Ash mira a Zevatur y Gowther cuando los demás salen por la puerta.
-¿Dais crédito a esas visiones? No inspiran confianza la verdad, no tienen ningún sentido. ¿Y que le pasa a Martín? ¿Porqué pierde el culo por unas botas? Si casi no se tiene en pie. ¿Tu sabes algo Gowther? Si fuera una espada lo entendería, pero unas botas...
El grupo llega rápidamente a la tienda del artesano y estudioso de la Magia gracias a las indicaciones de Gowther.
La casa de dos alturas parece tener dedicada la plantase abajo a la tienda y tiene un pequeño laboratorio anexo a un lado por el que intuyen que se accede desde dentro.
-Buenos días y bienhallados- dice animado un joven humano vestido con un jubón de cuero con varios bolsillos en los que hay pequeñas herramientas de metal y varios carboncillos para tomar nota. De echo el joven parece estar haciendo algún dibujo en un papel.
Su pelo despeinado y restos de carboncillo en su rostro le dan un aspecto algo despistado pero entrañable.
Zevatur mira con cierta ansiedad a Martín mientras relata su visión... Luego mientras sale de la posada mira a Ash. - dragones y seres demoníacos... Parece que hablaba de mis ancestros... - Un escalofrío le recorre la espalda. - Yo solo puedo sacar en claro que posiblemente resistencia al fuego y algo para sobrevivir en el agua serían cosas convenientes. Tu anillo de andar por el agua, por ejemplo... No te deshagas de el... Y las botas de andar por las paredes y techos... Yo creo que las botas que tiene le dan una ventaja increíble el habitaciones, mazmorras y cuevas... Pero quizás en espacios abiertos no sean tan versátiles. Yo estaría yendo por las paredes todo el rato.
Después sale rápido de la posada, siguiendo los pasos del resto. - Quizás pueda llegar yo a un bien acuerdo por las botas. - dice con la respiración agitada.
Buenos días! - dice alegre zevatur - Nuestro compañero nos ha comentado que tenéis unas buenas botas que quizás nos podrían interesar - Luego le ofrece la mano. - Soy Zevatur. Un placer visitar la tienda. - Dice mirando un poco alrededor.
Al ver la actitud de Martin, Gowther entendió que había pasado factura su apuesta con el futuro.
Cuando Ash preguntó al respecto, el eladrin le explicó:
-Me temo que vuestro compañero ha pretendido jugar con temas que se escapan de sus manos y las consecuencias ya han hecho mella en el. Necesito averiguar algo. Luego me reuniré con vosotros.
Al verles salir del establecimiento, acudió al lugar de aquella misteriosa vidente para averiguar cuales fueron las consecuencias y si había posibilidad de solucionar lo que le sucedía al mestizo.
Martin observa la tienda con curiosidad, y medio sonríe al joven humano de aspecto desaliñado que regenta la tienda cuando les recibe. Sin embargo consciente de que anda un poco "tocado" por el desayuno y que sus habilidades sociales no son su fuerte en general, permanece en un silencio forzado dejando intervenir a sus compañeros.
Discretamente se apoya sobre una de las paredes del establecimiento para mantener mejor el equilibrio.
Gowther se separa de nuevo del grupo para ir a comprobar si la situación de su compañero es reversible. Al llegar al lugar donde la noche anterior estaba la tienda en la que conoció a la misteriosa vidente esta mañana no hay nada, ni tan sólo la hierba aplastada donde se levantaba el pabellón anoche.
- ¿Su compañero? ah! ese elfo tan amable que vino ayer a última hora. ¿Las botas dice? hmmm sí un momento, en seguida las traigo. -
Pese a sus palabras el hombre se queda mirando a Zevatur más de lo que es educado, o cómodo, hasta que se da cuenta y, enrojeciendo, se va por la trastienda hacia el anexo que vieron desde fuera y que seguramente sea su laboratorio. Vuelve apenas medio minuto después y deja sobre el mostrador un par de botas de cuero negras rematadas por unas plumas negras de cuervo.
Martin las reconoce de inmediato.
