o dirigirse al extraño elfo que acompaña al paladín.
Cegorach absorto, no hacía más que pensar sobre aquel bardo, pero al notar las discrepancias en el ambiente fomentadas por Morko y Martin volvió a poner los pies en la tierra. Parecía que estaban preocupados por lo arriesgado de la misión propuesta, en este sentido, el místico tenía como meta recavar información relevante en torno al culto y esto lo retrasaría. No obstante, tampoco quería entrometerse en la decisión, si ellos estaban de acuerdo, sus caminos posiblemente se separarían.
Mientras hablaban entre ellos, accedió a la mente del bardo para entablar una "conversación privada". Se concentró y contactó con la mente del bardo.
-Por ahora no puedo alejarme de mis compañeros pero podemos hablar por esta vía, si no te incomoda, ¿qué sucede?
El elegante elfo analizaba en silencio como aquel enano y aquel medio elfo hablaban de intereses personales por encima del bien de la ciudad. Además, estaban ignorando la potencial relación que existía entre el culto y la forma de actuar de los gigantes... No sabía si merecía la pena razonar con ellos dada las evidentes circunstancias que acontecían, pero el paladín parecía interesado en aquellos aventureros.
-Por vuestras palabras, parecéis intimidados por la envergadura de esta misión y más preocupados por vuestros gananciales... ¿acaso vuestros ideales no están por encima de lo material?
Hizo una pausa incómoda mientra les miraba y continuó:
-En relación a las cuestiones específicas sobre esta propuesta, aún no habéis dejado explicar cuales serán los detalles de esta misión. Tal vez, lo más recomendable es dejar primero hablar, antes de mostrar cierto tipo de actitudes.
Finalizó con cierta condescendencia mientras miraba al paladín para que continuara con su argumento en aras de esclarecer las dudas del grupo.
Morko se vuelve hacia el elfo y le responde con dureza: -No os veo ofreceros voluntario para subir a la fortaleza, así que mejor cierra esa boca, a menos que sea para decir algo útil. Entre mis ideales no está ofrecerme para misiones suicidas que otros no quieren llevar a cabo y menos aún cuando alegan un bien común y ellos no hacen nada. Sois vosotros los que habéis acudido a nosotros, así que al menos muestra respeto.
El elfo volvió su mirada al enano observando sus toscas y equivocadas palabras dejándolo acabar para explicarle.
-De nuevo os adelantáis a las explicaciones y sacáis vuestras conclusiones... Sería interesante dejar finalmente hablar a los que iniciaron esta reunión. Por otro lado, el hecho de mi presencia aquí no es otro que involucrarme en esta misión. Os equivocáis también si habéis intuido en mi una falta de respeto... En absoluto perdería el tiempo en ese tipo de cuestiones.
Dijo mientras esbozaba una cortés sonrisa.
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"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.
-Eres tú el que ha interrumpido, elfo- contesta abruptamente Morko, mientras se vuelve al paladín.-¿Como explicareis que no tenemos nada que ver con la ciudad, si algo sale mal y capturan a un representante de la ciudad?. No se, hay algo aqui que no me acaba de encajar. Espero que podáis explicaros mejor.
- Si me permitís.. -dice Ontarr intentando volver a reconducir la conversación.
- Nuestro invitado - dice haciendo un gesto para indicar al elegante elfo - no es representante de la ciudad. Con vosotros iría Roland para llevar la negociación en caso de que comprobeis que las intenciones del gigante son honestas. Si no lo son... espero que no seáis capturados y que la amenaza contra la ciudad sea eliminada si podéis. Roland me ha hablado muy bien de vuestras habilidades.
