- Ese es el problema con los espías de Iuz. Nunca harán nada que levante ninguna sospecha, nunca se desvelarán, nunca darán ninguna razón para desconfiar. Sembrarán la desconfianza entre compañeros, hasta que sea demasiado tarde. Por eso, todos nos prestamos voluntarios al círculo. - dice mirando a Nessa y a Rolthos. A pesar de lo tenso de la situación, se muestra calmado y convencido en sus actos.

Mira a Jen fijamente:

- Me acusas de estar hambriento de poder y de gloria. Dentro del círculo, podrás oírme decir como sacrificaría hasta mi misma alma, si con ello asegurase la muerte de un vampiro. Lejos de mis metas están el poder y la gloria.

La tos y la necesidad de escupir sangre a un lado interrumpen sus palabras.

- Dime, ¿qué harías tú si descubrieras a un drow camuflado por magia en tu grupo? ¿Qué harías tú si un duergar que pidiese tu confianza? ¿Qué harías tú con un no-muerto que te ofreciera una alianza?

El cazador hace una pausa y piensa para sí mismo "Bastante generoso es que se te ofrezca la oportunidad de sincerarte en lugar de rajar tu garganta mientras dormías..."

- Dime Jen, si ese es tu nombre, ¿qué harías tú en mi lugar?

-Ah bueno, si es por asegurar la muerte de un vampiroooo no pasa naaaada. Disculpa si me he ofendido cuando has mencionado el ligero, minúsculo, pequeñiiiiiisimo detalle de que te has COMIDO LAS ENTRAÑAS DE ALGUIEN COMO YO.- Petulante, hincha el pecho haciéndose el digno. Como si no estuvieta aterrorizado de que los que pensaba que eran sus amigos pudieran matarlo. Pero encuentra que por mucho que lo intente, no puede dejar de hablar. Era parte de esa nueva máscara?

Desvia la vista hacia el techo cuando Cruços, con voz firme pero calmada, trata de hacerle ver su punto de vista. Recuerda entonces una conversación hace algunos meses

"
-No entiendo por qué seguimos aquí. Estás cosiéndole la herida al mismo hombre que te ha tratado de apuñalar!
-Es mi cometido, amor. Soy médico, que esperabas?
-Ya bueno, pero es que te ha tratado de apuñalar!
-Y yo me he defendido. Si. Todos lo hemos visto. Pero no importa de donde venga, tengo que empatizar con quien acuda a mi. No puedo dejarlo así para que muera.
-Y si fuera un enemigo en la guerra?
-Siendo Doctor, no puedo tomar bando en una guerra. Mi único bando es el de los vivos.
-Ay, de verdad que no lo entiendo, pero te lo paso porque estás muy guapo cuando hablas de tu trabajo.
-Bueno... Anda coge las gasas de mi bolsa, por favor."

Y en ese momento, lo entiende.

-Hm... Bueno, a ver. Poniéndolo asi...- Su tono de voz empieza a calmarse. Se rasca la nuca, incómodo. -Mira, no te voy mea mentir, me has hecho daño con tu historia, Cruços. Para una vez que pensaba que tenía amigos, y resulta que me encuentro en una encerrona. Pasaré por el aro, pero si no quiero contestar a algo en concreto, tendrás que respetar mi intimidad. Estas son mis condiciones. Las tomas?

- No me interesan tus intimidades. - el rictus del cazador no vislumbra emoción ninguna. Tenso, ni conciliador, ni agresivo, tan solo tajante. Ni siquiera asoma su habitual sonrisa socarrona.

"Tres preguntas van a decidir si salimos vivos o resulta una carnicería en esta sala. Otra vez en esta situación. Te maldigo Iuz."

Cruços desvía su mirada a Nessa - Adelante.