- Estas botas son las que le mostré a su amigo ayer. ¿Les interesan? -
-Ni hablar, voy contigo socio -comenta al eladrim cuando se pone a su altura- estoy harto de calentar la silla. Además tenemos que hablar del cierto anillo que hace juego con mis ojos. Veo que no lo llevas puesto, quizá no te importe que lo luzca yo. En un bolsillo no ayuda a nadie.
Cuando llegan al lugar dónde Gowther se dirigía, Ash le observa sin entender.
Gowther al ver el interés del humano sobre el anillo mágico para andar sobre el agua, se lo dio sin problemas.
-Claro, si crees que necesitas este tipo de objetos puedes tomarlo.
Después darle el anillo y ver que la tienda de la vidente ya no estaba:
-Me temo que lo que le pasó a Martin se escapa un poco de nuestras manos y lo que es peor, no se si seremos capaces de revertirlo... Tal vez, si consiguiera algún hechizo adecuado, podría intentar disiparlo, pero bueno, en cualquier caso, el pícaro no debió confiarse ante un ser tan extraño como el que aquí estaba.
Tras esto, Gowther miró las armas del humano y le dijo:
-Podríamos pasar por algún herrero a ver si encuentras algún arma de interés... Más que anillos como este, te puede interesar un arma que te aporte más potencia en el combate. El grupo parece estar ocupado...
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"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.
-¡Ah, gracias! ¡Buena idea! - dijo tras ponerse el anillo y disfrutar de su lustre por un momento- ¡Una buena espada nunca sobra! ¡Vamos amigo! Y me cuentas eso del extraño camello de Martín, ¿era un mago?
Rumbo a la armería se pierden por las calles de la ciudad.
La armería no está lejos de donde se encuentran, es un edificio que está algo separado de los demás, con la zona de la fragua abierta al aire libre. Dentro varios aspirantes a herreros están ocupados en diferentes trabajos. Herraduras, yugos, clavos, etc.
Un voluminoso anciano humano parece supervisar todo con ojo crítico desde una silla cerca de la fragua. Uno de los ayudantes le muestra una vara de metal y el maestro herrero se la acerca para verla bien, tras inspeccionarla durante unos momentos asiente y se la devuelve al aprendiz, el cual se va a hacer otro trabajo. El ruido de los martillos golpeando el metal llena el espacio.
Uno de los ayudantes les pregunta
- Bienhallados ¿Puedo ayudarles en algo? -
Tras indicarle que buscan espadas el muchacho se disculpa un momento y va a hablar con el maestro el cual les mira y les hace un gesto para que se acerquen.
- Bien bien, clientes. Siempre es bueno tener algún cliente de verdad y no sólo esos racanos granjeros. ¿Espadas me ha dicho Ronny? Ahora les traerá lo que tenemos. No hay mucha demanda de espadas últimamente, aunque con todo lo que se oye sobre dragones atacando ciudades y gigantes campando por sus anchas supongo que eso cambiará dentro de poco jejejeje. Aunque no sé si estos imberbes - Ash se da cuenta de que la mayoría de sus ayudantes o aprendices son hombres hechos y derechos y que muchos de ellos llevan pobladas barbas para protegerse las caras del calor de la fragua y el metal - están preparados para hacer algo tan complicado como una hoja... cuidado Ronny!!! Muchacho bueno para nada... -
El chico llamado Ronny tropieza con una de las espadas que porta, lleva al menos cinco en sus brazos y apenas puede sujetarlas, y se cae estrepitósamente al suelo al enredarse una de ellas entre sus piernas.
- Perdón, disculpen perdón - dice el muchacho avergonzado mientras va recogiendo las espadas y las deja encima de la mesa, mientras el maestro le mira reprobatoriamente.
Dos espadas largas, una corta, una cimitarra y un mandoble (el que causó la caída de Ronny) se alinean en la mesa.
Una simple mirada le confirma a Gowther que ninguna posee propiedades mágicas.
El semielfo parece reconocer las botas casi de inmediato y se acerca rápidamente como si parte de su aturdimiento hubiera desaparecido repentinamente. Con cierta admiración las toca con sumo cuidado, con unos dedos que asoman de unos mitones de cuero ennegrecido, comienza a acariciar las plumas negras de las botas mientras asiente inconscientemente con la cabeza.
- Aquí están... exactamente como las vi ... eso significa que hay un destino ... y todo ello me llevará a ese momento, en ese lugar de ceniza y muerte...