Como bien decís Sire - dice hablando a Morko - os procuraremos transporte hasta el castillo y estará disponible para sacaros de allí en caso de que todo se tuerza por supuesto. Y respecto al Culto y sus actividades, sospecho de ellas desde hace tiempo, por eso envié a Roland a ver si podía averiguar algo. Mientras hablamos no sólo preparamos las defensas de la ciudad en caso de que los gigantes ataquen, si no que otros agentes intentan averiguar a dónde han ido los miembros del Culto que escaparon del ataque a Greenest, pero mientras esa información llega, creo que tenemos que ocuparnos de asuntos más apremiantes, como un posible ataque de gigantes.- toma un poco de aire y mira con aire serio a todos los miembros del grupo.
- He acudido a vosotros porque Roland me ha dicho que sois de fiar y lo suficientemente valientes para acometer una hazaña como esta y acompañarle en su intento de encontrar una solución pacífica a esta amenaza. Por supuesto que Elturel recompensaría vuestros esfuerzos, pero no esperaba esta actitud tan... mercernaria. - dice mirando a Martin con algo de decepción - También entiendo que nuestros asuntos no son vuestros asuntos - dice sobretodo mirando a Morko - y ya debería saber que no todos los servidores de los dioses están dispuestos a luchar por el bien mayor, aunque la petición venga de un servidor de un dios aliado. Sabed Sire, que nosotros sí ofreceremos protección a los enanos que residen en nuestra ciudad como siempre hemos hecho. Lo que sí me sorprende es haber vivido para ver un día en que un elfo de Evermeet esté dispuesto a ofrecer su ayuda a una ciudad humana y un enano tenga dudas al respecto... -
Se levanta y se dirige a Roland.
- Lo siento Roland, parece que tendremos que buscar a otros voluntarios para acompañarte a tí y a Gowther en esta misión -
- Sin problema por mi parte. Casi mejor - responde la voz del semi-elfo.
- Ha sido una suerte encontrarte, llevamos unos días buscándote. Entiendo que te has unido a ese grupo de aventureros durante tu inflitración en el Culto.. ¿Qué pudiste averiguar? -
El semi-elfo parecía saber quién era Cegorach y cuál era su misión, y entónces el místico reconoció el sutil y amable contacto telepático y la voz de su viejo amigo del templo Shenrilar. Debía de estar muy desconcentrado para no haberle reconocido antes, ni siquiera con su disfraz. Cegorach le informó de todo lo que había averiguado mientras el enano y el elfo discutían sobre quién era más orgulloso.
- Tenemos una pista que lleva hacia Neverwinter que quizá podrías seguir para no perder la pista al Culto. Entiendo que quizá quieras quedarte con tus amigos y ayudar a la ciudad, si es que finalmente la ayudan por lo que escucho... pero... noto algo distinto en ti amigo mio. ¿Te encuentras bien? El tiempo pasado con el Culto parece haberte pasado factura... -
Martin sintió el comentario ponzoñoso del paladín como una cuchilla atravesando su corazón, en otros tiempos le hubiera importado bastante poco, ¿pero porqué ahora si parecía afectarle? ... Además estaba el misterioso y condescendiente elfo, que iba a acompañarlos a la fortaleza Gigante si aceptaban la misión,... el juramento de La Academia le calló como una pesada losa sobre sus hombros. Ahora no podía negarse.
- Esperad Caballeros, sentimos decepcionarles, quizás hemos actuado de manera precipitada e impetuosa, hemos vivido momentos muy tensos últimamente y estamos aún recuperándonos o enfrentándonos a nuestros demonios internos. Estaremos encantados de colaborar con vosotros y defender a la vez las vidas de todos los inocentes que viven en esta ciudad y que estarían en grave peligro si no eliminamos la amenaza. No puedo hablar por mis compañeros por supuesto, pero contad conmigo. Además no ganamos nada si nos quedamos aquí de brazos cruzados mientras aparecen noticias o pistas sobre el Culto.
El semielfo dio un paso atrás para dejar hablar a sus compañeros, pero puesto que ya estaba apoyado contra la pared, no pudo retroceder más y trastabilló torpemente recuperando el equilibrio en un instante e intentando mantener la dignidad en una pose un poco forzada.