Rolthos mira a sus compañeros y se apoya en el glaive. O lo intenta porque en realidad no esta ahí. Si Nessa va a conjurar el círculo de verdad el se quedará al margen. "Espero que todo esto acabe bien... No he visto a crucos tan serio nunca antes. Pero si Jen tiene la disposición de entrar en el círculo, hay grandes posibilidades de que no tenga ningún oscuro secreto que ocultar. Veremos qué le pregunta...." Aunque sus pensamientos son privados, su mirada llena de curiosidad, preocupación y expectación lo dice todo.

- Si quieres irte, Jen, lo entenderé, y tendrás toda la libertad del mundo. Al fin y al cabo no tienes por qué seguir con la misión que nos traemos entre manos. Pero a título personal te diré que me gustaría que siguieras con nosotros ... yo te considero una amiga.

Dejo calar esta última palabra, esperando que Jen sienta lo mismo.

- Cruços ha dicho cosas bastante duras. No es un tono con el que esté de acuerdo, y - mirando al cazador - espero que se relaje. Por el bien de todos. Jen ha aceptado entrar en el círculo, Cruços ... espero que lo tengas en cuenta.

Sin perder más tiempo, rebusco en la mesa del druida, buscando algo que me permita hacer marcas en el suelo. Encuentro un trozo de tiza y empiezo a dibujar unas runas en el suelo, formando un círculo alrededor del changeling. Murmuro unas palabras y al cabo de unos segundos, las runas empiezan a brillar con una pálida luz.

- Está listo. Empezad cuando queráis.

Entro dentro del círculo con Jen, para que no se sienta tan intimidada. Además, no tengo nada que ocultar.

Cruços abre la boca, como si intentase decir algo... Pero no lo consigue. Asiente para sí mismo:

- Mis acciones están libres de control.

"Mi albedrío está condicionado. Mis acciones están libres de control" - rememora. Era el mantra que se repetían antes de iniciar el ritual del círculo de la verdad, años atrás en Tenth. Una mentira y una verdad, tanto para confirmar la existencia del círculo como para asegurar no estar bajo la influencia de ningún hechizo mental.

Mira fijamente a lo Sinnombre:

- La primera de tres preguntas. ¿Has servido o sirves a los intereses de Iuz, directamente o a través de sus aliados?

Cuando nessa entra ella misma en en círculo Rolthos se sorprende. Nunca había visto usar el círculo de verdad de esa forma y tras un momento de duda entiende. Lo hace para tranquilizar a Jen, para mostrarle apoyo. Rolthos asiente y avanza, entrando el mismo en el círculo de verdad.

Mira de reojo a Nessa cuando esta se mete en el circulo. Luego se relaja y murmura un "gracias" en voz baja.

Con la primera preguna de Cruços pone los ojos en blanco -A  mi que me importa que se llame Iuz, Iaz, o como sea. No tengo el menor interes en servir a una deidad así. Por no servir, no creo que sirva ni para pasar la escoba  - bufa, y luego ahoga una risa. - Que raro es esto... 

- Contesta sí o no. Solo has dicho que no tienes interés en servir, no si sirves o has servido a sus intereses.

Es sencillo. Yo Cruços, no, nunca he servido, ni sirvo a los intereses de Iuz. Ahora tú sabes sin ningún atisbo de duda que es cierto, Nessa puede confirmar que estoy bajo el influjo de su hechizo.

No creo que esta pregunta invada tu intimidad. Estoy respetando tus propias reglas. Ahora, ¿puedes contestar?

- Cruços, no le des vueltas, creo que ha sido bastante clara. Por todos los dioses!

-En realidad poco te falta para pregunarme el color de mi ropa interior. Arrogante, que eres un arrogante -Las palabras de Jen se materializan automaticamente en voz alta. -No, no he servido al tal Iuz. Pesado. Y si lo he hecho te aseguro que no ha sido conscientemente. Yo solo estoy de parte de un bando, y es el mio propio.