Tras salir de su extraño trance, Martin vuelve a sonreír algo forzadamente esta vez al vendedor.
- Estoy más que interesado honrado mercader... ¿por cuanto las vendería?
- Bueno.. la verdad es que llevo bastante tiempo queriendo venderlas, pero quizá el precio que pido es muy alto. 4.500 monedas de oro, pero ¿quizá podamos hacer algún tipo de intercambio? - dice mirando a Zevatur.
- Disculpe pero, debo preguntárselo. ¿Eso son escamas? - dice señalando sus escamas que revelan su ancestro dracónico.
Herreria:
- Entonces ¿ para qué demonios me hacéis perder el tiempo? - se queja el maestro herrero y con un gruñido y un gesto ordena a Ronny recoger la mercancía.
Con cierta aprension Zevatur se acerca al hombre del pelo revuelto. - Así es.... En algún lugar de mi línea de ancestros imagino que hubo un dragón rojo que me ha dado estás escamas y ciertas habilidades mágicas. - Su expresión refleja los pensamientos sobre su origen y la influencia maligna que pueda tener en su destino. Se remanga el brazoy se lo ofrece al hombre para que lo examine. Con una mirada y un leve gesto de cabeza hacia Martín le indica que no se preocupe.
Los ojos del joven se iluminan con emoción. Veis verdadero interés en él, pero nada de segundas intenciones ni maldad.
- Oh! ¿Puedo? Es realmente interesante. - se ajusta los anteojos y se acerca a observar el brazo de Zevatur.
- Es... - extiende una mano casi inconscientemente - ... precioso... impresionante...- dice levantando la vista y sonrojándose un poco al recordar que está hablando de alguien vivo que está ahí mismo - esto.. perdonad es que nunca había encontrado a alguien con vuestras características. ¿Y decís que esta herencia os ha conferido poderes mágicos? Fascinante! ¿Os importaría si tomo algunas notas? -
Martin al sentirse totalmente ignorado por el mercader que está centrando toda su atención en Zevatur, vuelve a dejar las botas en su sitio, su pregunta en el aire, y se retira a un segundo plano de nuevo, dejando al Tiefling el tema de las negociaciones ...
El entusiasmo del hombre le produce cierta disonancia a Zevatur. Siempre ha renegado de su herencia, aunque no del poder que le ha conferido. Esa vergüenza choca disonantemente con el orgullo que el hombre le está haciendo sentir y cuando está a punto de acceder sus ojos se posan sobre las botas... - Siempre he dudado si era la herencia demoniaca la que me daba control sobre el fuego, pero ahora creo que es la de dragón la que domina mi control sobre la magia y el fuego. - Dice mientras retira el brazo del hombre. - Quizás sea una combinación de ambas.... - Concluye.
- Quizás podamos llegar a un acuerdo que incluya esas botas que no paran de coger polvo y ocupar espacio en la tienda?
- Claro, claro, por supuesto. - Parece que tiene algo en mente pero se pone completamente rojo al pensarlo. Carraspea, se recoloca los anteojos y finalmente habla.
- Como he dicho el precio de las botas son 4500 monedas. Estoy dispuesto a bajarlo hasta 1500 monedas a cambio de... - se pone casi tan rojo como la piel de Zevatur - un pequeño vial de su sangre. No se alarme por favor, pero me vendría estupendamente bien poder estudiarla. Mis investigaciones han llegado a un punto muerto me temo y necesito este tipo de material para poder avanzar. Lo había descartado, por supuesto, pero quizá si fuera tan amable de darlo voluntariamente como parte de un cambio justo... -
mira al resto y casi de manera atropellada dice.
- Incluiría dos pociones de curación en el trato. Las guardo para mi uso personal, pero de esa forma podría curarse la pequeña incisión necesaria y... cualquier otra molestia-
Aunque está avergonzado parece esperanzado de que Zevatur acepte.
-Espera espera socio, dejame ver, el acero no encantado también mata
Ash examina la distribución del peso haciendo equilibrar la hojas sobre su indice. Aprecia la rectitud del alma de la hoja mirando desde la guarda. Se acerca las hojas al oído y las golpea ligeramente con su anillo, escuchando su canto. Blande ambas armas y sonríe decantándose finalmente por una de ellas, que resulta ser la más sencilla de las dos.