Morko de levanta de su silla y dice al paladin:- No confundas servir al bien al mayor con apuntarse a cualquier aventura sólo porque se invoque el bien mayor. Eso me parece tratar de aprovecharse de la buena gente.-
Sentandose les hace gestos a las sillas vacias y dice:-Explicarlo todo bien y es muy probable que contéis con nuestra ayuda.
- He dicho -dice muy despacio pues parece empezar a sospechar que el enano no entiende bien el común - que es representante de Evermeet, no de Elturel... Sire - añade haciendo referencia a su título, y vuelve a sentarse aceptando el gesto de Morko.
- Por otro lado, aunque no lo parezca la necesidad de la ciudad es grande en estos momentos. Disculpadme si he sonado brusco pero no tenemos tiempo para esto. Roland habla bien de vosotros y confío en su criterio, pero estoy dejando en manos de desconocidos el futuro de la ciudad, no intento aprovecharme de nadie pero no tengo tiempo para intercambiar suspicacias. Entiendo que os habéis visto obligados a tratar con todo tipo de gentuza, pero sabed que ahora estáis en un lugar civilizado hablando con alguien civilizado... al menos yo lo soy -dice intentando sonreir para relajar el ambiente. - Por supuesto intentaré resolver todas las dudas que podáis tener, y tenemos que mucho que planear -
Saca un mapa que extiende sobre la mesa donde puede verse un crudo dibujo de tres estructuras unidas por lo que parecen ser puentes o pasarelas. Las tres estructuras tienen diferentes edificios y torres dibujados, formando un impresionante complejo de la fortaleza flotante.
- Nuestros exploradores han podido dibujar este crudo mapa del castillo. Sospechamos que esta estructura central -dice señalando la misma - es dónde se encuentra el hijo del Conde, pero creemos que para vuestra misión de reconocimiento previo sería mejor entrar por el aviario, dice señalando un edificio en una de las nubes laterales, o por esta otra torre que parece estar muy poco frecuentada -dice señalando una de las torres de la isla de nubes del otro lado - En cualquier caso, y una vez hayáis podido determinar si las intenciones son honestas o no, debéis infiltraros en la estructura principal y encontraros con el hijo del Conde. Recordad que el resto de moradores del castillo cree que vienen a atacarnos, por lo que es conveniente que no os descubran hasta haber dado con él. -
- El hijo del conde,¿sabe que una "delegacion" de la ciudad quiere hablar con él?, ¿ sabemos como identificarle? ¿Tenemos forma de comunicarnoscon vosotros de manera urgente?
Haciendo una pausa dice, como.si se hubiera acordado de algo importante :- ¿Sabemos que tipo de gigantes son?
- Ha sido Olthanas mismo quien ha contactado con nosotros. En su misiva dice que ni el ni su padre desean continuar con los ataques de los gigantes al Norte y expresa sus deseos de hablar con nosotros, pero nos pide que entremos sin ser detectados en su torre por miedo a la reacción de sus tropas y a los espías que puede haber. Al parecer también podemos fiarnos de su mayordomo, Balakar. Estarán esperándoos en la Torre de Audiencias, dice señalando la torre central en la isla central. -suspira - No os voy a mentir, todo esto parece muy sospechoso pero no veo necesidad de montar un engaño así para atraer a un pequeño grupo a su castillo cuando pueden, simplemente, lanzar su ataque desde el aire. Si es cierto que puede haber algunos gigantes dispuestos a que estos ataques se detengan y para eso requieran de nuestra ayuda... creo que merece la pena el riesgo... -
Mira al resto de compañeros y después responde a Morko
- Suponemos que tanto Olthanas como Balakar son gigantes de las nubes, y que la mayoría de sus tropas también lo serán, pero no estamos seguros de si otros están aliados con ellos. En otras ocasiones ha habido grupos mixtos, aunque con mayoría de un grupo de atacantes. Sin embargo el resto de criaturas que suelen servir a los gigantes, sí han sido vistas en todos los ataques, goblins, gnolls, ogros... -
Morko asiente y dice:- Suponfo que el aviario es desde donde lanzan sus ataques, propongo tratar de acceder por la torre.¿Sabemos algo del interior de la fortaleza? Y levantando la cabeza del mapa pregunta:¿cómo subimos y bajamos sin que nos detecten?