- ¡Nessa, no seas inocente! Falsear una respuesta dando rodeos para no mentir es la forma más sencilla de evitar el círculo de la verdad. Si estoy hiriendo sus sentimientos, me redimiré después, si estás ayudándole con ánimo de proteger su honor y resulta que miente, nos pones en peligro a todos.

Mirando a la sin nombre de nuevo:

-  ¿Has servido o sirves a los intereses de Iuz, directamente o a través de sus aliados? Sí o no.

- ¿Ha muerto alguien que confíase en ti, por tu culpa?

Mi respuesta es sí, soy responsable de una muerte, de alguien que confiaba en mí.

"¿Y qué demuestra eso, si Jen responde que si? Sólo que podría ser igual que tú", piensa Nessa. Pero decide no intervenir aún.

Jen da un pequeño respingo hacia atras cuando Cruços hace la segunda pregunta, adoptando una pose defensiva. Se muerde el labio inferior y arruga la nariz, debatiéndose entre responder o no.

-No.... Lo se...- Admite finalmente. Un flashazo pasa por su mente. La cesta de la compra por los suelos, el último abrazo de su madre. Correr y correr y correr mientras escuchaba los pisotones de la guardia ir por la calle paralela a la de su casa. - No lo se. No lo se. Quizá. Si. No.- Se agacha y se revuelve el pelo, enterrando la cabeza entre las manos. -No lo se. Fue hace mucho. No quiero responder. No lo se.- Repite sin cesar

Nessa apoya una mano en el hombro de Jen intentando calmarla, mientras encara a Cruços:

- ¿A donde quieres llegar? Todos tenemos un pasado. Sabes que yo misma he causado la muerte de siguen, aunque no confiase en mi. ¡Basta ya, Cruços!

- ¿Tan poco la respetas, que no puedes dejar que hable por sí misma? Solo estás alargando esto más de la cuenta. Deja que conteste lo que deba contestar. Parece lo suficiente hábil con la lengua para defenderse sin tu ayuda. Solo resta una pregunta más. - a pesar de las obvias interrupciones de Nessa y las deliberadas provocaciones de Jen, Cruços permanece sentado, tenso e impasible. "Este es otro mundo, ni siquiera los paladines parecen conscientes del horror que está asentado al otro lado de sus fronteras. Tal vez algún día comprendan lo que hoy estás haciendo, solo espero que no sea tarde".

Se apoya en Nessa, entre sollozos silenciosos -No lo se Cruços... No te puedo responder porque no lo se.- Dice al fin. -Venga, haz tu última pregunta sea la que sea, y a ver que es lo que juzgas de todo esto.

- La última pregunta siempre es ¿Por qué?

En mi caso, ¿por qué fue mi responsabilidad? Mi tío y mentor se interpuso entre dos demonios de Iuz que se lanzaron a mi yugular, el día que un changeling desveló la ubicación del concilio, el día de la emboscada que nos masacró. No estaba listo, no fui suficientemente diestro. Como resultado, pereció. Por salvar mi vida.

El tono de voz de Cruços podría congelar el hálito de un dragón blanco de hielo.

- En tu caso la pregunta es, ¿por qué no puedes responder sí o no?

-Por qué? Porque fue cuando no tenía ni 10 años. Porque no me acuerdo. Solo recuerdo a mi madre llegar corriendo a casa y sacarme casi a empujones de mi cuarto. Plantarme un pergamino con un contacto en la mano y decirme que corriera tan rápido como pudiera. Quizá fue culpa mia? Hice algo? Me equivoqué e hice que ejecutasen a mis padres? No lo se. Siento que fue asi, me siento culpable, pero y si son paranoias mias?...

Y si por correr y no parar he hecho lo mismo a Julian...? Oh Dios mio... Julian... Qué he hecho...- Vuelve a enterrar la cara entre las manos. -Por dios como el muy imbecil haya hecho alguna tontería le sacaré del infierno con mis propias manos y lo volveré a mandar ahí.