-Me llevó esta - sonrie al viejo- fea y sosa pero fiable y recia, me recuerda a Adele, una molinera de Candelero que hacía maravillas con su trasero. Oh! No subestimes a las molineras Gowther, sus maridos se pasan el día moliendo cuando el mejor grano lo tiene en casa.
Paga la espada mientras hace gestos obscenos como si agarrarse algo.
-Chicas, saludad a Adele, nos pongáis celosas - guarda el arma a su espalda- y ahora Gowther será mejor buscar al resto antes de que se metan en líos.
Gowther parece no acabar de comprender las palabras del extraño humano, aunque tampoco había cruzado el plano para comprender todos los entresijos de las otras razas.
-Si es lo que estás buscando me alegro. ¿Vamos?
Tras la compra de la espada, Gowther fue con Ash a la tienda de objetos mágicos.
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"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.
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Ash mira a Zevatur y Gowther cuando los demás salen por la puerta.
-¿Dais crédito a esas visiones? No inspiran confianza la verdad, no tienen ningún sentido. ¿Y que le pasa a Martín? ¿Porqué pierde el culo por unas botas? Si casi no se tiene en pie. ¿Tu sabes algo Gowther? Si fuera una espada lo entendería, pero unas botas...
El guerrero acaba su desayuno.
Ash el guerrero — Dragon's Hoard (Spanish)
Leobald el caballero — Death and Pain at Saltmarsh (Spanish)
Keeper — Vigilantes en el Cielo (Spanish)
Remington Wizz — Shadow of the Dragon Queen (Spanish)
El grupo llega rápidamente a la tienda del artesano y estudioso de la Magia gracias a las indicaciones de Gowther.
La casa de dos alturas parece tener dedicada la plantase abajo a la tienda y tiene un pequeño laboratorio anexo a un lado por el que intuyen que se accede desde dentro.
-Buenos días y bienhallados- dice animado un joven humano vestido con un jubón de cuero con varios bolsillos en los que hay pequeñas herramientas de metal y varios carboncillos para tomar nota. De echo el joven parece estar haciendo algún dibujo en un papel.
Su pelo despeinado y restos de carboncillo en su rostro le dan un aspecto algo despistado pero entrañable.
- En qué puedo ayudarles? - pregunta sonriendo.
PbP Character: A few ;)
Zevatur mira con cierta ansiedad a Martín mientras relata su visión... Luego mientras sale de la posada mira a Ash. - dragones y seres demoníacos... Parece que hablaba de mis ancestros... - Un escalofrío le recorre la espalda. - Yo solo puedo sacar en claro que posiblemente resistencia al fuego y algo para sobrevivir en el agua serían cosas convenientes. Tu anillo de andar por el agua, por ejemplo... No te deshagas de el... Y las botas de andar por las paredes y techos... Yo creo que las botas que tiene le dan una ventaja increíble el habitaciones, mazmorras y cuevas... Pero quizás en espacios abiertos no sean tan versátiles. Yo estaría yendo por las paredes todo el rato.
Después sale rápido de la posada, siguiendo los pasos del resto. - Quizás pueda llegar yo a un bien acuerdo por las botas. - dice con la respiración agitada.
Buenos días! - dice alegre zevatur - Nuestro compañero nos ha comentado que tenéis unas buenas botas que quizás nos podrían interesar - Luego le ofrece la mano. - Soy Zevatur. Un placer visitar la tienda. - Dice mirando un poco alrededor.
Zevatur, Rolthos
Al ver la actitud de Martin, Gowther entendió que había pasado factura su apuesta con el futuro.
Cuando Ash preguntó al respecto, el eladrin le explicó:
-Me temo que vuestro compañero ha pretendido jugar con temas que se escapan de sus manos y las consecuencias ya han hecho mella en el. Necesito averiguar algo. Luego me reuniré con vosotros.
Al verles salir del establecimiento, acudió al lugar de aquella misteriosa vidente para averiguar cuales fueron las consecuencias y si había posibilidad de solucionar lo que le sucedía al mestizo.
"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.