Martín escuchaba atentamente hasta que oyó la parte de " por lo que es conveniente que no os descubran hasta haber dado con él. " y no pudo evitar imaginarse a Morko en armadura pesada chirriando por media fortaleza y haciendo salta cada alarma posible, luego observó a Roland y vislumbró lo mismo, pero con el doble de tamaño. Suspiró para si mismo y siguió escuchando sin decir nada.
Sé que os encantan mis aportaciones nulas y mis pensamientos...
Morko no recuerda nada de las tácticas de los gigantes, quizá debería haber prestado más atención en las lecciones del Templo durante sus años de entrenamiento, pero solía estar demasiado ocupado aplastando cráneos de orcos que intentaban entrar a su reino por las minas.
- No lo creo - dice el paladín - suelen lanzar rocas desde sus nubes y luego bajar y acabar con la resistencia que hayan podido quedar tras el bombardeo. Más bien parece un lugar donde guardar sus mascotas. Respecto a cómo subiereis ahí, tenemos dos opciones.- ofrece - Bien podéis ir montados en grifos, o bien podemos subiros con un artefacto gnomo por encima de la fortaleza y que os dejéis caer, activando unos pequeños amuletos que frenarán vuestra caída. Puede que ir montados en grifos sea más seguro, pero la otra opción es más sigilosa. -
Martin interrumpió súbitamente, la mera idea de depender de un artefacto gnomo y luego de nuevo rezar para que unos amuletos frenen una caída al vacío le horrorizaba directamente. Sin embargo montar en tan nobles animales era algo con lo que siempre había soñado.
-Si los amuletos sirven también para bajar, los veo más útiles...en caso de necesitar una salida rápida- dice Morko para añadir mirando a Martin:- además si todo sale bien, seguro que te dejan darte una vuelta. Pero como queráis.
Gowther se limitaba a observarles mientras veía como se habían decantado por involucrarse en la petición del paladín. Mientras comentaban las diferentes vías para acceder al lugar y al escuchar las dos posibles vías, desconfió de la habilidad de los gnomos para realizar aquella hazaña... Si el problema era el sigilo por irrumpir directamente en el lugar con grifos, siempre se podría optar por una opción intermedia...
-Si la dificultad por emplear los grifos se relaciona con la discreción para llegar al castillo, ¿no sería posible combinar ambas opciones? Es decir, sobrevolar el destino con los grifos y luego emplear los amuletos para caer de manera sigilosa.
Dijo Gowther mientras miraba el mapa sin inclinarse sobre el mismo.
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"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.
- ¡Yo me apunto! - Exclama antes de escuchar todos los detalles. - No sólo parece que es una gran aventura sino que además ponernos ayudar a la ciudad... Y una guerra con los gigantes solo puede debilitar las defensas contra los cultistas, posiblemente sea una maniobra de ellos para debilitar la fuerzas del bien!! - Asiente entusiasmado mientras habla.
Martín, que se encuentra de pie apoyado con la espalda pegada a una de las paredes y con su capucha puesta tapando la mitad de su rostro, parece medir cada una de las palabras del paladin de Lathander. Esperando pacientemente a que acabe su petición, el pícaro parece algo nervioso y no deja de acariciar el pomo de su espada con cierta compulsión. Cuando este acabe se decide intervenir justo después de que Morko plantee su muy apropiada pregunta.
- Discúlpeme caballero, a parte de la cuestión logística que ha puesto en la mesa muy sabiamente maese Morko, ¿cual sería el ... beneficio ... que nosotros ... ganaríamos? Nuestra misión principal está relacionada con el Culto, que además mencionas que conoces y que tus sospechas podrían ser ciertas ¿Qué sospechas son esas? No me malinterpretes, no nos importa ayudar a la ciudad, pero me gustaría conocer toda la información de antemano... y sobre todo saber cuanto costará que nos desviemos de nuestro objetivo prioritario.
El pícaro parece hablar rápido y de manera algo torpe, como si no se encontrara cómodo de algún modo, intentando evitar además referirse o dirigirse al extraño elfo que acompaña al paladín.
" ¡Oh la Oscuridad...! "
Cegorach absorto, no hacía más que pensar sobre aquel bardo, pero al notar las discrepancias en el ambiente fomentadas por Morko y Martin volvió a poner los pies en la tierra. Parecía que estaban preocupados por lo arriesgado de la misión propuesta, en este sentido, el místico tenía como meta recavar información relevante en torno al culto y esto lo retrasaría. No obstante, tampoco quería entrometerse en la decisión, si ellos estaban de acuerdo, sus caminos posiblemente se separarían.
Mientras hablaban entre ellos, accedió a la mente del bardo para entablar una "conversación privada". Se concentró y contactó con la mente del bardo.
-Por ahora no puedo alejarme de mis compañeros pero podemos hablar por esta vía, si no te incomoda, ¿qué sucede?
El elegante elfo analizaba en silencio como aquel enano y aquel medio elfo hablaban de intereses personales por encima del bien de la ciudad. Además, estaban ignorando la potencial relación que existía entre el culto y la forma de actuar de los gigantes... No sabía si merecía la pena razonar con ellos dada las evidentes circunstancias que acontecían, pero el paladín parecía interesado en aquellos aventureros.
-Por vuestras palabras, parecéis intimidados por la envergadura de esta misión y más preocupados por vuestros gananciales... ¿acaso vuestros ideales no están por encima de lo material?
Hizo una pausa incómoda mientra les miraba y continuó:
-En relación a las cuestiones específicas sobre esta propuesta, aún no habéis dejado explicar cuales serán los detalles de esta misión. Tal vez, lo más recomendable es dejar primero hablar, antes de mostrar cierto tipo de actitudes.
Finalizó con cierta condescendencia mientras miraba al paladín para que continuara con su argumento en aras de esclarecer las dudas del grupo.
"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.
Morko se vuelve hacia el elfo y le responde con dureza: -No os veo ofreceros voluntario para subir a la fortaleza, así que mejor cierra esa boca, a menos que sea para decir algo útil. Entre mis ideales no está ofrecerme para misiones suicidas que otros no quieren llevar a cabo y menos aún cuando alegan un bien común y ellos no hacen nada. Sois vosotros los que habéis acudido a nosotros, así que al menos muestra respeto.
El elfo volvió su mirada al enano observando sus toscas y equivocadas palabras dejándolo acabar para explicarle.
-De nuevo os adelantáis a las explicaciones y sacáis vuestras conclusiones... Sería interesante dejar finalmente hablar a los que iniciaron esta reunión. Por otro lado, el hecho de mi presencia aquí no es otro que involucrarme en esta misión. Os equivocáis también si habéis intuido en mi una falta de respeto... En absoluto perdería el tiempo en ese tipo de cuestiones.
Dijo mientras esbozaba una cortés sonrisa.
"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.
-Eres tú el que ha interrumpido, elfo- contesta abruptamente Morko, mientras se vuelve al paladín.-¿Como explicareis que no tenemos nada que ver con la ciudad, si algo sale mal y capturan a un representante de la ciudad?. No se, hay algo aqui que no me acaba de encajar. Espero que podáis explicaros mejor.
- Si me permitís.. - dice Ontarr intentando volver a reconducir la conversación.
- Nuestro invitado - dice haciendo un gesto para indicar al elegante elfo - no es representante de la ciudad. Con vosotros iría Roland para llevar la negociación en caso de que comprobeis que las intenciones del gigante son honestas. Si no lo son... espero que no seáis capturados y que la amenaza contra la ciudad sea eliminada si podéis. Roland me ha hablado muy bien de vuestras habilidades.