Martin observa la tienda con curiosidad, y medio sonríe al joven humano de aspecto desaliñado que regenta la tienda cuando les recibe. Sin embargo consciente de que anda un poco "tocado" por el desayuno y que sus habilidades sociales no son su fuerte en general, permanece en un silencio forzado dejando intervenir a sus compañeros.
Discretamente se apoya sobre una de las paredes del establecimiento para mantener mejor el equilibrio.
" ¡Oh la Oscuridad...! "
Gowther se separa de nuevo del grupo para ir a comprobar si la situación de su compañero es reversible. Al llegar al lugar donde la noche anterior estaba la tienda en la que conoció a la misteriosa vidente esta mañana no hay nada, ni tan sólo la hierba aplastada donde se levantaba el pabellón anoche.
- ¿Su compañero? ah! ese elfo tan amable que vino ayer a última hora. ¿Las botas dice? hmmm sí un momento, en seguida las traigo. -
Pese a sus palabras el hombre se queda mirando a Zevatur más de lo que es educado, o cómodo, hasta que se da cuenta y, enrojeciendo, se va por la trastienda hacia el anexo que vieron desde fuera y que seguramente sea su laboratorio. Vuelve apenas medio minuto después y deja sobre el mostrador un par de botas de cuero negras rematadas por unas plumas negras de cuervo.
Martin las reconoce de inmediato.
- Estas botas son las que le mostré a su amigo ayer. ¿Les interesan? -
PbP Character: A few ;)
Ash recoge sus cosas y sale tras Gowther.
-Ni hablar, voy contigo socio -comenta al eladrim cuando se pone a su altura- estoy harto de calentar la silla. Además tenemos que hablar del cierto anillo que hace juego con mis ojos. Veo que no lo llevas puesto, quizá no te importe que lo luzca yo. En un bolsillo no ayuda a nadie.
Cuando llegan al lugar dónde Gowther se dirigía, Ash le observa sin entender.
Ash el guerrero — Dragon's Hoard (Spanish)
Leobald el caballero — Death and Pain at Saltmarsh (Spanish)
Keeper — Vigilantes en el Cielo (Spanish)
Remington Wizz — Shadow of the Dragon Queen (Spanish)
Gowther al ver el interés del humano sobre el anillo mágico para andar sobre el agua, se lo dio sin problemas.
-Claro, si crees que necesitas este tipo de objetos puedes tomarlo.
Después darle el anillo y ver que la tienda de la vidente ya no estaba:
-Me temo que lo que le pasó a Martin se escapa un poco de nuestras manos y lo que es peor, no se si seremos capaces de revertirlo... Tal vez, si consiguiera algún hechizo adecuado, podría intentar disiparlo, pero bueno, en cualquier caso, el pícaro no debió confiarse ante un ser tan extraño como el que aquí estaba.
Tras esto, Gowther miró las armas del humano y le dijo:
-Podríamos pasar por algún herrero a ver si encuentras algún arma de interés... Más que anillos como este, te puede interesar un arma que te aporte más potencia en el combate. El grupo parece estar ocupado...
"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.
-¡Ah, gracias! ¡Buena idea! - dijo tras ponerse el anillo y disfrutar de su lustre por un momento- ¡Una buena espada nunca sobra! ¡Vamos amigo! Y me cuentas eso del extraño camello de Martín, ¿era un mago?
Rumbo a la armería se pierden por las calles de la ciudad.
Ash el guerrero — Dragon's Hoard (Spanish)
Leobald el caballero — Death and Pain at Saltmarsh (Spanish)
Keeper — Vigilantes en el Cielo (Spanish)
Remington Wizz — Shadow of the Dragon Queen (Spanish)
La armería no está lejos de donde se encuentran, es un edificio que está algo separado de los demás, con la zona de la fragua abierta al aire libre. Dentro varios aspirantes a herreros están ocupados en diferentes trabajos. Herraduras, yugos, clavos, etc.
Un voluminoso anciano humano parece supervisar todo con ojo crítico desde una silla cerca de la fragua. Uno de los ayudantes le muestra una vara de metal y el maestro herrero se la acerca para verla bien, tras inspeccionarla durante unos momentos asiente y se la devuelve al aprendiz, el cual se va a hacer otro trabajo. El ruido de los martillos golpeando el metal llena el espacio.