Como bien decís Sire - dice hablando a Morko - os procuraremos transporte hasta el castillo y estará disponible para sacaros de allí en caso de que todo se tuerza por supuesto. Y respecto al Culto y sus actividades, sospecho de ellas desde hace tiempo, por eso envié a Roland a ver si podía averiguar algo. Mientras hablamos no sólo preparamos las defensas de la ciudad en caso de que los gigantes ataquen, si no que otros agentes intentan averiguar a dónde han ido los miembros del Culto que escaparon del ataque a Greenest, pero mientras esa información llega, creo que tenemos que ocuparnos de asuntos más apremiantes, como un posible ataque de gigantes. - toma un poco de aire y mira con aire serio a todos los miembros del grupo.
- He acudido a vosotros porque Roland me ha dicho que sois de fiar y lo suficientemente valientes para acometer una hazaña como esta y acompañarle en su intento de encontrar una solución pacífica a esta amenaza. Por supuesto que Elturel recompensaría vuestros esfuerzos, pero no esperaba esta actitud tan... mercernaria. - dice mirando a Martin con algo de decepción - También entiendo que nuestros asuntos no son vuestros asuntos - dice sobretodo mirando a Morko - y ya debería saber que no todos los servidores de los dioses están dispuestos a luchar por el bien mayor, aunque la petición venga de un servidor de un dios aliado. Sabed Sire, que nosotros sí ofreceremos protección a los enanos que residen en nuestra ciudad como siempre hemos hecho. Lo que sí me sorprende es haber vivido para ver un día en que un elfo de Evermeet esté dispuesto a ofrecer su ayuda a una ciudad humana y un enano tenga dudas al respecto... -
Se levanta y se dirige a Roland.
- Lo siento Roland, parece que tendremos que buscar a otros voluntarios para acompañarte a tí y a Gowther en esta misión -
- Sin problema por mi parte. Casi mejor - responde la voz del semi-elfo.
- Ha sido una suerte encontrarte, llevamos unos días buscándote. Entiendo que te has unido a ese grupo de aventureros durante tu inflitración en el Culto.. ¿Qué pudiste averiguar? -
El semi-elfo parecía saber quién era Cegorach y cuál era su misión, y entónces el místico reconoció el sutil y amable contacto telepático y la voz de su viejo amigo del templo Shenrilar. Debía de estar muy desconcentrado para no haberle reconocido antes, ni siquiera con su disfraz. Cegorach le informó de todo lo que había averiguado mientras el enano y el elfo discutían sobre quién era más orgulloso.
- Tenemos una pista que lleva hacia Neverwinter que quizá podrías seguir para no perder la pista al Culto. Entiendo que quizá quieras quedarte con tus amigos y ayudar a la ciudad, si es que finalmente la ayudan por lo que escucho... pero... noto algo distinto en ti amigo mio. ¿Te encuentras bien? El tiempo pasado con el Culto parece haberte pasado factura... -
PbP Character: A few ;)
Martin sintió el comentario ponzoñoso del paladín como una cuchilla atravesando su corazón, en otros tiempos le hubiera importado bastante poco, ¿pero porqué ahora si parecía afectarle? ... Además estaba el misterioso y condescendiente elfo, que iba a acompañarlos a la fortaleza Gigante si aceptaban la misión,... el juramento de La Academia le calló como una pesada losa sobre sus hombros. Ahora no podía negarse.
- Esperad Caballeros, sentimos decepcionarles, quizás hemos actuado de manera precipitada e impetuosa, hemos vivido momentos muy tensos últimamente y estamos aún recuperándonos o enfrentándonos a nuestros demonios internos. Estaremos encantados de colaborar con vosotros y defender a la vez las vidas de todos los inocentes que viven en esta ciudad y que estarían en grave peligro si no eliminamos la amenaza. No puedo hablar por mis compañeros por supuesto, pero contad conmigo. Además no ganamos nada si nos quedamos aquí de brazos cruzados mientras aparecen noticias o pistas sobre el Culto.
El semielfo dio un paso atrás para dejar hablar a sus compañeros, pero puesto que ya estaba apoyado contra la pared, no pudo retroceder más y trastabilló torpemente recuperando el equilibrio en un instante e intentando mantener la dignidad en una pose un poco forzada.
" ¡Oh la Oscuridad...! "
Morko de levanta de su silla y dice al paladin:- No confundas servir al bien al mayor con apuntarse a cualquier aventura sólo porque se invoque el bien mayor. Eso me parece tratar de aprovecharse de la buena gente.-
Sentandose les hace gestos a las sillas vacias y dice:-Explicarlo todo bien y es muy probable que contéis con nuestra ayuda.
Ontarr mira a Martin y después a Morko.
- He dicho - dice muy despacio pues parece empezar a sospechar que el enano no entiende bien el común - que es representante de Evermeet, no de Elturel... Sire - añade haciendo referencia a su título, y vuelve a sentarse aceptando el gesto de Morko.
- Por otro lado, aunque no lo parezca la necesidad de la ciudad es grande en estos momentos. Disculpadme si he sonado brusco pero no tenemos tiempo para esto. Roland habla bien de vosotros y confío en su criterio, pero estoy dejando en manos de desconocidos el futuro de la ciudad, no intento aprovecharme de nadie pero no tengo tiempo para intercambiar suspicacias. Entiendo que os habéis visto obligados a tratar con todo tipo de gentuza, pero sabed que ahora estáis en un lugar civilizado hablando con alguien civilizado... al menos yo lo soy - dice intentando sonreir para relajar el ambiente. - Por supuesto intentaré resolver todas las dudas que podáis tener, y tenemos que mucho que planear -
Saca un mapa que extiende sobre la mesa donde puede verse un crudo dibujo de tres estructuras unidas por lo que parecen ser puentes o pasarelas. Las tres estructuras tienen diferentes edificios y torres dibujados, formando un impresionante complejo de la fortaleza flotante.
- Nuestros exploradores han podido dibujar este crudo mapa del castillo. Sospechamos que esta estructura central - dice señalando la misma - es dónde se encuentra el hijo del Conde, pero creemos que para vuestra misión de reconocimiento previo sería mejor entrar por el aviario, dice señalando un edificio en una de las nubes laterales, o por esta otra torre que parece estar muy poco frecuentada - dice señalando una de las torres de la isla de nubes del otro lado - En cualquier caso, y una vez hayáis podido determinar si las intenciones son honestas o no, debéis infiltraros en la estructura principal y encontraros con el hijo del Conde. Recordad que el resto de moradores del castillo cree que vienen a atacarnos, por lo que es conveniente que no os descubran hasta haber dado con él. -
PbP Character: A few ;)
- El hijo del conde,¿sabe que una "delegacion" de la ciudad quiere hablar con él?, ¿ sabemos como identificarle? ¿Tenemos forma de comunicarnoscon vosotros de manera urgente?
Haciendo una pausa dice, como.si se hubiera acordado de algo importante :- ¿Sabemos que tipo de gigantes son?
- Ha sido Olthanas mismo quien ha contactado con nosotros. En su misiva dice que ni el ni su padre desean continuar con los ataques de los gigantes al Norte y expresa sus deseos de hablar con nosotros, pero nos pide que entremos sin ser detectados en su torre por miedo a la reacción de sus tropas y a los espías que puede haber. Al parecer también podemos fiarnos de su mayordomo, Balakar. Estarán esperándoos en la Torre de Audiencias, dice señalando la torre central en la isla central. - suspira - No os voy a mentir, todo esto parece muy sospechoso pero no veo necesidad de montar un engaño así para atraer a un pequeño grupo a su castillo cuando pueden, simplemente, lanzar su ataque desde el aire. Si es cierto que puede haber algunos gigantes dispuestos a que estos ataques se detengan y para eso requieran de nuestra ayuda... creo que merece la pena el riesgo... -
Mira al resto de compañeros y después responde a Morko
- Suponemos que tanto Olthanas como Balakar son gigantes de las nubes, y que la mayoría de sus tropas también lo serán, pero no estamos seguros de si otros están aliados con ellos. En otras ocasiones ha habido grupos mixtos, aunque con mayoría de un grupo de atacantes. Sin embargo el resto de criaturas que suelen servir a los gigantes, sí han sido vistas en todos los ataques, goblins, gnolls, ogros... -
PbP Character: A few ;)
Morko asiente y dice:- Suponfo que el aviario es desde donde lanzan sus ataques, propongo tratar de acceder por la torre.¿Sabemos algo del interior de la fortaleza? Y levantando la cabeza del mapa pregunta:¿cómo subimos y bajamos sin que nos detecten?