Uno de los ayudantes les pregunta
- Bienhallados ¿Puedo ayudarles en algo? -
Tras indicarle que buscan espadas el muchacho se disculpa un momento y va a hablar con el maestro el cual les mira y les hace un gesto para que se acerquen.
- Bien bien, clientes. Siempre es bueno tener algún cliente de verdad y no sólo esos racanos granjeros. ¿Espadas me ha dicho Ronny? Ahora les traerá lo que tenemos. No hay mucha demanda de espadas últimamente, aunque con todo lo que se oye sobre dragones atacando ciudades y gigantes campando por sus anchas supongo que eso cambiará dentro de poco jejejeje. Aunque no sé si estos imberbes - Ash se da cuenta de que la mayoría de sus ayudantes o aprendices son hombres hechos y derechos y que muchos de ellos llevan pobladas barbas para protegerse las caras del calor de la fragua y el metal - están preparados para hacer algo tan complicado como una hoja... cuidado Ronny!!! Muchacho bueno para nada... -
El chico llamado Ronny tropieza con una de las espadas que porta, lleva al menos cinco en sus brazos y apenas puede sujetarlas, y se cae estrepitósamente al suelo al enredarse una de ellas entre sus piernas.
- Perdón, disculpen perdón - dice el muchacho avergonzado mientras va recogiendo las espadas y las deja encima de la mesa, mientras el maestro le mira reprobatoriamente.
Dos espadas largas, una corta, una cimitarra y un mandoble (el que causó la caída de Ronny) se alinean en la mesa.
Una simple mirada le confirma a Gowther que ninguna posee propiedades mágicas.
PbP Character: A few ;)
El semielfo parece reconocer las botas casi de inmediato y se acerca rápidamente como si parte de su aturdimiento hubiera desaparecido repentinamente. Con cierta admiración las toca con sumo cuidado, con unos dedos que asoman de unos mitones de cuero ennegrecido, comienza a acariciar las plumas negras de las botas mientras asiente inconscientemente con la cabeza.
- Aquí están... exactamente como las vi ... eso significa que hay un destino ... y todo ello me llevará a ese momento, en ese lugar de ceniza y muerte...
Tras salir de su extraño trance, Martin vuelve a sonreír algo forzadamente esta vez al vendedor.
- Estoy más que interesado honrado mercader... ¿por cuanto las vendería?
" ¡Oh la Oscuridad...! "
Al ver aquellas armas, Gowther recordó que los objetos mágicos en este plano son menos convencionales...
-Muchas gracias pero buscábamos algo más fuera de la norma.
Tras esto se dirige a Ash.
-Parece que este no es el lugar para que cambies esas... Espadas.
Dice mientras las mira de cerca para intentar comprender porque habla de ellas de esa manera.
"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.
Tienda de magia:
El hombre parece dudar durante unos momentos.
- Bueno.. la verdad es que llevo bastante tiempo queriendo venderlas, pero quizá el precio que pido es muy alto. 4.500 monedas de oro, pero ¿quizá podamos hacer algún tipo de intercambio? - dice mirando a Zevatur.
- Disculpe pero, debo preguntárselo. ¿Eso son escamas? - dice señalando sus escamas que revelan su ancestro dracónico.
Herreria:
- Entonces ¿ para qué demonios me hacéis perder el tiempo? - se queja el maestro herrero y con un gruñido y un gesto ordena a Ronny recoger la mercancía.
PbP Character: A few ;)
Con cierta aprension Zevatur se acerca al hombre del pelo revuelto. - Así es.... En algún lugar de mi línea de ancestros imagino que hubo un dragón rojo que me ha dado estás escamas y ciertas habilidades mágicas. - Su expresión refleja los pensamientos sobre su origen y la influencia maligna que pueda tener en su destino. Se remanga el brazoy se lo ofrece al hombre para que lo examine. Con una mirada y un leve gesto de cabeza hacia Martín le indica que no se preocupe.
Zevatur, Rolthos
Los ojos del joven se iluminan con emoción. Veis verdadero interés en él, pero nada de segundas intenciones ni maldad.
- Oh! ¿Puedo? Es realmente interesante. - se ajusta los anteojos y se acerca a observar el brazo de Zevatur.
- Es... - extiende una mano casi inconscientemente - ... precioso... impresionante...- dice levantando la vista y sonrojándose un poco al recordar que está hablando de alguien vivo que está ahí mismo - esto.. perdonad es que nunca había encontrado a alguien con vuestras características. ¿Y decís que esta herencia os ha conferido poderes mágicos? Fascinante! ¿Os importaría si tomo algunas notas? -
Su entusiasmo es casi contagioso.
PbP Character: A few ;)
Martin al sentirse totalmente ignorado por el mercader que está centrando toda su atención en Zevatur, vuelve a dejar las botas en su sitio, su pregunta en el aire, y se retira a un segundo plano de nuevo, dejando al Tiefling el tema de las negociaciones ...
" ¡Oh la Oscuridad...! "
El entusiasmo del hombre le produce cierta disonancia a Zevatur. Siempre ha renegado de su herencia, aunque no del poder que le ha conferido. Esa vergüenza choca disonantemente con el orgullo que el hombre le está haciendo sentir y cuando está a punto de acceder sus ojos se posan sobre las botas... - Siempre he dudado si era la herencia demoniaca la que me daba control sobre el fuego, pero ahora creo que es la de dragón la que domina mi control sobre la magia y el fuego. - Dice mientras retira el brazo del hombre. - Quizás sea una combinación de ambas.... - Concluye.
- Quizás podamos llegar a un acuerdo que incluya esas botas que no paran de coger polvo y ocupar espacio en la tienda?
Zevatur, Rolthos
El hombre mira las botas y de nuevo a Zevatur.
- Claro, claro, por supuesto. - Parece que tiene algo en mente pero se pone completamente rojo al pensarlo. Carraspea, se recoloca los anteojos y finalmente habla.
- Como he dicho el precio de las botas son 4500 monedas. Estoy dispuesto a bajarlo hasta 1500 monedas a cambio de... - se pone casi tan rojo como la piel de Zevatur - un pequeño vial de su sangre. No se alarme por favor, pero me vendría estupendamente bien poder estudiarla. Mis investigaciones han llegado a un punto muerto me temo y necesito este tipo de material para poder avanzar. Lo había descartado, por supuesto, pero quizá si fuera tan amable de darlo voluntariamente como parte de un cambio justo... -
mira al resto y casi de manera atropellada dice.
- Incluiría dos pociones de curación en el trato. Las guardo para mi uso personal, pero de esa forma podría curarse la pequeña incisión necesaria y... cualquier otra molestia-
Aunque está avergonzado parece esperanzado de que Zevatur acepte.
PbP Character: A few ;)
En la herrería.
-Espera espera socio, dejame ver, el acero no encantado también mata
Ash examina la distribución del peso haciendo equilibrar la hojas sobre su indice. Aprecia la rectitud del alma de la hoja mirando desde la guarda. Se acerca las hojas al oído y las golpea ligeramente con su anillo, escuchando su canto. Blande ambas armas y sonríe decantándose finalmente por una de ellas, que resulta ser la más sencilla de las dos.
-Me llevó esta - sonrie al viejo- fea y sosa pero fiable y recia, me recuerda a Adele, una molinera de Candelero que hacía maravillas con su trasero. Oh! No subestimes a las molineras Gowther, sus maridos se pasan el día moliendo cuando el mejor grano lo tiene en casa.
Paga la espada mientras hace gestos obscenos como si agarrarse algo.
-Chicas, saludad a Adele, nos pongáis celosas - guarda el arma a su espalda- y ahora Gowther será mejor buscar al resto antes de que se metan en líos.
Ash el guerrero — Dragon's Hoard (Spanish)
Leobald el caballero — Death and Pain at Saltmarsh (Spanish)
Keeper — Vigilantes en el Cielo (Spanish)
Remington Wizz — Shadow of the Dragon Queen (Spanish)
Gowther parece no acabar de comprender las palabras del extraño humano, aunque tampoco había cruzado el plano para comprender todos los entresijos de las otras razas.
-Si es lo que estás buscando me alegro. ¿Vamos?
Tras la compra de la espada, Gowther fue con Ash a la tienda de objetos mágicos.
"Esta perfecta melodía que acompasa y guía mi movimiento es la voz de mi compañera Aegnor"
Gowther Irerath, El'Tael de los Fragmentos Extraordinarios.