Morko haz una tirada de historia.
PbP Character: A few ;)
Historia:0
Martín escuchaba atentamente hasta que oyó la parte de " por lo que es conveniente que no os descubran hasta haber dado con él. " y no pudo evitar imaginarse a Morko en armadura pesada chirriando por media fortaleza y haciendo salta cada alarma posible, luego observó a Roland y vislumbró lo mismo, pero con el doble de tamaño. Suspiró para si mismo y siguió escuchando sin decir nada.
Sé que os encantan mis aportaciones nulas y mis pensamientos...
" ¡Oh la Oscuridad...! "
Morko no recuerda nada de las tácticas de los gigantes, quizá debería haber prestado más atención en las lecciones del Templo durante sus años de entrenamiento, pero solía estar demasiado ocupado aplastando cráneos de orcos que intentaban entrar a su reino por las minas.
- No lo creo - dice el paladín - suelen lanzar rocas desde sus nubes y luego bajar y acabar con la resistencia que hayan podido quedar tras el bombardeo. Más bien parece un lugar donde guardar sus mascotas. Respecto a cómo subiereis ahí, tenemos dos opciones. - ofrece - Bien podéis ir montados en grifos, o bien podemos subiros con un artefacto gnomo por encima de la fortaleza y que os dejéis caer, activando unos pequeños amuletos que frenarán vuestra caída. Puede que ir montados en grifos sea más seguro, pero la otra opción es más sigilosa. -
PbP Character: A few ;)
- ¡¡Voto por grifos...!!
Martin interrumpió súbitamente, la mera idea de depender de un artefacto gnomo y luego de nuevo rezar para que unos amuletos frenen una caída al vacío le horrorizaba directamente. Sin embargo montar en tan nobles animales era algo con lo que siempre había soñado.
- Perdón, continuad...
" ¡Oh la Oscuridad...! "
-Si los amuletos sirven también para bajar, los veo más útiles...en caso de necesitar una salida rápida- dice Morko para añadir mirando a Martin:- además si todo sale bien, seguro que te dejan darte una vuelta. Pero como queráis.
Gowther se limitaba a observarles mientras veía como se habían decantado por involucrarse en la petición del paladín. Mientras comentaban las diferentes vías para acceder al lugar y al escuchar las dos posibles vías, desconfió de la habilidad de los gnomos para realizar aquella hazaña... Si el problema era el sigilo por irrumpir directamente en el lugar con grifos, siempre se podría optar por una opción intermedia...
-Si la dificultad por emplear los grifos se relaciona con la discreción para llegar al castillo, ¿no sería posible combinar ambas opciones? Es decir, sobrevolar el destino con los grifos y luego emplear los amuletos para caer de manera sigilosa.
Dijo Gowther mientras miraba el mapa sin inclinarse sobre el mismo.
"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.
Zevatur da un golpe sobre la mesa.
- ¡Yo me apunto! - Exclama antes de escuchar todos los detalles. - No sólo parece que es una gran aventura sino que además ponernos ayudar a la ciudad... Y una guerra con los gigantes solo puede debilitar las defensas contra los cultistas, posiblemente sea una maniobra de ellos para debilitar la fuerzas del bien!! - Asiente entusiasmado mientras habla.
Zevatur, Rolthos